La falta de tenencia responsable de mascotas -principalmente de perros- se ha hecho notoria tanto en las ciudades como en las zonas rurales. En estas últimas, se forman manadas de perros asilvestrados, que llegan a atacar a otras especies.
Hace unos meses la Conaf daba cuenta de que guardaparques reportaron el hallazgo de un pudú muerto por ataque de perros en el Parque Nacional Nonguén. Este problema está cada vez más presente y revela las consecuencias que puede alcanzar la falta de tenencia responsable de mascotas o animales comunitarios para la conservación de la fauna silvestre. Los perros y gatos sin control no sólo atacan o dañan cazando a la fauna nativa, sino que también transmiten enfermedades graves a los animales silvestres y su sola presencia en hábitats naturales perturba ciclos de reproducción y alimentación, contribuyendo negativamente a un hábitat cada vez más fragmentado.
En localidades rurales de la Región del Biobío se señala que cuando familias se trasladan a sectores urbanos, dejan que sus mascotas circulen libremente por los terrenos aledaños, formándose manadas que atacan a especies domésticas, como aves, cerdos y corderos. Como se quemó gran parte del sector rural durante los incendios forestales del verano pasado, no quedaron rejas que puedan delimitar los territorios y controlar el movimiento de los perros. Mientras que en los centros más poblados, como en Concepción, hay manadas de perros abandonados que acompañan a personas en situación de calle y que incluso llegan a agredir a transeúntes.
La existencia de grandes cantidades de perros abandonados es un problema que afecta a casi todas las ciudades. Muchos de ellos son animales enfermos que vagan por las calles, sobre todo en Concepción y Hualpén, invadidos por parásitos y en condiciones lamentables. Según estudios realizados hace unos años por la Seremi de Salud de la Región del Biobío, más de la mitad de los animales que vagan por las calles tienen dueño, por lo tanto, están abandonados, lo que revela cuál es el origen del problema y la poca conciencia que tienen las personas acerca de la tenencia responsable de sus mascotas.
Una encuesta del Centro de Investigación para la Sustentabilidad de la Universidad Andrés Bello, en Santiago, Valparaíso y Concepción, reveló un aumento en la preocupación de la ciudadanía por este tema. El 73% de los encuestados del Gran Concepción consideró a los perros abandonados un problema importante que va en aumento. Los principales motivos de riesgo que ven son los ataques a las personas, la transmisión de enfermedades y que ensucian los espacios públicos. El 12% de los consultados ve un riesgo por la caza de animales silvestres por parte de los perros abandonados, algo que no es muy perceptible en los ambientes urbanos, pero sí en los sectores rurales. El 63% dijo estar de acuerdo con el control de la población de perros mediante la esterilización, mientras que el 17% consideraba que era aplicable la eutanasia, basada en el bienestar animal, y el 6% estimaba correcto utilizar cualquier método.
Los gobiernos y municipios han llevado adelante, el Plan Nacional de Esterilización, y como parte de él se realizan cirugías a perros y gatos, lo que permite ir acotando el número de animales en las calles. Pero es fundamental que la ciudadanía comprenda que debe hacerse responsable de sus mascotas. La proliferación de perros callejeros no existiría si sus dueños fueran más conscientes, manteniéndolos bajo su custodia y alimentándolos en forma conveniente.
Cuando en julio de 2017 se promulgó la ley Nº 21.020 de tenencia responsable de mascotas y animales de compañía, conocida como "Ley Cholito", se pensó que sería la solución para el problema que representan los animales abandonados, pero no ha ocurrido así porque el abandono de mascotas va en aumento.
En los centros más poblados, como en Concepción, hay manadas de perros abandonados que acompañan a personas en situación de calle y que incluso llegan a agredir a transeúntes.
