Conectarse y colaborar es básico para que los seres humanos logren avanzar como grupo y se desarrollen. Lamentablemente, en muchas ocasiones, las personas no se vinculan o no lo hacen de manera efectiva, lo que perjudica el crecimiento de un territorio o colectivo.

La Región del Biobío muestra una carencia al respecto, según se detalla en la Estrategia Regional de Desarrollo (ERD 2015-2030). En específico, el documento habla de la necesidad de acrecentar el capital social y la asociatividad en la zona, como una manera de potenciar la gobernanza democrática en el territorio. Además, para tal efecto, se requiere concretar la inclusión de los distintos actores locales en estos esfuerzos.

Frente a tal diagnóstico, el Círculo de Capital Social (CCS) del Biobío, entidad conformada por casas de estudios superiores de la Región, ideó el proyecto "Fortalecimiento del capital social de jóvenes", por medio del cual se creará e implementará un programa de formación de experiencias vivenciales para dotar a jóvenes de habilidades y conocimientos en esta área, impactando en la competitividad de la zona.

La iniciativa es financiada por el Gobierno Regional del Biobío, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC-R), y en ella participan la Universidad del Bío-Bío (UBB) -ejecutora del proyecto-, junto con las universidades de Concepción, Católica de la Santísima Concepción, Santo Tomás, Del Desarrollo y San Sebastián. La Corporación Desarrolla Biobío también es parte del Circulo de Capital Social.

La instancia dictará un diplomado regional sobre capital social dirigido a jóvenes de último año de carreras de pregrado, algo inédito en Chile. Esta acción se desarrollará de manera experiencial y se focalizará en un apoyo que los participantes entregarán a pymes de las tres provincias del Biobío.

De la misma forma, el proyecto ayudará a aumentar la vinculación entre las casas de estudios locales, algo que en la actualidad se presenta de manera deficiente.

experiencial

La instancia comenzó sus actividades en agosto de 2022 y entre los productos ya avanzados se menciona la constitución de un comité consultivo, como también la realización de una serie de capacitaciones previas a quienes estarán encargados de dictar el diplomado posterior.

Una primera capacitación se desarrolló en noviembre, la cual estuvo liderada por Carlos Vignolo, especialista en innovación radical e Ingeniería de la Educación.

El académico opinó que "creo que es un proyecto pionero de alto impacto y replicable en otros lugares, porque, por un lado, apunta a generar habilidades de liderazgo e innovación socioemocionales para jóvenes líderes y, esto es muy importante, no de una universidad ni de dos universidades, sino de todas las universidades que integran el Círculo de Capital Social. Es una forma de empezar a generar masa crítica y coordinación entre las universidades".

Añadió que la iniciativa involucra vincular a las universidades más fuertemente con el Gobierno Regional, con organizaciones sociales y con empresas y fortalecer las capacidades de facilitadores en los procesos de fortalecimiento del capital social y de habilidades directivas, liderazgo e innovación. "Así que, a mi juicio, estamos en presencia de un proyecto virtuoso con múltiples objetivos y que, por cierto, hay que diseñar bien, gestionar bien y ejecutar bien", manifestó.

En diciembre se efectuó una segunda capacitación en dependencias de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas (Facea) de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), esta vez a cargo de la trabajadora social y académica de esa institución, Sonia Stevens, y del académico UBB, José Miguel Pazols. La tercera y última capacitación se llevará a efecto en enero de 2023.

Héctor Saldías, coordinador del proyecto, destacó que es muy importante lograr que las universidades trabajen de manera colaborativa, en especial en una región que se conoce por su gran actividad de educación superior. "Pero hay ocasiones en las cuales las universidades no conversamos entre nosotras y cambiar eso es un subobjetivo de este programa", dijo.

Respecto al diplomado, Saldías indicó que pronostican que comenzará, a más tardar, en agosto de 2023. "Lo más importante es que el diplomado va a ser experiencial, es decir, durante su realización los participantes van a tener que colaborar y apoyar a instituciones emprendedoras de la Región y efectuar alguna intervención en ellas para mejorar su desempeño", explicó.

Por último, el encargado destacó que el proyecto también busca instalar el concepto de capital social en Biobío, que se transforme en una nueva herramienta que distintos actores, públicos y privados, e incluso organizaciones sin fines de lucro, puedan aprovechar.

Verónica Silva, decana del Facea UCSC y presidenta del Círculo de Capital Social Biobío, opinó que esta iniciativa tiene una relevancia mayor a la que pudo tener hace cinco años, esto por la realidad que viven los jóvenes hoy, por cómo han crecido, por el tiempo transcurrido de pandemia y la distancia social que esta implicó, además de las dificultades que tienen los jóvenes para construir capital social a causa del mundo virtual en el que están insertos.

"Entonces, la relevancia que tiene el proyecto, precisamente, apunta a eso, a preparar a un grupo de jóvenes que, de manera mucho más cercana, más certera, aprendan a construir capital social y que eso vaya abriendo puertas. Otro elemento importante del proyecto es que nos une como universidades. Ponernos de acuerdo, cuestión que no es fácil, pero que de a poco se ha ido logrando", aseguró la académica.

Iván Valenzuela, jefe de División de Fomento e industria del Gobierno Regional del Biobío, comentó que este programa trata de abordar e implementar la formación de experiencias vivenciales dirigidas, principalmente, a jóvenes en capital social, con lo cual se podrán mejorar las habilidades y adquirir conocimientos que repercutan tanto en el entorno directo como en la competitividad regional. "Como ustedes saben, el Fondo de Innovación y Competitividad tiene el objetivo de impulsar la competitividad regional a través de la innovación, a través de la transferencia de conocimiento que se hace de las casas de estudio, con el objetivo de llevar a la Región al sitial que corresponde, principalmente en innovación y competitividad", detalló.

En el proyecto y en las capacitaciones que se desarrollan bajo el alero de este, también se invitó a concurrir a distintas entidades locales, siendo una de ellas la Unión de Gremios Pymes de la Región del Biobío, la cual se encuentra actualmente en conformación. Su representante, Nelson Méndez, hizo hincapié en lo inédito del programa, puesto que "se coloca en valor el capital que nosotros tenemos en los jóvenes para incentivar en ellos su capacidad de emprender, su capacidad de organizarse y de liderazgo. Pero lo más importante de todo, a mi juicio, es la interacción que están teniendo las universidades entre sí. O sea, nosotros somos una región universitaria donde tenemos grandes instituciones y me parece fantástico que se coordinen de esta forma. Nosotros nos sentimos muy honrados de participar", aseveró.

Tal como se dijo, los jóvenes son parte fundamental de la experiencia que impulsan las universidades con este proyecto. Matías Martínez es alumno de Ingeniería Comercial de la UCSC y forma parte del Comité Consultivo del Círculo de Capital Social.

Martínez opinó que el capital social es una materia que está adquiriendo mucha fuerza en países europeos y de nuestro continente. "Yo creo que lo que está haciendo el Círculo Social ahora es algo totalmente inédito, la Región del Biobío puede más y yo creo que a largo plazo, esta zona va a dar de que hablar. Los jóvenes que terminen su carrera con conocimientos en capital social van a tener un plus, un valor agregado gigantesco", sentenció.

El proyecto "Fortalecimiento del capital social de jóvenes" tendrá una duración completa de 24 meses, según se informó.