Aumento de la obesidad infantil
El Mapa Nutricional de 2021 que elaboró la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb) y que dio a conocer hace unos días, ha revelado que los niños de Chile incrementaron la prevalencia de obesidad severa en un 31%. Es un problema de salud que se presenta desde años y que la pandemia, con las cuarentenas que se aplicaron para aminorar los contagios, contribuyeron a aumentar.
Ese organismo realiza cada año ese estudio, analizando los casos de menores de prekínder, kínder, primero básico, quinto básico y primero medio, de más de ocho mil establecimientos públicos. Los alumnos de preescolar son los que tienen mayor prevalencia de obesidad total, la que afecta al 29,5% de los niños de kínder y al 28,6% en prekínder. Incluso los varones tienen mayor incidencia de obesidad en todos los cursos, mientras que las mujeres tienen una tendencia a mantener un peso más normal.
El Mapa Nutricional es una herramienta que se creó en el año 2001, para detectar situaciones de riesgo en condición de malnutrición, tanto por exceso como por déficit, en estudiantes del sistema público, con el fin de analizar cómo influye en el rendimiento escolar. Se utiliza, asimismo, para el diseño y gestión de programas institucionales y la focalización de intervenciones. El mapa posibilita a los distintos agentes de la salud y educación evaluar el alcance e impacto de políticas, programas o intervenciones nutricionales y redefinirlas en caso de ser necesario.
La pandemia agravó una situación crítica que ya venía al alza: de seguir a este ritmo, el próximo año podrían haber más niños obesos que en un estado nutricional normal por primera vez en la historia. Hoy, el mapa dice que la prevalencia de la obesidad se da en uno de cada tres estudiantes evaluados, de los que 10,8% tiene obesidad severa, siendo que en 2020 fue de 7,6%, mientras el peso normal se da en 34,3% de los alumnos y 27% tiene sobrepeso. La principal preocupación está en los niños de 10 a 11 años (5º año básico) en que un 36,3% se encuentra con algún grado de obesidad. Le siguen kínder con un 35%, primero básico 34,8%, y prekínder 33,7% . Los resultados de 2021 son peores que los del año anterior y son la consecuencia de la mala alimentación que recibieron los niños en casa, de sus padres, cuando estaban en su apogeo las cuarentenas, a la vez que también influyó que los menores no hicieron actividad física por estar confinados.
A juicio de las autoridades, las cifras son alarmantes, admitiendo la necesidad de un plan de intervención, porque como país no hemos podido revertir los altos índices. La obesidad y el sobrepeso se han transformado en un problema de salud en Chile, que se acentúa cada año como resultado, en parte, de los hábitos de vida sedentarios, que incluyen poca actividad física y dietas alimenticias sobrecargadas en calorías. Tal vez está ligado a la conducta y al crecimiento que vivió el país a partir de la década de los 90, la que abrió una nueva forma de vida a las familias, un estilo en que el sedentarismo y el consumo de comida chatarra han sido detonantes de estas peligrosas cifras.
Chile ocupa el primer lugar en América Latina en obesidad infantil y un sexto lugar en el mundo. Cada vez aparecen a más temprana edad enfermedades que eran de adultos, como la diabetes, hipertensión y problemas cardíacos. La obesidad infantil puede ocasionar disminución de la autoestima, apnea del sueño, aumento de lesiones articulares, problemas cardíacos y respiratorios, además de problemas al hígado. El tema ha sido abordado desde hace años por el Ministerio de Salud, que ha aplicado políticas para que los alimentos sanos sean los que se vendan en las escuelas, en vez de aquellos ricos en azúcares, sodio y otros elementos dañinos en exceso. También se puso en vigencia el rotulado de los alimentos en los que se advierte con hexágonos negros aquellos que son peligrosos para la salud. Pero todo indica que esto no ha sido suficiente.
La prevalencia de la obesidad se da en uno de cada tres estudiantes evaluados, de los que 10,8% tiene obesidad severa, siendo que en 2020 fue de 7,6%. Y el 27% de los niños tiene sobrepeso.