La batalla final entre azules y cruzados: disputan último cupo a la Sudamericana
A la UC le basta ganar el sábado a Unión La Calera para quedarse con el puesto; el cuadro de Pellegrino, en cambio, necesita un triunfo y milagros.
Universidad Católica y Universidad de Chile son dos de los clubes que tienen mucho que jugarse en la última fecha del Torneo Nacional: pese a cumplir campañas de mediocres para abajo, son candidatas a quedarse con el último cupo para la Copa Sudamericana: los cruzados ocupan el octavo lugar (39 puntos) y los azules el noveno (37).
Los dos equipos tienen que jugarse la vida el sábado (18:00 horas) en el cierre del campeonato para acceder al torneo continental, pero la U también necesitará algunos "milagros".
Al equipo de Nicolás Núñez le bastará con vencer a Unión La Calera (41) que actualmente ocupa el último espacio copero. Con ello alcanzaría el séptimo puesto y aseguraría su participación en la Sudamericana 2024 sin importar otros resultados.
Los de Pellegrino, en cambio, no solo necesitan ganarle a Ñublense; además requieren que la UC pierda y que Magallanes descienda: así alcanzarían el octavo lugar que dará pasaje a la copa solo si los albicelestes se van a Primera B y no pueden usar el cupo como finalista de la Copa Chile.
El año en juego
El jugador cruzado Cristián Cuevas aseguró ayer que el duelo con La Calera es "el más importante del año".
"Fue un año bien irregular para nosotros, pero seguimos teniendo opciones. El sábado es la última que tenemos. Estamos más ilusionados que nunca porque es lo que va a marcar el 2024. No queremos quedarnos sin esa chance, es lindo jugar copas todos los años", expresó.
"Hemos tenido diferentes cambios en el año, jugadores que se fueron, nos ha tocado improvisar, jugadores que no están en sus posiciones, pero se han tratado de entregar de la mejor manera al equipo", remarcó.
Era lo mínimo
Mientras, el volante de Universidad de Chile Israel Poblete hizo una dura autocrítica acerca del rendimiento de su equipo durante la actual temporada.
"Teníamos un plantel capacitado para pelear el campeonato. Como está el campeonato chileno, no creo que sea una excusa tener un plantel 'corto'; creo que teníamos plantel para pelear. Es nuestra autocrítica, nos faltó el salto de calidad para mantenernos y tenemos que luchar con Ñublense para poder entrar a una copa, que es lo mínimo que merece esta institución y ahora no lo estamos cumpliendo", planteó.
"Todavía tenemos una opción, vamos con toda la fe al último partido que tenemos que ganar. Teníamos la ilusión de pelear arriba, sobre todo como terminamos la primera rueda. Nunca pudimos encontrar el funcionamiento para sostener eso, está la autocrítica que no pudimos sostener el primer semestre, y que el segundo nos caímos", añadió y de manera descarnada dijo que la posición en que se encuentran en la tabla "es porque la merecemos, porque perdimos muchos puntos y se podría haber jugado mejor. Debimos sumar más puntos, no estar donde estamos ahora que es una mala posición".