Laguna Laja registró alza del 62% en su nivel respecto a junio del 2023
Informe de la USS dio a conocer el estado de los embalses a nivel regional. Desde la DGA destacaron superávit local.
El último sistema frontal que azotó a la Región del Biobío dejó diversas afectaciones en viviendas y en rubros como el agrícola, considerando daños en infraestructuras, inundaciones, entre otras. Sin embargo, el nivel de agua caída habría tenido un impacto positivo en los embalses, según detalló un estudio, logrando que estos cuerpos de agua lleguen a casi un 50% de su capacidad.
Según el "Informe sobre nivel de embalses", elaborado por el Centro del Agua de la Facultad de Ciencias de la Naturaleza de la Universidad San Sebastián, si se compara el estado actual de los 25 embalses que monitorea la Dirección General de Aguas (DGA) a nivel nacional, 20 de ellos incrementaron sus niveles.
En el caso del Biobío, dos de los tres embalses están con niveles superiores al compararlos con el 2023, como es el caso de Pangue y Laguna Laja, mientras que sólo el embalse Ralco está un 7% por debajo de los niveles del año pasado, pese a presentar un crecimiento de su volumen en un 21% durante el último periodo de lluvias en la zona.
Laguna laja
El informe destacó especialmente a Laguna Laja, ya que, si bien hoy está a un 33% de su capacidad, tuvo un crecimiento de casi el 3% respecto a la semana pasada, de un 62% respecto a la misma fecha del 2023 y a un 154% respecto a todo el año pasado. Además, está a su mayor nivel para este mes del año al menos desde el 2020, siendo, además, el embalse más grande de Chile.
El director del Centro del Agua USS, Federico Errázuriz, explicó que "Biobío es una región con una gran capacidad de embalses, muy fuertemente orientados a la generación hidroeléctrica. Sin embargo, los últimos años han existido conversaciones y acciones del sector eléctrico que han permitido una mejor coordinación con usos en agricultura y turismo, ambas actividades con gran presencia en la Región".
En relación a las proyecciones, Errázuriz añadió que en los últimos años Chile ha sufrido de manera muy severa la sequía con problemas de agua potable en sectores rurales y "otras grandes dificultades para la agricultura, por lo que el llamado que hacemos es a pensar en la infraestructura hídrica del futuro, a pensar en nuevos embalses para aquellas zonas que lo requieran y donde nuestra cordillera permita su construcción".
Medición oportuna
Respecto a lo planteado por Federico Errázuriz, la directora regional de Aguas del Ministerio de Obras Públicas, Daniela Ceballos, indicó que, comparando las precipitaciones actuales con años anteriores, se registra un superávit del 21,2% en la Provincia de Concepción y del 75,2% en la Provincia de Biobío, lo cual marca un aumento notable en los niveles de agua, especialmente tras los eventos climáticos recientes en el mes de junio.
"Sin embargo, la última década ha estado marcada por déficits hídricos prolongados y sequías en la región, generando alta preocupación entre los usuarios de agua y la población local. Además, el aumento de las precipitaciones ha incrementado el riesgo de inundaciones, afectando a los habitantes de la Región", sostuvo Ceballos.
En este contexto, la medición precisa y oportuna de variables meteorológicas por parte de la Dirección General de Aguas, añadió Daniela Ceballos, se vuelve crucial para comprender y mitigar los impactos de las sequías y riesgos de inundación. "Reforzar la red hidrométrica permitirá avanzar hacia una gestión más sostenible de los recursos hídricos y mejorar la seguridad hídrica, protegiendo así a la población y proporcionando información crucial para una respuesta oportuna por parte de las autoridades", concluyó.