Inician reactivación avícola y primera compra de aves será en octubre
La avícola Palou será la primera en retomar sus funciones, mientras que las otras empresas evalúan medidas para la reapertura.
El pasado 22 de agosto, el ministro de Agricultura informó que el país está libre de la influenza aviar en aves de corral, tras haberse concretado todos los análisis correspondientes desde el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), aunque quienes administran planteles productivos en la Región del Biobío sostienen que ello no implica la erradicación definitiva del virus, que se mantendría en aves silvestres, por lo que se están tomando ciertos resguardos previo a reanudar la actividad en las instalaciones, tales como reforzar la bioseguridad.
Aunque la infraestructura de los planteles estaría en condiciones óptimas, el retorno de las operaciones se concretará según la situación financiera de cada empresa. La primera en hacerlo será la avícola Palou, que comprará las primeras 62 mil aves en octubre, cuyos primeros resultados productivos se verían en marzo de 2024. Los administradores aseguran que la reposición total de los pabellones tardará alrededor de dos años.
Situación de planteles
Frente al riesgo aún vigente, fortalecer las medidas de bioseguridad es una de las principales prioridades. Así está llevándose a cabo en la avícola Chequén, donde además proyectan restablecer sus funciones en el mediano plazo. "Yo diría que van un paso poco más prudente que el resto, monitoreando un poco qué pasa en general con los planteles que fueron víctimas", señaló su gerente, Ignacio Vera.
El objetivo es iniciar con una unidad de prueba de alrededor de 20 mil gallinas, por al menos un año de vida, tras lo cual se podrían comprobar nuevas estrategias para operar. "En la medida de que haya una estabilidad en el funcionamiento, ahí recién decidiríamos si repoblar para llegar rápidamente al volumen que se tuvo", explicó, pues sólo la adquisición de aves para el plantel implicaba invertir $1.200 millones, y hacerlo "sin la certeza de que se pueden morir en cuatro meses es demasiado riesgoso".
En paralelo, la avícola Palou se reactivará durante la primera semana de octubre, iniciando con la compra de 62 mil aves, menos de la mitad de su capacidad total. El gerente de Operaciones, Sergio Vallejos, estimó que "la producción va a volver a principios de marzo del próximo año, las aves pasan por un proceso de crecimiento antes de ser productivas". La idea es analizar la capacidad de flujo que irán generando los primeros lotes, para así solventar los que vendrán después.
Por su parte, los planteles de Agrochequen, al igual que en el resto de las avícolas, están vacíos y disponen de la infraestructura necesaria. No obstante, el gerente, Diego Contreras, sostuvo que "como familia no sabemos si nos vamos a reponer. Se agradece siempre la ayuda, pero es mucho más el capital que se necesita para levantarse". Esto, considerando además la inversión que implica la compra de insumos, alimentos y contratación de funcionarios.
Apoyo económico
Algunas empresas están optando a un cofinanciamiento de Corfo, medida de apoyo que repone un 70% de un determinado monto, y que ha resultado accesible según cada caso, pues cabe recordar que las afectaciones económicas fueron millonarias. Desde Agrochequen, por ejemplo, aún se desconoce si podrán acceder al beneficio, pues no disponen de los recursos necesarios para cubrir el 30% restante.
Otras alternativas de sustento económico que se han analizado consideran la coordinación con Banco Estado vía financiamientos blandos, línea que se ha trabajado junto al Ministerio de Agricultura; financiamiento privado, y el uso de ahorros propios. Los administradores valoraron el apoyo estatal, aunque mencionaron que ampliar la ayuda económica tendría un mayor impacto. "Con eso sí podríamos echar a andar las cosas, más que cofinanciar, porque hay empresas que quedaron con caja, otras que no, otras con compromisos judiciales, son distintas realidades", precisó Diego Contreras.
Bajo esa misma línea, el gerente de Chequén planteó que "se deberían poner garantías para que las aseguradoras sean capaces de ofrecer mejores ayudas a los productores. Lo que hoy día pone en riesgo el emprendimiento en este tipo de negocios es cómo asegurar que no vas a perder todo de la noche a la mañana".