Perfiles y Siluetas une teatro y circo en las aulas angelinas
Hasta el 18 de enero se extenderá la iniciativa en Los Ángeles, con más de 300 inscritos en talleres intensivos de ambas expresiones escénicas.
Con una fuerte presencia en Los Ángeles, desde su nacimiento en octubre de 1998, la agrupación cultural Perfiles y Siluetas se ha caracterizado por la inquietud gestora y artística de sus integrantes, y que actualmente suman 25.
Lo anterior buscando siempre aportar al desarrollo cultural de la ciudad de origen, lo que se ha traducido en una serie de actividades relacionadas a las artes escénicas durante estos 26 años.
Entre las iniciativas destacan el Festival Biobío Teatro Abierto, desarrollado desde 2009, sumando 15 versiones con presencia de compañías de todo el país; también están al frente de la sala teatral "Bodega 44" que, desde su inauguración en 2015 ofrece una programación permanente, a través del ciclo "Contagio Teatral".
Complemento a lo antes señalado aparece la llamada Escuela de Teatro y Circo que, desde 1999, - su debut- despliega este año la versión número 23, la cual se extenderá hasta el 18 de enero.
La misma que, explican, está destinada a niños, niñas y jóvenes de Los Ángeles y la provincia del Biobío, para ser parte "de este programa gratuito y abierto a toda la comunidad" que ha marcado la formación artística angelina.
"Sentimos un orgullo tremendo de poder seguir haciendo una escuela que ha unido comunidades de la provincia del Biobío, ha fortalecido la Educación Artística en niños, niñas y jóvenes, y que ha sido formadora inicial de varias generaciones de actores, actrices y artistas circenses en la región", resume Mariela Belmar, Directora Ejecutiva de Perfiles y Siluetas desde su fundación, 1998.
Parte de la historia
Inaugurada ayer en la UdeC, campus Los Ángeles, Belmar reiteró el sentimiento de satisfacción al consideras que la "Escuela" es parte de la historia de la ciudad, incluso, la Región. "Muestra el poder que tiene el arte en el desarrollo social, personal y ciudadano en nuestros estudiantes, el poder que tiene el arte y el trabajo en comunidad en la mejora de la calidad de vida", anota la representante directiva respecto a la propuesta estival para la cual se dispusieron 357 cupos, 82 para el grupo infantil, 126 para Técnicas Circenses y 149 para Técnicas Teatrales (inscripciones se cerraron este domingo).
En lo específico, señaló la encarga, los grupos se organizan por edad y disciplina escogida. "Dos infantiles con niños de 10 a 13 años, y otros seis grupos de jóvenes divididos entre artes circenses y teatro", ilustró, donde cada grupo cuenta con un profesor, que "guía el proceso", además de los que imparten las asignaturas.
- ¿Y las especialidades?
- Las principales son Técnicas Circenses y Teatro, las cuales se subdividen en asignaturas: en el caso de Circo encontramos Acrobacia, Aéreos, Malabares, Clown y Movimiento; mientras que en Teatro tenemos clases de Actuación, Comedia, Pantomima, Voz y Canto y Danza. Ahora, en la primera semana dependiendo si eliges circo o teatro tomas todas las asignaturas. La segunda se prepara el espectáculo final, y te puedes especializar en una asignatura.
- ¿Cómo sienten ha crecido la Escuela desde la primera versión?
- Mucho en estos años, partimos con 70 alumnos (2000), cuando nunca pensamos que en ese entonces llegarían tantos. Era un equipo pequeño donde unos pocos hacíamos clases y la gestión al mismo tiempo. De este modo, fue creciendo en cantidad de estudiantes, equipo de trabajo, asignaturas, metodologías, espectáculos; donde al día de hoy, gracias a la gran demanda de los jóvenes de Los Ángeles y un equipo de 35 personas posibilitando esto.
- A partir de una mirada retrospectiva ¿cuál es el aporte acá?
- Hemos tenido un aproximado de seis mil jóvenes que han pasado por nuestras aulas durante estos años, por lo que siento ha calado profundamente en nuestra ciudad. Es un espacio educativo no tradicional, que es muy intenso en el trabajo que se realiza pero también en las experiencias que se viven. Los chicos se encuentran no solo con un curso en el cual aprenden teatro o acrobacia, se encuentran con gente de todas las clases sociales, creencias, tendencias y colores. Es un espacio seguro, que abraza la diferencia y la celebra, cosa que muchos chicos no encuentran en sus colegios o familias.