Debacle de la U dejó a Pellegrino con un pie afuera de la banca
Los azules completaron cuatro derrotas consecutivas tras caer goleados 5-2 ante O'Higgins. Según fuentes internas de Azul Azul, el entrenador tendrá su última oportunidad ante Curicó.
Hace solo un mes Universidad de Chile llegó a la punta del Torneo Nacional. El 8 de julio venció a Huachipato y quedó primera junto a los acereros y Cobresal. Y sus hinchas, acostumbrados en los últimos años a sufrir con la opción del descenso soñaron quizás con una temporada buena por fin. Pero desde ese día los azules se desbarrancaron: cuatro derrotas seguidas que tienen al equipo de Mauricio Pellegrino en la mayor crisis desde su llegada, que podría arrastrarlo lejos de la banca del club.
La última caída fue escandalosa. Porque si bien los traspiés ante Palestino y Magallanes fueron estrechas y hasta cierto punto discutibles en cuanto a rendimiento, lo mostrado el lunes ante O'Higgins en el triunfo celeste por 5-2 fue un desastre total.
Salvo un par de chispazos los jugadores parecieron zombies sobre la cancha. Durante el primer tiempo, hay que ser justos, ambos equipos durmieron, pero en el segundo los rancagüinos despertaron y el equipo universitario siguió sin reaccionar. Y cuando llegaron los goles celestes, apenas se produjo reacción de los jugadores de la U. Para peor una de esas reacciones causó la expulsión de Nicolás Guerra.
Dt contra las cuerdas
Una muestra clara de que esta derrota dejó a los azules completamente pesimistas fueron las palabras de Pellegrino cuando terminó el partido.
"Estos resultados cuestionan todo. Estoy avergonzado y apenado. El equipo dejó de creer en lo que hacemos", lamentó el DT argentino, mostrando que tal vez no se siente capaz de generar una reacción en sus jugadores. Y de inmediato el gerente deportivo azul, Manuel Mayo, dijo que "solo nos queda trabajar y pedir perdón". Nada muy alentador.
Además ayer se sumó la versión de Mauricio Pinilla, exjugador azul que conoce lo que pasa dentro del plantel: en radio Agricultura afirmó que "Pellegrino se ha peleado con varios adentro. Él quiere un salto de calidad, pero ve demasiada liviandad dentro del club. Se siente solo".
En ese escenario ayer ya se hablaba en Azul Azul de que la última oportunidad del adiestrador sería el duelo contra Curicó Unido que está fijado para el próximo lunes: según publicó Cooperativa, una nueva derrota significará el fin del proceso del trasandino al mando de la U. Esto significaría que el DT no llegaría al Superclásico con Colo Colo, fijado para inicios de septiembre.
Sin embargo, el entrenador recibió el respaldo de parte del capitán de la U, Luis Casanova, quien ayer asumió la responsabilidad que tiene el plantel en esta mala racha.
"Tenemos que seguir luchándola como siempre lo hemos hecho. Mantenemos totalmente la convicción del técnico. Debemos ajustar algunas cosas. Cada uno sabe lo que está haciendo mal y hay que ponerle el pecho a las balas", afirmó en defensor.