Incendios: colaborar para prevenir y actuar
Patricia Cabalá Leiva, gerente general Innergy y Gasoducto del Pacífico,
Cada temporada de incendios pone a prueba a nuestro país, sus instituciones, empresas, comunidades y, particularmente, a la Región del Biobío por su potente vocación forestal. La ocurrencia de estos siniestros obliga al despliegue abnegado de bomberos y brigadistas, la acción decidida de autoridades políticas, al concurso de técnicos y expertos, pero también a la colaboración de quienes nos desenvolvemos desde la esfera privada.
Todos estamos convocados a la hora de cuidar nuestro entorno y proteger la vida de las personas, y la misión es una: evitar a toda costa el crítico escenario de 2023, que nos dejó con un saldo regional de más de 200 mil hectáreas consumidas por el fuego y una veintena de fallecidos.
Soy una convencida del valor de la cooperación público-privada. En esa lógica, en diciembre, iniciamos una ronda de encuentros destinados a fortalecer las acciones de prevención con actores públicos y privados, pero también con las comunidades que están en el entorno de nuestro gasoducto, que conecta el abastecimiento de gas natural argentino con las industrias y empresas que utilizan este noble combustible para producir, generar empleos y prosperidad en este hermoso territorio.
Quiero destacar el trabajo que hemos hecho junto a Corma, con quienes intercambiamos ideas para hacer frente a la emergencia. Mientras ellos detallaron su experiencia en combate de incendios, nosotros presentamos el trazado subterráneo de nuestros ductos, a la vez que ofrecimos capacitaciones y un terreno de propiedad corporativa como eventual puesto de comando.
Y como los incendios no conocen fronteras regionales, tal como lo demuestra el siniestro de Florida-Quillón, visitamos las dependencias de Conaf Biobío y Ñuble, y a sus respectivos responsables les indicamos lo mismo: prestos para aportar en lo que resulte necesario.
Esta disposición es compartida por muchas otras empresas y servicios instalados en la zona y estamos ciertos de que es el camino correcto. La colaboración público-privada en situaciones de emergencia no solo es una necesidad, sino también una estrategia inteligente y de altísimo valor. Las empresas aportan conocimiento e insumos, mientras que el sector público representa la coordinación y la autoridad necesaria para dirigir los esfuerzos.
Este modelo de colaboración, consideramos, podría extenderse a través de la creación de alianzas estratégicas entre el gobierno, el mundo privado y otras organizaciones de los territorios. La implementación de protocolos de respuesta conjunta, el aprendizaje colaborativo y el intercambio de datos pueden fortalecer aún más la capacidad de contrarrestar los incendios actuales y futuros.
Ese es el llamado que queremos hacer y la apuesta de nuestras empresas: cooperar estrechamente, proporcionar toda la información necesaria y aportar en aquello que nos resulte posible en el ámbito de nuestras competencias. No hay otra forma de hacer frente a los incendios forestales.