La voz de los habitantes de Coronel y Lota
Durante las últimas semanas las comunas de Lota y Coronel han sido el centro en la preocupación por la seguridad a nivel regional, ya que ambas suman más de una veintena de homicidios durante el presente año, siendo la ciudad coronelina la que registra las cifras más alarmantes.
Se trata de dos comunas que están férreamente unidas, ya sea desde el punto de vista social como territorial, y que durante 2024 han sumado situaciones que reflejan una mayor violencia y nivel de delincuencia local. Desde los episodios relacionados con violencia entre escolares, que incluso llevaron a lamentar un adolescente como víctima fatal, a hechos en que fallecieron personas en la vía pública por disparos realizados por desconocidos, Lota y Coronel enfrentan momentos complejos.
Esta última es una de las tres comunas de la Región del Biobío que es parte del plan Calles sin Violencia desde hace casi un año y medio, iniciativa que el Gobierno lleva adelante con el objetivo de intervenir de forma específica con un trabajo coordinado de las policías y el Ministerio Público, enfocado en el delito de homicidios. Pese a ello, los crímenes persisten, más allá de las medidas que se aplican de forma permanente en los distintos puntos de Coronel.
Este es el panorama que mantiene preocupados a los habitantes de las dos comunas, lo que se ve reflejado en la evaluación que realizan representantes de las juntas de vecinas y de las cámaras de comercio locales. Desde estas organizaciones se plantean como urgentes algunas tareas que estiman necesarias para mejorar la seguridad, como son una mayor dotación policial en las calle y aunque destacan que son parte de las reuniones generadas con los municipios y el Ejecutivo, también plantean que los encuentros se van sumando, pero sin que necesariamente vean cambios en la situación cotidiana que viven a nivel comunal.
Dentro de lo más requerido se encuentra una mayor aplicación de la inteligencia policial, además de operativos constantes y más presencia de carabineros en áreas periféricas que generan inseguridad, entre otros. De hecho, en la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Coronel valoran la puesta en marcha de 50 cámaras de seguridad, pero también tienen claro que el uso de la tecnología es solo una herramienta más si no se consideran otras iniciativas que complementen su operación.
Uno de los puntos que está claro es que existe una relación entre el aumento de los delitos de homicidio con el crimen organizado y el narcotráfico, además de la delincuencia común que se debe enfrentar en todas las ciudades, por lo que las medidas de monitoreo requieren una acción de mayor envergadura asocia da a la investigación y búsqueda de responsables de los hechos. delictivos.
Para vecinos y comerciantes una de las acciones claves sería su integración a los planes de seguridad que vayan definiendo, así como también a las mesas de trabajo que se desarrollan en los distintos niveles, ya sean comunales, de autoridades o policiales. Esta opción significaría poder entregar de forma directa los testimonios y observaciones de quienes son los más perjudicados por la inseguridad de ambas comunas y que, según aseguran, ha sido una factor relevante en el temor existente a salir después cierta hora espacios públicos o caminar por las calles con mayor tranquilidad.
Por ahora, los habitantes de Coronel y Lota esperan que la crisis de inseguridad que afecta a ambas pueda dar señales de ser superada, al menos en torno a la alta cifra de homicidios que las aqueja y que no es justa para quienes todos los días deben trasladarse a trabajar, estudiar, etc. o simplemente quieren disfrutar de las zonas donde mantienen sus hogares y su vida cotidiana.
Dentro de lo más requerido se encuentra una mayor aplicación de la inteligencia policial, además de operativos constantes y más presencia de carabineros en áreas periféricas que generan inseguridad, entre otros.