Viñateros proyectan otro difícil año para sus negocios en la Región
Pese a la emergencia agrícola que rige hoy en la zona, algunos de los productores del área dicen sentirse abandonados por el Estado.
La fecha de las vendimias se acerca, época en la que se realiza la cosecha de las uvas destinadas a la producción de vinos. Sin embargo, debido a múltiples factores económicos y ambientales que aquejan a la sociedad, los emprendedores locales asociados al rubro advierten que el escenario será complejo, especialmente por la falta de trabajadores y de agua.
El presidente de la Asociación de Viñateros de Yumbel, Danilo González, explica que en la temporada pasada la mayoría de las vendimias de la comuna se efectuó de forma individual o con familiares, principalmente por efecto de la pandemia. "Da temor contratar gente de afuera", aseguró.
Pese a ello, reconoció que eso en particular no ha significado un gran daño, ya que varias viñas de la zona son pequeñas, por lo que la producción puede mantenerse en un rango estable con una menor cantidad de personas trabajándolas.
En cambio, si se trata de grandes productores, dijo que esto sí comienza a ser un problema debido a la dificultad para encontrar mano de obra.
Álvaro Señor, de Viña Santa Ximena, concordó con el último punto, el que extrapoló a la realidad de los pequeños, pues también percibe que es más dificultoso traer personal para las vendimias. "Algunos hemos traído a trabajadores desde más lejos y eso ha significado que han incrementado los costos de poder cosechar", lamentó.
Por lo mismo, advirtió que el gran inconveniente no está presente en la realización de trabajos previos ni en la mantención de las viñas, sino que "está en la cosecha, porque el tiempo que tenemos es muy corto, y en 20 ó 30 días debemos tener toda la vendimia hecha y sin gente es complejo el tema".
Hoy, aseguró, los gastos se traducen en un 40% en la vendimia y el resto en costos de trabajo e insumos, por lo que cada vez son menores los ingresos. "Los costos en fertilizante incluso se triplicaron y los precios de las uvas no mejoran, entonces es un negocio inconducente", contó.
SEQUÍA EN LA REGIÓN
Otro de los factores negativos tiene que ver con la situación que enfrenta el país en términos de déficit hídrico. Según González, existe falta de rigurosidad del Estado a la hora de frenar este problema. "Están levantando un proyecto para la sequía, pero son a largo plazo, con temas de riego, pero nosotros necesitamos amortiguar el golpe ahora", expuso.
Las expectativas de Álvaro Señor son bajas y más aún para viñas moscateles, lo que llevará, a su juicio, a tener menos uvas y menos jugosas, sobre todo por las altas temperaturas que han afectado al territorio.
"Creemos que va a haber una disminución en su producción, por lo menos en los pequeños agricultores que no tienen acceso a regar sus viñas", agregó.
José Luis Rozas, fundador de Viña SanRoke, complementa que para poder obtener agua es necesaria la construcción de punteras profundas desde donde extraer agua, a fin de que puedan sobrevivir tanto plantaciones como animales.
Hace 10 años, cuenta Rozas, las plantaciones eran más fáciles de realizar, ya que la tierra contaba con el agua necesaria para que se desarrollasen los viñedos. "Yo he realizado plantaciones de hace 20 y 35 años y están vigorosas, sin problemas. En los primeros tres años de desarrollo de un viñedo se requiere agua para sus raíces y en esos años existía humedad, pero hoy es menos", graficó.
Los emprendedores comentan que mantenían sus esperanzas en que el decreto de emergencia agrícola decretado para la Región les supondría alguna ayuda estatal que frenase el avance de la sequía. No obstante, señalan que esta situación no ha cambiado en absoluto y, al contrario, solo sigue creciendo. "Los recursos fueron muy limitados, así que nuestras esperanzas que eran grandes por este tema ahí quedaron. Hubo unas postulaciones a subsidio para poder apostar por punteras de donde sacar agua, pero aún estamos a la espera de los resultados", puntualiza Rozas.
Pese a lo anterior, el propietario de viña SanRoke adelantó que la vendimia en su caso se proyecta bien, aunque claramente también presentará complejidades. "Se ve buena, pero está más deshidratada y un poquito más chica, no como el grano vigoroso que solíamos tener (…) Sí creo que estará bien concentrada en azúcar", concluyó.