Buscan resguardar al Pilpilén
Proyecto que reúne a distintas organizaciones medioambientales ya instaló señaléticas para los visitantes y espera zonificar el espacio para que la especie no está amenazada.
En el Gran Concepción se encuentra uno de los principales hábitats del Pilpilén común: la playa Isla Los Reyes, del humedal Rocuant. Allí se encuentra una de las principales poblaciones del país de esta ave playera, pero también es donde sus amenazas han ido creciendo en el último tiempo.
El tránsito de personas a pie e incluso en vehículos motorizados, así como perros domésticos y asilvestrados, han comenzado a mermar la población que allí afecta al ver pisoteados sus nidos y depredados sus polluelos. Es por esto que se inició un proyecto de conservación entre la Fundación Bandada, ONG Aumén, ONG Manomet (estadounidense) y GEF Humedales en conjunto con el Ministerio de Medioambiente.
El objetivo es poder disminuir las amenazas, que las personas puedan disfrutar del entorno natural, pero resguardando la población del Pilpilén común que se encuentra clasificada como especie "casi amenazada en Chile" y que en cualquier momento puede empeorar esta condición.
La playa Isla Los Reyes tiene una extensión aproximada de 80 hectáreas y se han contabilizado, al menos, 120 parejas reproductivas del Pilpilén. Esto equivale al 1% de la población global de esta especie.
MONITOREO
Patricio Ortiz, de Fundación Bandada cuenta que, históricamente, la playa Isla Los Reyes era utilizada para paseos familiares entre la década del 40 y el 70 e incluso era cruzada en bote. "Pero después se instaló la industria pesquera y con los graves problemas ambientales dejó de ser atractiva para las personas. Todas esas décadas que estuvo solitaria, antes de la pandemia, dio pie a que se estableciera esta colonia reproductiva de Pilpilén. Además de que cuenta con un banco de bivalvos que le sirven de alimentos. Esto propició el éxito reproductivo del ave en este humedal".
Con la emergencia sanitaria y las restricciones a la movilidad, se volvió a descubrir esta playa y comenzaron a llegar personas sin saber que se trata de área de conservación natural. ¿El problema? Los nidos están escondidos en la arena y al caminar por ella o pasar en auto los pisaban, las mascotas perseguían a los pollos e incluso a las parejas reproductivas.
Ortiz comentó que "hemos puesto cámaras trampa en los nidos y hemos detectado una depredación de una jauría de perros asilvestrados que vienen de Penco".
Estas cámaras también han permitido recabar información acerca del ciclo reproductivo que se produce entre fines de agosto y marzo.
RESGUARDO DEL ESPACIO
Lo que busca la iniciativa que se llama "Playa Isla Los Reyes, reserva para la conservación del Pipilén común" es poder encontrar un punto intermedio entre la conservación y la válida demanda de recreación por parte de la comunidad. "Pensamos que ambas se deben equilibrar y coexistir. No es que pensemos que sólo hay que dejar las playas para la fauna", precisó Ortiz.
Entonces, lo que buscan es establecer un reordenamiento o zonificación de la playa, es decir, delimitar dónde las personas pueden estar y dónde puede hacerlo exclusivamente la fauna, pero desde un punto de vista colaborativo donde la comunidad entienda las razones de este cambio y no solo establecer un perímetro per sé.
"Esto tiene que ir acompañado de educación, porque la gente tiene que entender la relevancia y por qué se tiene que comportar de forma diferente. Cuando le explicas, ellos entienden", precisó el miembro de Fundación Bandada.
Hasta ahora, desde el proyecto se han instalado señaléticas -en conjunto con la Directemar- en los distintos accesos a la playa, indicando cuál es la importante de este lugar para el Pilpilén, las cosas que se deben evitar hacer, otros letreros recuerdan la prohibición de ingresar en vehículos motorizados y un fono denuncia.
OTRAS ACCIONES
Además, se inició un proceso participativo para integrar el área (humedal Rocuant) a la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras. Se trata de una iniciativa internacional que tiene como objetivo conservar las aves playeras y sus hábitats a través de una red de sitios clave en América. Abarca 112 áreas en 18 países, totalizando más de 15 millones de hectáreas de reservas y en Chile son seis los sitios que pertenecen a esta red.
También se gestionará la solicitud de una concesión marítima con fines de conservación, que permita habilitar las acciones necesarias para resguardar el éxito reproductivo de la especie. Esto es lo que permitirá establecer la zonificación de la playa.
Loreto Álvarez, coordinadora regional del proyecto GEF Humedales Costeros en la Región del Biobío, indicó que "se trata de una iniciativa integral que busca fortalecer la gobernanza y en donde la coordinación, articulación y cooperación entre diferentes organizaciones del territorio es clave para enfrentar los desafíos que hoy enfrentan los humedales y esta playa en particular".
El trabajo de este proyecto, en conjunto con las organizaciones, está planificado a dos años.
que habita el humedal Rocuant
UNA DEUDA CON EL MEDIOAMBIENTE
El Gran Concepción está sobre un gran sistema de humedales denominado Rocuant-Andalién-Vasco da Gama-Paicaví-Tucapel Bajo, los que están conectados entre sí y que debido al desarrollo poblacional se han ido fragmentando.
Cada uno ha presentado distintos problemáticas: desde un incendio y hasta la sequía de su espacio, pasando por la pérdida de terreno por el desarrollo inmobiliario. Sobre esto, Patricio Ortiz, indicó que "vemos con preocupación que no hemos avanzado hacia una conservación efectiva y si no hay voluntad del propietario del terreno, no hay mucho que hacer. No hay solución por parte de la autoridad y tenemos esperanza en que la normativa en esta materia cambie".