Moscú y Kiev reanudan negociaciones, pero se entrampan por ataque en suelo ruso y fracaso en evacuación de Mariúpol
Kremlin señaló que supuesta incursión de helicópteros ucranianos contra una refinería afectarán las tratativas, poco después de que Serguéi Lavrov anunciara "progresos" en las conversaciones. La Cruz Roja, en tanto, advirtió que "es imposible" evacuar a los civiles del sitiado puerto del Mar de Azov y dio por fracasada la operación de rescate.
Rusia y Ucrania anunciaron ayer la reanudación de las negociaciones para buscar un alto al fuego, pero a las pocas horas se entramparon tras la denuncia del Kremlin de un ataque ucraniano contra un depósito de combustible en suelo ruso, al tiempo que la Cruz Roja daba por fracasada la evacuación de civiles desde la sitiada Mariúpol, en el Mar de Azov.
Las conversaciones se reiniciaron tres días después del primer acercamiento de posturas entre las partes en conflicto durante la reunión celebrada en Estambul esta semana.
"Continuamos las negociaciones en régimen de videoconferencia. Nuestras posturas sobre Crimea y Donbás son inamovibles", escribió el negociador jefe ruso Vladímir Medinski en Telegram.
Incluso el ministro del Exterior ruso, Serguéi Lavrov, aseguró durante su visita oficial a la India que se habían producido "progresos" en las negociaciones sobre el estatus neutral de Ucrania, incluyendo "un entendimiento", en las posturas con respecto a la situación de las regiones del Donbás.
"Estos acuerdos deben ser completados (...), hay cierto progreso admitiendo la imposibilidad de que Ucrania forme parte de cualquier bloque", aseguró el jefe de la diplomacia rusa.
Todo se volvió más esperanzador cuando el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, se mostró decidido a organizar cuanto antes una reunión entre Vladimir Putin y Volodimir Zelenski, que no se ven las caras desde finales de 2019. En concreto, Erdogan pidió por teléfono a Putin que se reúna personalmente con su homólogo ucraniano.
Ataque en rusia
Sin embargo, pocas horas antes Rusia había acusado a Ucrania de atacar un depósito de combustible (ver nota secundaria) situado en las afueras de la ciudad rusa de Bélgorod, a 30 kilómetros de la frontera ruso-ucraniana.
Según el ministerio de Defensa ruso, alrededor de las 5 de la mañana, dos helicópteros Mi-24 ucranianos atacaron dicha instalación, destinada al suministro de combustible para el transporte civil.
Frente a este hecho, el Kremlin, a través de su portavoz, Dmitri Peskov, señaló que la incursión afectará las tratativas y que el ataque "no contribuye al éxito de las negociaciones". También agregó que el presidente Putin fue informado sobre el incidente.
Por su parte, el ministerio de Defensa ucraniano negó su implicancia en el incidente, argumentando que "Ucrania no puede asumir la responsabilidad por todos los errores, catástrofes y sucesos que tienen lugar en territorio ruso".
"Al día de hoy el Estado ucraniano protagoniza una operación defensiva con el fin de repeler la agresión militar rusa en territorio de Ucrania", añade un comunicado.
Mariúpol
Los devastadores bombardeos en Mariúpol, la ciudad sitiada por el Ejército ruso desde hace tres semanas, solo se detendrán cuando la autoridades de la ciudad se rindan, sostuvo el presidente Putin.
El mandatario expresó su opinión la noche del martes en un llamada telefónica con su par francés Emmanuel Macron, según indicó el Kremlin.
"Para resolver la difícil situación humanitaria en esta ciudad, los militantes nacionalistas ucranianos deben dejar de resistir y deponer las armas", comentaron funcionarios del gobierno.
Pese a lo complejo de la situación, ayer se realizó un nuevo intento por realizar una evacuación de Mariúpol, donde habría, según diversas fuentes, más de 100 mil personas atrapadas, sin servicios básicos, pero se frustró una vez más, ahora agravada por el ataque a territorio ruso que acusó el Kremlin.
El Comité Internacional de la Cruz Roja reconoció que no pudo asegurar el procedimiento, y demandó a ambos bandos, además de un alto el fuego, "la ruta exacta de salida, la hora exacta de inicio y su duración. Es imposible evacuar a los civiles", indicó el organismo asumiendo el fracaso.
En principio, en la evacuación debían participar 45 autobuses, a lo que se sumaba un número indeterminado de automóviles civiles.
Llegan primeros buses
Al cierre de esta edición, según agencias europeas, varios de los autobuses con refugiados de Mariúpol habían logrado llegar por la noche a Zaporiyia, una ciudad ucraniana controlada por el Ejército de Kiev, lo que fue confirmado en un video de Telegram por la viceprimera ministra ucraniana Irina Vereshchuk.
Kiev informó ayer de nueve corredores abiertos para evacuar civiles: Mariúpol, Energodar, Berdyansk, Melitopol, Rubizhne, Nizhnee, Severodonetsk, Popasna y Lysychansk.