"Nos estamos desplegando para llegar a lugares en donde no se conoce la labor de la Marina"
La máxima autoridad naval en nuestra Región recalcó el aporte local que la institución entrega, en ámbitos como el portuario y el pesquero, además del trabajo que realiza Asmar en Talcahuano.
Después de los años en los cuales la emergencia sanitaria causada por la covid-19 generó un distanciamiento social que impidió efectuar actividades presenciales, el escenario actual regresó a la normalidad, algo muy importante para instituciones como la Armada de Chile, la cual basa gran parte de su accionar en el contacto directo con las personas.
Este año se conmemoran 144 años del Combate Naval de Iquique, una fecha esencial en el calendario naval y nacional y que en esta oportunidad contempla una serie de actividades con la comunidad, contó el contraalmirante Daniel Muñoz Miranda, comandante en jefe de la Segunda Zona Naval.
"Estamos retomando las actividades con mucha intensidad post pandemia. Una de las primeras iniciativas que tomé era difundir a la Marina. Es muy conocida en los puertos, en las caletas, pero hay muchos lugares donde hay jóvenes y niños, hacia el interior y en la cordillera, que no conocen a la Marina, por tanto, tomamos este año en particular una iniciativa fuerte para llegar a esos lugares", comentó la autoridad.
Agregó que la idea es alcanzar la máxima cantidad de establecimientos educacionales, en los cuales un marino explique las capacidades y potenciales que tiene la institución. "La idea es desplegarnos y llegar a todos esos sitios que en oportunidades no son de fácil acceso", manifestó Muñoz.
De manera complementaria, se contemplaron actividades tradicionales, como el desfile de escolares en la Base Naval de Talcahuano, quienes rindieron honores a los héroes de Iquique el 16 de mayo.
La agenda de actividades también se nutrió con deportes náuticos, eventos académicos y sociales, señaló el uniformado.
Contribución
La esencia marítima de la Región del Biobío ha quedado de manifiesto desde tiempos remotos. Hombres y mujeres han impulsado las más diversas áreas del quehacer en el mar. En este contexto, el contraalmirante Muñoz se refirió al aporte que la Armada hace al desarrollo económico, "(lo) realiza día a día a través de la autoridad marítima, que es la encargada de fiscalizar y controlar, para que estas actividades se desarrollen con seguridad en el marco legal vigente".
Esta dimensión también es abordada por medio de la labor que se efectúa en los Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar) en Talcahuano. Al respecto, dijo que "es una empresa que está a la vanguardia en el desarrollo tecnológico y productivo en la Región y a nivel internacional, que da trabajo en forma directa a aproximadamente a dos mil trabajadores y en forma indirecta a otros miles a través de empresas subcontratadas".
Con la trayectoria y la experiencia adquirida a lo largo del tiempo, Asmar Talcahuano ha abordado diversos desafíos en la construcción naval, dando sus primeros pasos a mediados de la década del 1980, con la construcción de las barcazas tipo Batral, pasando por el buque científico "Cabo de Hornos", los cuatro patrulleros de zona marítima; uno de ellos, el OPV "Piloto Pardo" que opera en la jurisdicción de la Segunda Zona Naval, y su desafío actual el buque antártico "Almirante Viel", lanzado al agua en diciembre del año pasado y que ahora está en su fase de complementación e integración de equipos y sistemas, para iniciar sus pruebas en la mar.
En relación con los próximos desafíos, el contraalmirante Muñoz detalló que uno de ellos ya está en marcha, refiriéndose al proyecto Escotillón IV, "el que está en su fase inicial, con la construcción de la primera unidad de una serie de cuatro buques multipropósito, que reemplazarán a las naves del Comando Anfibio y Transportes Navales, que están llegando al término de su vida útil", puntualizó.
Biobío destaca también por su gran actividad en el mar y, en ese sentido, la presencia portuaria es muy grande. El contraalmirante Muñoz recordó que en Biobío se concentran alrededor de 15 muelles y terminales marítimos, más de 37 sitios de atraque, que contemplan los puertos de Penco, Lirquén, Lota, Coronel, Talcahuano, San Vicente. "Entre esos puertos se mueve el 23% de la carga nacional a través de todo este sistema portuario", indicó.
Recordó que también hay una actividad fuerte en la pesca. La pesca artesanal local concentra aproximadamente el 48% de lo que se mueve a nivel nacional, a lo que se suma la pesca industrial que es cerca del 86%, "por tanto, toda esta actividad portuaria y pesqueras están ligadas al quehacer de la Marina, a través de la autoridad marítima, por eso decimos con tanta fuerza que hay un vínculo fuerte de la institución con la Región del Biobío y, principalmente, con su gente", concluyó el comandante en jefe de la Segunda Zona Naval.
El aporte que la Armada hace al desarrollo económico se realiza día a día a través de la autoridad marítima, que es la encargada de fiscalizar y controlar, para que las actividades se desarrollen con seguridad en el marco legal vigente".
Segunda
Zona Naval
La Segunda Zona Naval posee una jurisdicción que cubre cinco
regiones de nuestro
país, naciendo en la
Región del Maule, en la desembocadura de la
laguna Boyeruca, muy cerca de Vichuquén,
y terminando en la
desembocadura del río Bueno, en la Región de Los Ríos. Todo ese
territorio cubre 660
kilómetros de costa,
con 29 lagos, 15 ríos y
un poco menos de dos millones de kilómetros cuadrados.