Falta de profesional del área al vender medicamentos lidera origen de sumarios a farmacias
Además de la ausencia del químico farmacéutico, se vigilan otros requisitos para la distribución de los medicamentos, como su calidad, el modo de almacenamiento y la cadena de frío.
Por Estefany Cisternas Bastias
Tras la pandemia del covid-19 la seremi de Salud del Biobío se propuso retomar con mayor resguardo la fiscalización a las farmacias de la región, con el objetivo de lograr nuevamente las cifras de años anteriores.
En el 2022, la autoridad sanitaria concretó más de 300 fiscalizaciones a farmacias de la región que dieron origen a 30 sumarios, de este modo garantizan que todos los medicamentos que se entregan o venden en farmacias cumplan con las exigencias sanitarias de seguridad establecidas.
Fiscalizaciones
Al 10 de agosto se han realizado un total de 153 fiscalizaciones a farmacias, tanto a las pertenecientes a cadenas como a aquellas independientes, con el objeto de verificar aspectos relevantes para la seguridad farmacológica de la población. En detalle 68 de las inspecciones se concentraron en la provincia de Concepción, 66 en la del Biobío y 19 en la de Arauco.
En estos procesos de control se detectaron incumplimientos que dieron origen a 21 sumarios sanitarios: once en la provincia de Concepción, siete en la del Biobío y tres en la de Arauco.
La falta más recurrente en estos casos, siendo el motivo de 15 sumarios en el Biobío, fue por la ausencia de un profesional químico farmacéutico, ya que el Código Sanitario indica que "las farmacias deberán ser dirigidas técnicamente por un químico farmacéutico que deberá estar presente durante todo el horario de funcionamiento del establecimiento".
Otros dos sumarios fueron por incumplimiento de turno asignado por la autoridad sanitaria, uno fue debido a la presencia de un cosmético adulterado, otro debido a irregularidades en el manejo de medicamentos psicotrópicos. Los dos restantes fueron debido a no respetar la condición de venta establecida en el registro sanitario del medicamentos y por la modificación de la planta física de farmacia sin previa autorización sanitaria.
Al respecto, el seremi de Salud, Eduardo Barra, señaló que estos sumarios se efectúan fundamentalmente cuando se detecta en la fiscalización un aspecto que les parece preocupante.
"Por un lado es la ausencia de químico farmacéutico, que es algo que está definido legalmente y que tiene que haber uno en cada farmacia, como también algunos problemas con la distribución de los medicamentos, en su calidad, el almacenamiento, la cadena de frío y una serie de otras condiciones que determinan que nosotros estemos proveyendo a la comunidad de medicamentos seguros", explicó Barra.
Por otro lado, también se identificó como un punto crítico lo que son los medicamentos psicotrópicos y estupefacientes, cuyo control de venta es estricto al estar sometidos a la Ley 20.000 que sanciona el tráfico de drogas.
Desde la seremi explicaron que en cuanto a los medicamentos cuya venta es directa y de receta simple queda bajo responsabilidad del químico farmacéutico velar por el uso racional del medicamento. Sin embargo, en lo que respecta a medicamentos con condición de venta "receta retenida", éstos pueden controlarse, ya que los respaldos deben quedar bajo resguardo de la farmacias y foliados.
Es por esto que con la fiscalización, a parte del objetivo punitivo, se trata de un proceso en el cual se están definiendo formas de persuasión en las personas que trabajan en una farmacia.
Recomendaciones
Otro aspecto fundamental de estos procesos de inspección desarrollados por la autoridad sanitaria está orientado a controlar la disponibilidad de medicamentos bioequivalentes genéricos.
En cuanto a estos medicamentos se recalcó la importancia en que la gente conozca que existen diversas alternativas, que está a disposición el producto original que en general tienen un precio más elevado y que lo hace menos accesible al bolsillo de la población, pero que también está la alternativa genérica cuya calidad y seguridad ya ha sido validada por parte del Instituto de Salud Pública, provocando un similar efecto terapéutico que un producto de marca.
Además del proceso de control, el llamado de la autoridad sanitaria fue al uso racional de medicamentos, lo que permite optimizar sus resultados farmacológicos y disminuir los efectos adversos. En ese contexto, las recomendaciones son a respetar la dosis prescrita por el médico, verificando la fecha de vencimiento, adquiriéndolos siempre en lugares autorizados, almacenándolos protegidos de la luz solar y de la humedad, fuera del alcance de los más pequeños, y descartando prácticas como la automedicación o la recomendación de medicamentos a terceros.
153 fiscalizaciones a farmacias de cadenas e independientes ha realizado la seremi de Salud en la región.
15 sumarios se efectuaron debido a la ausencia de un profesional químico farmacéutico exigido por el Código Sanitario.