Exposición rescata el valor de dos arquitectos claves en Concepción
El trabajo es de los arquitectos Luis Darmendrail, Alexander Bustos y Patricio Zeiss, titulado "Maco/Osvaldo. Legado arquitectónico" está disponible en el Liceo José Manuel Balmaceda.
Cada cierto tiempo, Concepción, la capital regional, experimenta cambios en sus calles debido a los desastres naturales.
Y es que luego del terremoto de 1939, nuestra ciudad experimentó un gran cambio en su arquitectura debido al desastre que dejó el histórico siniestro.
En esa misma línea, por aquellos años, la capital del Biobío también se aprontaba a festejar sus 400 años de historia, por lo que era un tiempo de modernización y reconstrucción.
Parte de los grandes responsables de estos dos últimos puntos fueron los arquitectos Javier "Maco" Gutiérrez y Osvaldo Cáceres.
Ambos nombres constituyen un enorme legado, el que actualmente es rescatado en la muestra "Maco/Osvaldo. Legado arquitectónico". La iniciativa la lideran los también arquitectos Alexander Bustos, Patricio Zeiss y Luis Darmendrail.
Disponible en el Liceo de Adultos José Manuel Balmaceda, frente a la Plaza Condell, el trabajo recorre la vida y obra de ambos profesionales en diversos paneles y en las paredes de uno de los patios techados del establecimiento educacional.
"Rescatar y dar a conocer el legado de estos profesionales es establecer un reconocimiento del patrimonio arquitectónico local, específicamente del construido durante la segunda mitad del siglo XX, en un momento en el que Concepción creció en materia urbana, incorporando nuevas líneas de diseño y además renovadas ideas", resumió Darmendrail.
Aprender de esa generación, expresa, para "nosotros tres ha sido una experiencia enriquecedora. Eso mismo nos motiva a seguir difundiendo ese legado y buscando maneras de extenderlo a toda la comunidad".
La muestra estará disponible durante todo el mes de octubre y es abierta a toda la comunidad penquista que se interese.
Esta muestra, incluye el resultado del proyecto "Maco Gutiérrez. Hacia una arquitectura en la Casa Grande".
Este trabajo deriva de la investigación desarrollada por los tres profesionales y cuyo libro final será lanzado próximamente, en una fecha por confirmar oportunamente.
Legado y presencia
En el caso de Gutiérrez y Cáceres, no solo dejaron una huella en las calles de Concepción, sino que también ejercieron la docencia, realizaron labores investigativas, abrazaron la política y la conciencia social.
"Sin ser penquistas de nacimiento, Maco y Osvaldo, junto con varios colegas, definieron y determinaron el paisaje penquista de mediados de siglo XX, en una época de cambios y anhelos urbanos, estando asociados además a otros profesionales como el arquitecto Alejandro Rodríguez Urzúa, tercera parte de un equipo en el que se compartieron ideas, proyectos y pensamientos", destacó Darmendrail.
En el caso de "Maco", boliviano de nacimiento, arribó a la zona a mediado de los 50 para trabajar en el proyecto del Sindicato de Lota junto a Betty Fischman, Sergio Bravo y Carlos Martner.
Entre 1958 y 1961 desarrolló trabajos como la Farmacia Maluje, la fábrica de Calzados Gacel, el edificio del Colegio Médico, el edificio Maipú, viviendas unifamiliares y el trabajo inicial de la Casa del Arte de la UdeC junto a los arquitectos Alejandro Rodríguez y Osvaldo Cáceres.
Luego de estar en Cuba, siguiendo los ideales de la revolución y proyectando diversas obras en la isla, regresó a Chile a fines de los años 60, para trasladarse luego a su natal Bolivia, donde ejerció la docencia y se transformó en guerrillero.
En el caso de Osvaldo Cáceres, conoció Concepción durante sus años de formación universitaria. A mediados de la década del 50, ganó el concurso para el edificio Fiuc, frente a la Plaza de la Independencia, marcando así el inicio de una fructífera relación.
De ahí y hasta mediados de los 70, Cáceres destacó con trabajos como el Mercado de Lorenzo Arenas, el colegio Madres Dominicas, la Parroquia Universitaria, las Aldeas SOS, los edificios Palet, MEX, Meyer, Plaza, Freire, entre muchos otros además de la ya mencionada Casa del Arte.
Dirigente sindical, el arquitecto cofundó -en 1969, la Escuela de Arquitectura de la Universidad Técnica del Estado, génesis de la actual Universidad del Bío-Bío. Un año más tarde, durante el gobierno de Allende, el profesional nacido en Santiago asumió la dirección regional de la Corporación de Mejoramiento Urbano (Cormu).
Luego del Golpe de Estado de 1973 y su posterior detención, Cáceres se trasladó a Los Ángeles, no sin antes escribir "La arquitectura de Chile independiente".
El texto sintetiza diversos paisajes de la historia arquitectónica chilena, siendo relevante en la disciplina en Chile. Cáceres falleció en febrero pasado, a los 95 años, en la capital de la Provincia del Biobío.