"No es posible que los delincuentes tengan más derechos que las víctimas y ese es un primer cambio fundamental que hay que hacer con la nueva Constitución"
Para el abogado es relevante que existan instituciones robustas que brinden seguridad a los chilenos, tanto en el caso de las policías como de las entidades del Estado, las cuales deben evitar caer en la corrupción.
Seguridad pública es uno de los temas más importantes que deben ser consignados en la nueva Carta Magna chilena, en opinión de Cristian San Martín Carrasco, candidato demócrata cristiano para ser consejero constitucional. El abogado tiene muy claro qué aspectos se deben considerar sobre este tema en el texto fundamental, con la finalidad de garantizar una vida con mayor paz para la ciudadanía.
"Hay un tema que hoy y siempre será importante y es la base para el progreso de toda sociedad, me refiero a la seguridad y, por lo tanto, creo que ahí tenemos una materia central que la nueva Constitución tiene que abordar. Lo primero en este sentido es que no es posible que los delincuentes tengan más derechos que las víctimas y ese es un primer cambio fundamental. Por eso es que voy a proponer la creación de la 'Fiscalía de la víctima', para que un abogado acompañe al afectado por un delito en todo el proceso penal", explicó el profesional, quien es oriundo de Talcahuano.
Sobre el mismo ámbito, San Martín agregó que es fundamental establecer la seguridad como un derecho garantizado por la Constitución, "entonces, después del derecho a la vida, es necesario el derecho a la seguridad para trabajar, estudiar y llevar la vida cotidiana", enfatizó.
El candidato dijo que para lograr lo anterior es necesario generar instituciones robustas que permitan concretar el objetivo de una vida más segura para los chilenos. "No solo me refiero a las policías, sino que también a todas las instituciones del Estado, para prevenir que sean corrompidas por el crimen organizado. En ese sentido, Chile necesita un Estado fuerte y moderno, que se defienda de forma eficaz y eficiente de la corrupción", apuntó.
Experiencia
Tal como se indicó antes, Cristian San Martín nació en Talcahuano. Estudió Derecho en la Universidad de Concepción y su trayectoria profesional la ha desarrollado en gran parte en el sistema público. Es así como ha desempeñado cargos como administrador municipal de Penco y director jurídico de Penco y Lota. También se desempeñó en el Departamento Jurídico de la Municipalidad de Chiguayante, como jefe Jurídico de la antigua Gobernación Provincial de Concepción y como director regional del Registro Civil del Biobío, puesto al cual accedió por medio del sistema de Alta Dirección Pública.
Toda esta experiencia es un aval, afirmó, para contribuir en la redacción de la nueva Carta Magna. "Tengo un conocimiento amplio del funcionamiento del Estado y lo que espero es poder aportar desde esa mirada al nuevo proceso constitucional", recalcó.
Justamente, al ser consultado acerca de dónde nace su interés por participar en la redacción del nuevo texto fundamental, San Martín sostuvo que está convencido que hay un mandato de la ciudadanía por cambiar la actual Constitución, considerando que el proceso anterior fracasó. "Logramos una segunda oportunidad que no podemos perder para lograr una buena y nueva Constitución y cuando me propusieron la posibilidad de ser candidato entendí que tenía una responsabilidad, como profesional del Derecho, de entregar mi aporte. He propuesto a la ciudadanía ser un consejero constitucional que apoyará los cambios sociales, pero al mismo tiempo respetando nuestra tradición republicana, esto es cambios en orden, seguridad y democracia", aclaró.
En la misma línea, Cristian San Martín agregó que hay que partir de la base que el país llegó a un cambio constitucional producto de una crisis social, algo que, opinó, no se le puede olvidar a nadie, "por lo tanto, una nueva Constitución va a generar en el país certeza y paz a través de un nuevo pacto social, cuyo cuerpo principal debe ser la nueva carta fundamental. A partir de ahí el país debería retomar su ritmo de desarrollo y crecimiento, pero con un traje a la medida del siglo XXI y las demandas de la ciudadanía".
El candidato expresó que el camino que fue abordado en el proceso anterior no fue el más correcto, con errores que se cometieron y que derivaron en que más del 62% de los chilenos rechazaran la propuesta de Constitución que se presentó, por no interpretar el pensamiento mayoritario de los ciudadanos del país.
"Un cambio constitucional no es una refundación de un país, menos de uno como el nuestro con más de 200 años de historia. Tenemos que tomar lo bueno de estos dos siglos de República y a partir de ahí, hacer los ajustes que nos permitan mejorar hacia el futuro. Por lo tanto, tras la experiencia anterior, me parece que es adecuado que una comisión de expertos adelante trabajo y que tengamos un marco sobre el cual movernos, de modo que ninguna mayoría circunstancial pretenda imponer fórmulas extremas que no se hacen cargo de la historia y tampoco del futuro", concluyó.
Desarrollo económico
y protección social
Si bien la seguridad es una materia prioritaria para Cristian San Martín, hay otros temas que considera que deben ser avalados por la nueva Constitución, como el que esta permita el desarrollo económico de la sociedad, lo cual incluye la protección social.
Respecto a esto, explicó que "es importante que el sector privado pueda emprender, pero al mismo tiempo que el progreso llegue a todos y todas. Esto implica que tengamos un sistema de salud justo para todos y todas y que no discrimine por los ingresos, lo mismo en materia de educación, manteniendo la libertad de elección de los chilenos y chilenas. Es también, la oportunidad de dar un marco al futuro sistema de pensiones", dijo.
Es importante que el sector
privado pueda emprender, pero al
mismo tiempo que el progreso llegue a
todos y todas. Esto implica que
tengamos un sistema de salud justo
para todos y todas y que no discrimine por los ingresos, lo mismo en materia
de educación, manteniendo la
libertad de elección de los
chilenos y chilenas".
Según el
candidato,
una nueva
Constitución
generará en el
país certeza y
paz a través de
un nuevo pacto
social, cuyo
cuerpo principal debe ser la Carta Magna. Partiendo de ahí, Chile debe retomar su ritmo de desarrollo y crecimiento, pero según las
circunstancias planteadas por el siglo XXI y las
demandas de la ciudadanía.