OTAN califica como escalada llamado ruso a referendos en regiones ucranianas
Donestk, Lugansk y Jersón definirán su anexión a Moscú en las urnas. Macron dijo que nadie en el mundo reconocerá esas consultas.
Líderes prorrusos que gobiernan las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk y los territorios parcialmente ocupados de Jersón y Zaporiyia, convocaron ayer referendos de integración con Rusia para contrarrestar la contraofensiva ucraniana que puso en entredicho el éxito de la campaña militar de Vladimir Putin.
"Le pido que estudie lo antes posible, en caso de que el resultado del referéndum sea positivo, de lo que no dudamos, el asunto del ingreso de la República Popular de Donetsk en Rusia", dijo Denís Pushilin, líder separatista de Donetsk, en una carta dirigida a Vladimir Putin.
Precisamente el líder del Kremlin iba a dar un discurso este martes, el primero desde que comenzó la guerra, y podría haber contestado, pero lo retrasó por 24 horas sin entregar motivos.
La retirada de las tropas rusas de la región nororiental de Járkov, la contraofensiva ucraniana en el sur y el avance de las tropas de Kiev hacia Lugansk provocó el nerviosismo de los dirigentes prorrusos, que debían celebrar la consulta el próximo 4 de noviembre, coincidiendo con la fiesta nacional rusa.
Por la urgente reacción de la Duma o Cámara de Diputados rusa, que respaldó ayer las aspiraciones de los separatistas ucranianos, está claro que dichas convocatorias fueron consensuadas con el Kremlin.
Eso sí, nada más conocerse la noticia, las bolsas rusas sufrieron la mayor caída, de 8,84%, desde el inicio de la invasión el pasado 24 de febrero.
La pregunta
"¿Está usted a favor del ingreso de la república popular de Lugansk (o Donetsk) en Rusia en calidad de sujeto de la Federación Rusa?", es la pregunta que tendrán que responder en la consulta.
"El sufrido pueblo del Donbás se merece ser parte de un Gran País que siempre consideró su Patria. Este acontecimiento (el referéndum) restablecerá la justicia histórica, cuya llegada ansían millones de rusos", agregó Pushilin.
Lo secundaron sus contrapartes de las administraciones civiles y militares prorrusas de las regiones meridionales de Jersón y Zaporiyia.
Las autoridades separatistas explicaron que la consulta se extenderá durante cinco días, del 23 al 27 de septiembre.
Pushilin explicó que el viernes podrán votar tanto los habitantes del Donbás bajo ocupación rusa como de aquellas partes bajo control ucraniano.
Los votantes depositarán sus papeletas en sus domicilios, patios interiores, espacios públicos y sólo durante una jornada podrán hacerlo en colegios electorales tradicionales.
Los separatistas subrayaron que una mayoría de habitantes del Donbás y de los territorios ocupados votarán a favor del ingreso en la Federación Rusa, extremo que niega Kiev, quien adelantó que los plebiscitos serán fraudulentos, ya que Moscú no logró registrar suficiente número de votantes.
Antes de viajar a Nueva York para participar en la Asamblea General de la ONU, el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, no dudó en apoyar la celebración de los referendos, ya que los prorrusos "quieren ser dueños de su propio destino".
Occidente condena
La Unión Europea condenó "enérgicamente" los "referendos" planificados por prorrusos, que considera "ilegales" y cuyos resultados serán "nulos y sin efecto" y no serán reconocidos por la UE y sus Estados miembros.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo que los referendos anunciados "no serán reconocidos por la comunidad internacional" y "no tendrán ninguna consecuencia en el plano jurídico".
En los pasillos de la Asamblea General de la ONU en Nueva York, poco antes de tomar la palabra, Macron dijo a los periodistas que esos referendos son "una provocación suplementaria" y una muestra de "cinismo" por parte de Rusia: "Si no fuera trágico, podríamos hasta reírnos", dijo.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que las consultad carecen de legitimidad y son "una escalada más en la guerra de Putin" que tampoco cambian la naturaleza de la agresión de Rusia".
"La comunidad internacional debe condenar esta violación flagrante del derecho internacional y aumentar su apoyo a Ucrania", añadió
Los nuevos referendos se suman a la consulta que en 2014 significó la anexión a Rusia de la república autónoma de Crimea, cuyos resultados no han sido reconocidos.