"Espero que las materias donde queda claro que no hay responsabilidad, vayan siendo dejadas de lado"
En el cierre de un año marcado por la polémica por traspaso de fondos, la autoridad regional aborda el proceso judicial y pone algunas dudas sobre su futuro político.
Rodrigo Díaz Wörner reconoce que el 2023 ha sido el peor año de su vida, tanto en lo político como en lo personal y familiar, y confiesa que "lo pasé francamente mal en ese minuto, incluso entre julio y agosto, fue muy difícil seguir la vida. Es como si me hubiese encontrado con un terremoto como el del 2010, pero siempre pensando que uno trabaja para el bien común y que hay un compromiso programático que honrar".
La máxima autoridad del Biobío ha estado en el ojo del huracán mediático durante todo el segundo semestre, luego de que se conociera la arista regional del Caso Convenios, con traspasos de recursos públicos a más de una quincena de fundaciones investigadas por el Ministerio Público por distintas irregularidades que podrían significar delitos.
En conversación con Diario EL SUR, explica que "soy una persona que adhiere a la doctrina social de la Iglesia, y ahí está mi forma de hacer frente a la vida, con mayor o menor grado de éxito. Desde allí, señaló que yo no hago política por dinero, ni por mi vanidad y adhiero profundamente a la democracia, que funciona con instituciones que hacen su trabajo y que apuntan acercarse al bien común", y añade que "he intentado asumir el liderazgo para resolver los problemas en sus distintas dimensiones".
Luego de hablar de las brechas administrativas que superar -"hay una serie de compromisos a implementarse y otros ya ejecutados"- Díaz aborda los aspectos vinculados al ámbito penal, y señala que "mi política es una sola: la verdad y que las instituciones operen. He dado testimonio del mayor apoyo que puedo dar al funcionamiento del Ministerio Público, con el correspondiente paso por Tribunales que tiene este caso, y tengo la completa disposición a colaborar tanto allí como ante la Contraloría según corresponda".
Incluso, cuenta que una de las lecciones que le dejó el abordaje del Caso Convenios -junto con no concurrir más a los matinales, ya que "allí la verdad no importa"-, es dejar de lado la soberbia: "Si en algún minuto tuve actos de soberbia, creo que estoy mucho más humilde en este minuto, y me siento más cómodo buscando atender los problemas y resolver los compromisos desde la humildad".
Diligencias judiciales
-¿Teme ser formalizado por alguna de las aristas que actualmente investiga la Fiscalía?
-Uno es coherente cuando dice algo y obra en consecuencia. Yo intento serlo en mi vida, y si digo que voy a prestar toda la colaboración del caso, es porque lo estoy haciendo.
También yo esperaría que en lo que va avanzando el año, particularmente tanto en las aristas administrativas como penales, las materias donde va quedando claro que no hay responsabilidad, vayan siendo dejadas de lado.
Son varias las investigaciones que existen y, por lo tanto, uno esperaría que no se parta por lo difícil, y que eso signifique mantener un manto de duda respecto de cosas que son evidentes o van resultando que evidentemente no son motivo de faltas administrativas ni de delitos criminales.
-De esto, ¿puedo desprender que usted espera no ser la última personal formalizada en cualquiera de las aristas que investiga el Ministerio Público?
-Yo diría que si parece evidente que en una fracción de las fundaciones cuestionadas no hay problemas, se cierren las investigaciones y que se enfoque en aquellas donde si existen problemas. Y en aquellas donde haya problemas, se prestará toda la colaboración posible.
-¿Cómo califica usted lo que se señaló en el primer control de detención sobre su persona, por parte de las defensas de los involucrados? El abogado del exadministrador regional dijo que usted era el responsable máximo, tanto de la crisis política como de la posible comisión de delitos.
-Es bastante lógico que uno va a escuchar distintas interpretaciones de distintas partes. Me han preguntado por declaraciones de algunas personas como la señorita Polizzi o su expareja, y en todas he respondido lo mismo: que funcionen las instituciones y que la verdad se establezca. Sé que se va a demorar la verdad, y tengo la convicción de que soy una persona honesta y que eso que me legó mi padre, se lo voy a legar a mis hijos.
-Hasta esta entrevista, usted no ha sido acusado ante un Tribunal de una posible comisión de delitos. ¿Usted es inocente en esta investigación que se ha realizado hasta ahora?
-Creo que se lo respondí recién.
El futuro político
-¿Está la disposición de afrontar los próximos desafíos electorales? Se lo pregunto porque 2024 es un año electoral, en donde se votará para escoger gobernador, y hasta la última entrevista que usted y yo tuvimos, su intención era repostular en octubre.
-No ha cambiado nada de lo que le he dicho a usted: me lo preguntó el año pasado, a inicios de este año y durante algunos puntos de prensa. Sin haber cambiado nada, tengo la convicción de que el riesgo de los incendios forestales es tan grande que se puede llevar a una ciudad entera.
Mi acción en este minuto solo tiene espacio para colaborar en que no nos quememos, y si ocurre, tengamos una reacción distinta respecto a años anteriores. Lo que haga hasta inicios de marzo girará en torno a ello, ya que mi principal preocupación es pensar en el bien común. Salgamos de esto, y veamos cómo afrontamos el año.
-¿Competirá como independiente? Se rumorea que Demócratas le ofrecería competir por el partido, que hoy se encuentra en proceso de legalización en la Región.
-Es mi intención y he seguido siendo independiente. Pero, ante todo, soy coherente y mi foco ahora es que no se queme gente, que no se muera gente, y si tenemos afectación, no tengamos un sistema de reconstrucción basado en subsidios de entidades públicas porque los resultados están a la vista: no se han entregado más viviendas que los dedos de una mano.
-Ocurra lo que ocurra en octubre, ¿ha pensado dejar la vida política después de completar su periodo como gobernador?
-Cada día tiene su afán. El afán de hoy es que no nos quememos; veamos después que viene. En mi vida como empleado público, si le puedo decir, he privilegiado trabajar en la Región donde vivo.