Fiscalización al cuidado de los humedales urbanos
Los humedales urbanos contribuyen a moderar los efectos de crecidas de ríos, dado que almacenan el agua y luego la liberan lentamente a los cauces. Además, la vegetación y las raíces de las plantas reducen la velocidad de las inundaciones, controlando los deslizamientos de tierra generados por eventos climáticos extremos.
La ley 21.202 de protección de humedales urbanos, del año 2020, permite que los municipios puedan solicitar medidas especiales para proteger esos recursos naturales e incluso detener permisos de edificación y de subdivisiones de predios cuando se afecten los humedales. En la Región del Biobío ya hay 16 humedales declarados como urbanos y el denominado Rocuant-Andalién, es el de mayor superficie en la zona y el 80% de esta se encuentra en Talcahuano.
El Ministerio de Medio Ambiente definió cuarenta áreas prioritarias en las que se aplica el plan de protección de humedales, en el período 2018-2022. De ellos, siete correspondieron a la Región del Biobío y tres a la de Ñuble. La decisión se fundamenta en que esos ecosistemas tienen un gran valor medioambiental, por lo cual deben quedar protegidos.Ennuestrazona,elplanincorporó entonces los humedales Desembocadura del Biobío, Boca Maule (Coronel), Tubul-Raqui, lagunas y humedales de la provincia de Arauco, la desembocaduradelríoCarampangue,el humedal Vasco da Gama (Hualpén), y el humedal Los Batros (San Pedro).
Para su definición, se evaluó que fuesen sitios prioritarios para la conservación de la biodiversidad, que constituyan hábitat para especies flora o fauna clasificadas en categoría de amenaza para especies endémicas o migratorias y que exista factibilidad real de protección, como disponibilidad de terrenos fiscales y la voluntad de los propietarios.
En abril pasado, La Ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, llegó a Concepción para anunciar la declaración de los últimos dos humedales urbanos de la Región. Se trata del humedal Paicaví- Tucapel bajo, que se emplaza en la comuna de Concepción, y del humedal Price, ubicado en la comuna de Hualpén.
El primero es un importante ecosistema que estaba amenazado por el avance de la construcción inmobiliaria y que en noviembre de 2021 fue escenario de un incendio, que provocó un gran daño ambiental, tanto a la fauna como a la flora de ese lugar, considerado un importante pulmón verde del Gran Concepción. El fuego arrasó con cinco hectáreas y las llamas comenzaron por los fuegos artificiales y bengalas que algunos hinchas de un club de fútbol lanzaron en el lugar.
A través de estas declaraciones, el Ministerio del Medio Ambiente, busca asegurar la protección de estos ecosistemas reconocidos, que se encuentren total o parcialmente dentro del límite urbano, declarados bajo la figura de humedal urbano, de oficio o a petición de los municipios. Para que en la práctica este objetivo se cumpla, la ley entrega a las municipalidades herramientas concretas para resguardar esos espacios, a través de la elaboración de ordenanzas generales para su protección y para la postergación de permisos de subdivisión predial, loteo, urbanización y de construcciones.
De ahí la complejidad que, además de las amenazas de intervención de los terrenos de los humedales, haya particulares que insistan en utilizar estos espacios como vertederos o microbasurales, dañando a la vista de la comunidad estos lugares. Además del control ejercido por los municipios a través de las herramientas que les otorga la ley, es importante que los habitantes de las comunas involucradas jueguen un rol activo en la denuncia de estas situaciones, y también en el cuidado de estas zonas. Los humedales son zonas de protección de la biodiversidad y ayudan a la mitigación de la crisis climáticas, no hay que olvidarlo.
La ley entrega a las municipalidades herramientas concretas para resguardar esos espacios, a través de la elaboración de ordenanzas generales para su protección.