Kay Bird: "Tras Hiroshima, Oppenheimer se deprimió"
El coautor de "Prometeo Americano: el triunfo y la tragedia de J. Robert Oppenheimer" (Debate) habla de los claroscuros del llamado "padre" de la bomba atómica.
Por Franco Fasola
Ahora sabemos de J. Robert Oppenheimer por la esperada película del director Christopher Nolan, de pronto estreno, protagonizada por Cillian Murphy, Emily Blunt, Robert Downey jr., Matt Damon, Florence Pugh, Kenneth Branagh, Gary Oldman y Rami Malek.
No mucho se sabe del libro en que se sustenta: "Prometeo Americano: El triunfo y la tragedia de J. Robert Oppenheimer" (Debate), premio Pulitzer 2006 como mejor biografía, escrito a cuatro manos por el fallecido investigador Martin J. Sherwin y Kai Bird.
Mientras Sherwin estuvo 20 años investigando, Kai Bird, quien contesta desde Estados Unidos, le dedicó cinco años de trabajo a la controvertida figura de "Oppie", como le decían. Un hombre que, silenciosamente, selló el destino del siglo pasado cuando, en julio de 1945, a meses de Hiroshima, dirigió la detonación secreta de la primera bomba atómica en el desierto de Nuevo México. Era el resultado del Proyecto Manhattan.
Desde ese mismo instante, el llamado padre de la bomba atómica se decidió a luchar contra el desarrollo de la bomba de hidrógeno y la escalada nuclear. De ahí en más fue acusado de comunista, perseguido y calumniado.
-Oppenheimer era un hombre complejo, un intelectual. ¿De dónde venían sus experiencias y conocimientos?
-Sí, era una especie de enigma. Un intelectual, un físico de la teoría cuántica que, sin embargo, también escribía algo de poesía, admiraba la literatura francesa e inglesa y aprendió sánscrito para poder leer el Bhagavad Gita en el original. Era de ascendencia judía y alemana, pero creció en Nueva York, donde sus padres le educaron en la Sociedad de Cultura Ética, básicamente una religión laica surgida del judaísmo reformista.
-Se le considera el padre de la bomba atómica. ¿En qué momento fue consciente de su poder destructivo? Su trabajo inauguró la era atómica.
-En 1939 se enteró de que se había producido el primer experimento de fisión e inmediatamente se dio cuenta de que esto significaba teóricamente que el átomo podía aprovecharse para producir energía, pero también potencialmente un arma de enorme poder destructivo.
-¿Cómo acabó dirigiendo el Proyecto Manhattan?
-En 1942 el General Leslie Groves llegó a California buscando reclutar algunos científicos prominentes para convertirse en el Director Científico del Proyecto Manhattan. Groves conoció al profesor Oppenheimer, que entonces sólo tenía 38 años. "Oppie" nunca había administrado más que una docena de estudiantes graduados. Pero Groves vio que era ambicioso y estaba muy motivado. Vio que Oppie era un físico consumado, pero también ese raro científico que también podía explicar las cosas en un inglés sencillo. Y lo que es más importante, le gustó la propuesta de Oppenheimer de que Groves construyera un laboratorio secreto en un altiplano aislado de Nuevo México, reuniera a todos los cientos de químicos, físicos e ingenieros necesarios y les dejara trabajar libremente detrás de una valla de seguridad.
-¿Cómo se sintió Oppenheimer tras la explosión de Hiroshima?
-Tras la noticia de Hiroshima, sabemos por las cartas privadas de su esposa Kitty que Oppie se sumió en una profunda depresión. Sabía de antemano que el "artilugio" mataría a miles de civiles, y se sintió conmocionado por lo que había creado.
-¿Qué medidas propuso Oppenheimer tras ver el poder destructivo de su creación?
-Argumentó pocos meses después de Hiroshima que deberíamos prohibir la bomba y crear una Autoridad Atómica Internacional que tuviera poderes soberanos para vigilar e inspeccionar cualquier laboratorio o fábrica en cualquier parte del mundo para impedir la construcción de armas atómicas. Advirtió que cualquier nación, por empobrecida que fuera, podría construir una bomba atómica si así lo decidía. No había secretos y sería simplemente un problema de ingeniería, además relativamente barato. Así predijo en 1945 la realidad que vivimos hoy: con Corea del Norte, Pakistán, India, Israel y quizá pronto Irán con arsenales nucleares.
El jefe de einstein
-¿Fue amigo de Einstein?
-Eran amigos y colegas. Oppie era el director del Instituto de Estudios Avanzados de Princeton, donde Einstein era Senior Fellow. Por tanto, Oppie era técnicamente el "jefe" de Einstein. Pero curiosamente, también discrepaban sobre la cuántica. Einstein tenía dudas sobre la teoría y Oppenheimer pensó que Einstein era testarudo en su cuestionamiento de una teoría que era evidentemente "cierta".
-¿Cómo fue su camino de héroe a paria?
-En 1954, los enemigos políticos de Oppenheimer en Washington le sometieron a un juicio secreto. Le acusaron de ser comunista e incluso espía de los rusos. Las pruebas eran escasas. Su verdadera motivación era silenciar al "Padre" de la bomba atómica por oponerse públicamente al desarrollo de la bomba de hidrógeno. Al final del juicio fue desterrado. Las transcripciones del juicio se filtraron al New York Times y Oppenheimer se convirtió en un paria, un intelectual público humillado. Se retiró a una cabaña en las Islas Vírgenes, donde pasaba muchos meses al año viviendo aislado en la playa. Murió de cáncer de garganta en 1967, a los 64 años.
-Pronto se estrena la película de Nolan basada en su libro. ¿Qué espera de la película?
-Tengo grandes esperanzas de que esta película inicie una conversación global sobre la historia y la relación de la humanidad con los temas nucleares.
La depresión profunda de Oppenheimer fue conocida gracias a las cartas privadas de su esposa Kitty. Sabía que el "artilugio" mataría a miles de personas inocentes.