Colectividades avanzan en las gestiones para legalizar nuevos partidos en el Biobío
Mientras que Ecologista Verde avanza en la búsqueda de firmas, Amarillos por Chile y el Social Cristiano iniciaron la tramitación ante el Servicio Electoral.
En las últimas semanas, distintos espacios y movimientos políticos han dado el salto adelante y han avanzado las gestiones para legalizarse como partidos ante el Servicio Electoral.
En la Región del Biobío hay hasta la fecha 14 colectividades reconocidas por el Servel con casi 37 mil militantes, y varios movimientos trabajan para, en algunos casos, retomar el carácter legal y en otros convertirse en un nuevo espacio que pueda contar con militantes, recibir financiamiento y competir en los comicios que contempla el cronograma electoral desde 2024.
Retomar la legalidad
La semana pasada, representantes del Partido Social Cristiano -expartido Conservador Cristiano que respaldó la candidatura presidencial de José Antonio Kast- ingresaron las firmas ante el Servel para iniciar el proceso de legalización como partido con foco en las regiones de Ñuble, Biobío y La Araucanía, y entre sus principales figuras está la excandidata a senadora por Biobío Antaris Varela y el exconvencional del distrito 20 Luciano Silva, que renunció a Renovación Nacional.
Silva explicó que "es un momento histórico para la iglesia evangélica, porque a través del crecimiento y maduración, muchos han querido ir a la arena política mirándolo como el campo de las misiones. Muchos lo hemos intentado y hemos estado en diferentes partidos políticos representando a nuestro mundo. Sonábamos que todos íbamos a converger a un partido de inspiración cristiana evangélica que reúna esas sensibilidades que no son de ideas ni de derecha ni de izquierda".
En el caso del Partido Ecologista Verde que perdió la legalidad tras las elecciones de noviembre pese a lograr dos escaños en el Parlamento -uno de ellos el diputado del distrito 20 Félix González- y otros cargos de representación popular, en julio inició el trámite para juntar las firmas y volver a ser partido, con un plazo de seis meses para recabar todas las firmas necesarias.
En esa instancia, su presidenta Katherine Quiroz comentó que "tenemos que hacer el proceso de legalización, por lo que tenemos que juntar firmas en tres regiones continuas las que serán Ñuble, Biobío y La Araucanía; en Biobío necesitamos cerca de 1.500 firmas".
A la fecha, avanza el proceso de recolección de firmas tanto en Concepción como en Chillán, y se continúa en paralelo con la captación de militantes en las regiones de Ñuble, Biobío y La Araucanía. Sin embargo, durante la semana pasada se conoció la baja de la colectividad de la consejera regional Ana Araneda, la segunda electa con mayor cantidad de votos en la Región, que en un comunicado dijo que "es clave desarrollar un estilo de trabajo enfocado en un diálogo transversal, sin exclusiones, que nos permita actuar con la mirada puesta en la calidad de vida de todos".
Iniciar el camino
Otro de los colectivos que incipientemente ha iniciado su camino para convertirse en partido político es Amarillos por Chile, que durante la semana pasada ingresó ante el Servel las firmas mínimas para pasar a ser un partido en proceso de legalización. Entre los firmantes, se encontraban representando a la Región el empresario Ricardo Yaconi y el abogado Alejandro Elgueta, además de la coordinadora regional y miembro del comité político, Marianne Leroy.
Leroy explicó que actualmente se encuentran esperando el visto bueno del Servel para iniciar la recolección de firmas y lograr legalizarse en todo el país. Para ello, añade, requieren el 0,25% de firmas equivalentes al padrón que votó en la última elección de diputados o lograr el número de firmas en ocho regiones discontinuas. "Ya hemos recibido consultas para inscribirse, por lo que evaluamos que existe un gran interés y expectación desde diversos sectores de la sociedad", sumó.
El desembarco de Amarillos por Chile ha traído aparejado consigo las dudas y rumores en torno a figuras locales que puedan dar un paso y dejar sus partidos para sumarse a la colectividad autodenominada de centro. Uno de ellos ha sido el diputado del distrito 20 y jefe de bancada de la Democracia Cristiana Eric Aedo, quien aclaró que "este no es el momento de renunciar a la DC, ya que se está pasando por una crisis y de las crisis no se arranca. Estoy por fortalecer la Democracia Cristiana, que se genere una mesa de transición para los próximos seis a ocho meses, que dé cuenta de la realidad del país que busca transformaciones que se sustenten en el tiempo".
Otras colectividades que han tenido algunos movimientos a nivel local han sido Fuerza Común, que el pasado fin de semana confirmó a través de un comunicado su incorporación a Convergencia Social, partido que en el Biobío tiene a 1.728 militantes, e Igualdad que avanza en la tramitación para volver a ser partido ante el Servel en la Región del Biobío.
37 mil habitantes de la Región del Biobío registran militancia en alguno de los 14 partidos legalizados en la zona