Asume el nuevo Gobierno Regional
Mañana lunes se realizará la ceremonia de cambio de mando del Gobierno Regional, institución compuesta por el gobernador regional y el Consejo Regional y que, tras las elecciones del año pasado, contarán con una renovación importante no sólo del cargo que encabeza la institucionalidad, sino también de los propios consejeros regionales.
El cambio de mando será un hito, ya que concluye la primera administración elegida por votación popular y que comenzó su gestión en julio de 2021, cuando asumió el actual gobernador regional Rodrigo Díaz por cuatro años -con posibilidad de reelección para el periodo inmediatamente posterior - y el Ejecutivo pasó a tener un representante del nivel central a través de la figura del delegado presidencial. Es importante tener presente que las figuras del gobernador regional y del delegado presidencial fueron creadas por una reforma constitucional en el año 2017, que dividió el cargo de intendente, manteniendo al primero designado por el Presidente de la República y al segundo siendo elegido vía sufragio universal.
En un contexto distinto al de 2021, que todavía tenía a la pandemia como uno de los principales factores de preocupación en lo sanitario y también en lo económico, por los devastadores efectos que había provocado en el empleo y la actividad productiva, el nuevo gobernador Sergio Giacaman, asumirá con grandes expectativas de diferentes sectores. Se trata de una afirmación que tiene base clara en la alta votación que llevó al representante de Chile Vamos al triunfo, que sumó más de 750 mil sufragios en la segunda vuelta realizada en noviembre.
Giacaman no es un desconocido en el servicio público, ya que no solamente fue secretario regional de Desarrollo Social durante el primer gobierno de Sebastián Piñera, cargo que dejó en 2012. Sin embargo, regresó a un cargo gubernamental en abril del 2019, cuando asumió como intendente regional en el segundo gobierno del mismo mandatario. También estuvo en el área pública y en organizaciones sociales.
Dejó el cargo en noviembre de 2020, con la intención de ser candidato en las elecciones parlamentarias y tras haber abandonado la misma idea un año antes, cuando el estallido social de octubre de 2019 lo llevó a mantenerse en cargo por la complejidad de las circunstancias. En el marco de esa decisión enfrentó también los primeros meses de la pandemia por covid-19, que fueron especialmente difíciles por las estrictas medidas que se aplicaron en la emergencia sanitaria.
En este inicio de 2025, las nuevas autoridades asumirán en una Región que sigue atenta las medidas para la reactivación económica, en especial tras el cierre de la Compañía Siderúrgica Huachipato, que tiene una profunda preocupación por la seguridad pública y que quiere ver pruebas de probidad y transparencia.
Además, su gestión no puede dejar de lado uno de los grandes desafíos, como es también avanzar en el proceso descentralizador, que se vincula directamente con la democratización del cargo. Hoy es más necesaria que nunca la validación de la premisa que se plantea respecto de que cuando las decisiones en torno a las políticas públicas se toman más cerca del lugar en que se aplican, resultan mucho más adecuadas y exitosas.
De esta forma, la autoridad deberá apelar de forma muy intensa a una buena coordinación con todos los niveles de gobierno -desde los municipios hasta el Gobierno central- así como a una creciente capacidad de fomentar la articulación público-privada en la definición de un "proyecto regional", que represente verdaderamente los intereses y aspiraciones locales de manera transversal. El propio Giacaman anunció el mismo día de su triunfo en las urnas que durante 2025 convocará a un gran encuentro en Biobío junto a Corbiobio, ya que "Biobío es y debe ser siempre la capital de las regiones".
Para iniciar la gestión y en un proceso que el nuevo gobernador comenzó desde hace algunas semanas, es fundamental la forma en que se establezcan las relaciones con las distintas autoridades, ya sea regionales, comunales o parlamentarias, así como también con los gremios productivos y las organizaciones sociales. Es importante que prevalezca la cooperación y la coordinación, como lo plantean hoy algunos representantes en un reportaje de esta casa editorial, porque de otra forma será muy difícil avanzar de forma significativa en aquellas iniciativas que requieren de un trabajo conjunto para beneficiar a las comunidades.
Altura de miras, generosidad y visión de futuro son algunas de las cualidades que quienes mañana asumirán sus nuevas responsabilidades tienen la oportunidad de mostrar, con el objetivo de realizar una gestión que se recuerde por sus logros y también por su aporte al desarrollo regional.
En este inicio de 2025, las nuevas autoridades asumirán en una Región que sigue atenta las medidas para la reactivación económica, en especial tras el cierre de la Compañía Siderúrgica Huachipato, que tiene una profunda preocupación por la seguridad pública y que quiere ver pruebas de probidad y transparencia.