Israel mata al número dos de Yihad Islámica y grupo replica con cohetes
Entre las ocho víctimas fatales tras el bombardeo a edificio residencial palestino hay una niña de cinco años. Los radicalizados amenazaron con atacar Tel Aviv.
El secretario general del movimiento palestino de la Yihad Islámica (YI), Ziad al Nakhala, amenazó con atacar el centro de Israel tras el bombardeo sobre Gaza en el que murieron al menos ocho personas, incluido el número dos del grupo, Taysir al Yabari.
"La ocupación (Israel) pagará un alto precio por su agresión contra Gaza, y no hay líneas rojas ni mediación después de hoy", indicó Nakhala en un comunicado en el que afirmó que "Tel Aviv será un objetivo para nuestros misiles".
El líder el movimiento islamista advirtió de que el "enemigo debe asumir la responsabilidad de su agresión" y que "debe esperar una respuesta fuerte y decisiva", para lo que instó a la movilización de "todo el pueblo palestino".
"Hago un llamado a todos los combatientes de todos los barrios palestinos gobernados por Fatah para que cumplan con sus deberes frente a esta agresión, ya sea que estén en Gaza o Cisjordania", señaló el líder de la Yihad Islámica, el movimiento islámico palestino más radicalizado.
Israel lanzó ayer un ataque aéreo contra un edificio residencial en la ciudad de Gaza con el objetivo de acabar con el comandante en el norte de Gaza de las brigadas Al Quds -brazo armado de la Yihad Islámica-, Taysir al Yabari, número dos del movimiento en la franja.
El ministerio de Salud palestino detalló que una de las fallecidas es una niña de cinco años. Hubo más de 40 heridos.
La ofensiva
El ataque se produce en el marco de una nueva ofensiva lanzada por el Ejército contra objetivos de la Yihad Islámica en el enclave, después de elevarse la tensión a raíz del arresto el lunes a un importante líder del grupo en Cisjordania ocupada, Basem al Sadi, en el campo de refugiados de la ciudad de Yenín.
Nakhala rechazó la mediación egipcia para evitar una nueva escalada bélica en Gaza como la ocurrida en mayo del año pasado e insistió en que "los combatientes de la resistencia no retrocederán ni dudarán".
"Que los egipcios sepan que la agresión es la naturaleza de la ocupación y responderemos enérgicamente", agregó.
Hamás, el movimiento islamista que gobierna de facto Gaza desde 2007, se solidarizó con la Yihad Islámica y afirmó que "la resistencia armada palestina está unida contra la agresión".
"La ocupación ha cruzado las líneas rojas y ha llegado el momento de que le demos una lección a la ocupación y paguemos el costo", indicó el portavoz de Hamás, Hazem Qasam.
Tras los bombardeos, que según fuentes palestinas alcanzaron múltiples objetivos en distintas ciudades gazatíes, el Ejército decretó la interrupción de casi todas las actividades en las comunidades cercanas a la frontera y estableció múltiples medidas de protección en zonas aledañas pero no tan cercanas.
Estas medidas incluyen la interrupción de todas las actividades educativas y un límite al aforo, que no se puede extender a más de 10 personas en espacios cerrados al menos hasta mañana por la tarde.
Lapid y sus razones
Tras la ofensiva, el primer ministro israelí, Yair Lapid, dijo: "El gobierno israelí no permitirá que las organizaciones terroristas en Gaza establezcan la agenda en el área adyacente a la Franja y amenacen a los ciudadanos del Estado de Israel. Cualquiera que intente dañar a Israel debe saberlo: lo encontraremos".
Por su parte, el ministro de Defensa, Benny Gantz, señaló que "el objetivo es proteger al Estado de Israel y a los ciudadanos de Israel. No permitiremos que nadie amenace o dañe a los ciudadanos de Israel. Quien intente hacerlo, saldrá lastimado".
Al cierre de esta edición, el Ejército israelí dijo a Efe que 66 cohetes fueron lanzados desde Gaza contra su territorio, de los cuales 11 cayeron dentro del enclave. De los 55 restantes, precisó un portavoz, cerca de un tercio fueron interceptados por los sistemas de defensa antiaérea mientras que el resto cayó en áreas despobladas".