El 96% de las familias venezolanas indica que seguirá viviendo en la región
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de la ONU presentó los resultados de la encuesta aplicada a la población migrante venezolana, en ella se caracteriza en términos laborales, educación y necesidades, entre otros, a quienes hoy habitan en la zona .
Concepción y Talcahuano fueron la puerta de entrada para que la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de la ONU lograra caracterizar a la población venezolana presente en la Región del Biobío. Así se destaca que gran parte de los mayores de edad trabajan de forma dependiente, cuentan con algún registro nacional, viven con sus familias de 4 a 6 integrantes principalmente en la capital regional, proyectando su estadía en la zona y cuya principal necesidad es regular su situación migratoria.
El coordinador territorial de la OIM, Víctor Flores, destacó que esta encuesta se aplica por primera vez en Chile y que se escogió la Región del Biobío por dos razones: "según las últimas estimaciones oficiales realizadas a noviembre de 2020, la Región del Biobío es una de las que ha experimentado el mayor crecimiento relativo de población migrante en el país y segundo es que esto se ha debido al aumento de población residente de nacionalidad venezolana. De hecho, según las últimas estimaciones, de toda la población migrante residente en la región, 49% y fracción corresponde a población venezolana".
Flores agregó que "más allá de la condición de regularidad o irregularidad en que se encuentre una persona o grupo familiar migrante en Chile, es que por política de Estado está garantizado el acceso a la educación. Entonces, poder abordar un marco muestral en el ámbito educativo nos permitió cubrir a distinta población venezolana residente, independientemente de su situación migratoria e incluso de su tiempo de permanencia en la región".
Perfil
Para el estudio se entrevistó a 290 integrantes de familias venezolanas con niños matriculados en 18 establecimientos educacionales de Concepción y Talcahuano. Las familias están integradas en su mayoría por venezolanos y algunas son mixtas. El 42% de los integrantes son menores de 18 años y las personas de 25 a 39 años representan el 33%, mientras que el 53,9% de los integrantes son mujeres.
El 79,8% de las personas mayores de 18 años se encuentra trabajando, de ellos el 58,9% son dependientes y un 41,1% independientes. Sobre la regularidad, el 45,2% cuenta con un contrato de trabajo, mientras que un 47,6% no lo tiene; de quienes no tienen contrato, el 12% son personas empleadas y 35% independientes. Destacan las mujeres como el 86% de la población que no trabaja, siendo la principal razón las labores domésticas y de cuidado.
En cuanto a registros, un 91,5% de los venezolanos posee algún tipo de documento emitido en Chile, en el caso de menores de edad un 3,8% no cuenta con ningún registro. Destaca también que el 83% de quienes llevan menos de un año en la región ya cuentan con un documento. En materia de educación, el 39,9% de los miembros de los hogares se encuentra estudiando, se reportaron 21 casos de personas desde los 18 a los 64 años que cursan estudios; 7 de ellos técnicos y 4 universitarios.
Hogares y necesidades
El 69% de los hogares venezolanos son habitados por 4 a 6 miembros; el 99,3% comparte residencia y gastos con familiares. El 78,6% de los hogares se ubican en Concepción y un 13,1% en Talcahuano; el 84,1% vive en una casa independiente o departamento; un 11,7% vive en el cuarto de una casa y un 1,7% en un conventillo. Sobre la tenencia, el 95,5% arrienda y 2,4% tiene su vivienda propia en proceso de pago o totalmente pagada. El 96,2% de los encuestados indica que seguirán residiendo en la región el 2023.
Respecto a la participación en espacios comunitarios, el 87,2% asegura que no ha ido parte de estas instancias. Un 41% de los encuestados asegura haber experimentado uno o más episodios de discriminación. Por otra parte, el 37% indica tener una enfermedad crónica; 96,9% se atiende en centros públicos de salud.
El 13,4% asegura haber recibido ayuda humanitaria en el último semestre, principalmente alimentación. Sobre necesidades insatisfechas, un 75% apunta a la regularización de situación migratoria, 37,2% de una vivienda o albergue seguro, un 33,1% a alimentación y 23,8% a asistencia médica.