Fuerzas Armadas han realizado 441 operativos bajo el estado de excepción en la Región
El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, entregó una serie de antecedentes sobre la agenda de seguridad en el Biobío, asegurando que las estadísticas indican que la medida reduce en alrededor del 30% los hechos de violencia rural.
Durante la vigencia de este estado de excepción en la Región del Biobío se han registrado más de 400 procedimientos por las Fuerzas Armadas y casi 60 mil controles preventivos a través de los puntos de control y patrullajes mixtos desarrollados junto a Carabineros.
Así lo detalló el subsecretario Manuel Monsalve en su presentación sobre la agenda de seguridad del Gobierno para el Biobío, esto en el marco del encuentro organizado por Irade, en el que participaron líderes gremiales, sindicales, sociales, autoridades políticas y la comunidad empresarial de la región.
En detalle, las Fuerzas Armadas desplegadas en el territorio para apoyar el labor de las policías ha concretado 441 procedimientos en la Región del Biobío, lo que incluye patrullajes aéreos, terrestres y marítimos. Por su parte Carabineros ha realizado 59.708 controles preventivos, de los cuales 18.812 (32%) fueron de identidad y 40.896 (68%) vehiculares. Además, la autoridad detalló que el 90% de los eventos violentos bajo este estado de excepción se han producido en la provincia de Arauco y el 8% en Biobío.
Seguridad pública
En su exposición, el subsecretario entregó una serie de antecedentes de la Región del Biobío en cuanto a la situación de seguridad y su evolución durante los últimos años. Así sostuvo que este 2022 se ha retornado a la cantidad de delitos que se registraban previo a la pandemia, lo cual generó entre el 2019 y 2021 una baja del 40%.
"Cuando de un año a otro se produce un aumento del 40% de los delitos, se produce un efecto sobre la subjetividad de las personas y, por lo tanto, se genera miedo e incertidumbre", indicó en su intervención. No obstante, sí indicó que la tasa de homicidios, sobre todo con uso de armas y que ocurren en la vía pública han aumentado, muestra de ello es que el 2019 previo a la pandemia la región registró 24 homicidios al año y 50 este 2022.
Entre los antecedentes entregados en la instancia se pudo identificar que los eventos de violencia rural a julio de cada año desde 2013 al 2022 han mostrado un alza significativa, tanto en la Región del Biobío como en la Macrozona Sur. Si el año 2018 fueron 83 eventos, el 2019 aumentaron a 105, para luego ascender a 206, 309 y 276 durante los años 2020, 2021 y 2022, respectivamente.
Al respecto, Monsalve sostuvo que los datos cada vez son más difíciles de comparar, precisamente por la implementación del estado de excepción. No obstante, indicó que esta medida "lo que hace es reducir aproximadamente en un 30% los hechos de violencia rural" y agregó que los ilícitos que han presentado las bajas más significativas son los que se producen con armas de fuego y la quema de camiones.
Agenda de seguridad
Monsalve reiteró que la agenda del Gobierno tiene ejes tanto en la entrega de recursos, iniciativas legislativas e institucionalidad para fortalecer el trabajo de diversas instituciones en la persecución del crimen organizado, el cual asegura está detrás de la mayoría de los delitos violentos en diferentes partes del país.
Respecto a este tema, una vez finalizado el encuentro, el director de Irade, Paul Esquerré, aseguró que a través de este tipo de eventos que generan puentes entre el mundo público y privado, buscan hacerse parte de la solución al importante problema que se enfrenta.
"Efectivamente hay un tema de inmediatez que es urgente (...) pero al parecer la agenda presentada por el subsecretario Monsalve es lo suficientemente robusta para enfrentar los problemas (...). Indudablemente la seguridad pública le corresponde al Estado, nosotros estamos aquí para ayudar en esa coordinación, creo que al interior de las empresas cumplimos con la ley, la seguridad de nuestros colaboradores y sus familias, que es vital", agregó.
Por su parte, el gobernador Rodrigo Díaz sostuvo que la agenda presentada avanza en la dirección correcta, pero que es necesario hacer que opere de la forma más rápida posible, considerando que las prioridades de población chilena han cambiado hacia el ámbito de seguridad.
"Las medidas y respuestas que teníamos desde una cultura de separación de poderes y exacerbación de las autonomías de cada organismo vayan quedando de lado porque el crimen organizado no tiene etapas, burocracia, no tiene trámites. Es una organización casi perfecta ligera liviana, para generar sus fines comerciales muy nefastos para la población", finalizó.