"No podíamos cocinar y ducharnos o regar, porque el agua no alcanzaba. El proyecto nos cambió la vida"
Hasta la fecha, más de 750 familias han sido beneficiadas por esta iniciativa de CMPC y Desafío Levantemos Chile, que busca entregar acceso a agua para consumo humano y productivo en sectores rurales del Biobío y La Araucanía. En 2022, el programa buscará llegar a cientos de nuevos hogares.
Lucía Maldonado (48) es la presidenta de la comunidad Piutril Santa Ema, en la comuna de Collipulli, Región de La Araucanía, donde ha vivido toda su vida. En este lugar las mujeres buscaron distintas formas de apoyar la economía familiar, hasta que retomaron el trabajo alfarero, actividad por la que son muy conocidas en la zona.
Sin embargo, las alfareras del sector convivían con un problema que afecta a muchas familias que habitan en la ruralidad: la escasez de agua. "Para cocinar, lavar y para los animales se reutilizaba el agua. Muchas veces tuvimos que elegir entre una cosa u otra. No podíamos cocinar y ducharnos o regar, porque el agua no alcanzaba. Para los animales íbamos al río a buscar agua", narra Lucía.
Esta fue la realidad que vivió la comunidad por muchos años, hasta que llegó el proyecto Desafío Agua para Chile, una iniciativa impulsada por CMPC y Desafío Levantemos Chile que busca facilitar el acceso a agua potable para consumo humano y productivo en sectores rurales en las regiones del Biobío y La Araucanía y que en 2021 permitió que más de 750 familias tuvieran este servicio básico en sus vidas cotidianas.
Maldonado recuerda que, durante tres años, ella, su familia y vecinos tuvieron que depender semanalmente de camiones aljibes para abastecerse de agua, la que usaban solo para lo básico. "Los pozos de agua del proyecto Desafío y CMPC realmente nos cambiaron la vida. Fue un cambio muy fuerte para nosotros, porque facilitó todo lo que hacemos. Llevamos décadas viviendo acá y cada vez teníamos menos agua, lo que a veces era desesperante. Algunas familias pensaban irse a la ciudad, lo que nos daba mucha pena porque este es nuestro hogar. Pero ahora nos podemos quedar acá viviendo tranquilos, como siempre hemos querido, porque somos de este lugar", afirma emocionada.
Según datos de la Universidad de Chile, la escasez de agua afecta a casi un millón de personas en todo el territorio nacional, llegando casi al 50% de la población rural del país. Buscando solucionar este problema, Desafío Agua para Chile seguirá trabajando con comunidades rurales del sur de Chile. Se proyecta que durante 2022 esta iniciativa siga creciendo y beneficiando a más familias.
Nicolás Birrell, director ejecutivo de Desafío Levantemos Chile, señala: "En la fundación trabajamos día a día buscando soluciones eficientes para poder apoyar y levantar diferentes comunidades. Desafío Agua para Chile es de vital importancia para nosotros, ya que no solo les hemos dado acceso a agua potable a diferentes sectores, sino que también les entregamos herramientas de desarrollo, trabajo y crecimiento".
Ignacio Lira, subgerente de Asuntos Corporativos de CMPC, por su parte, dice que "ya hemos podido llegar a más de 750 familias con una ayuda fundamental como lo es el agua potable. Vivir sin este bien básico es muy difícil y afortunadamente hemos podido aportar con una solución rápida y efectiva y esperamos que durante 2022 podamos seguir en este camino. Parte de nuestro rol como empresa es involucrarnos con las comunidades presentes en los territorios en los que tenemos presencia y ayudarlos en su desarrollo, por lo que nos motiva mucho seguir participando en iniciativas como esta, que les facilita la vida a muchísimas personas".
Proyectos a la medida
La gracia de Desafío Agua para Chile es que cada proyecto se enfrenta de manera distinta, persiguiendo siempre una solución viable y sustentable en el tiempo. De tal manera que si se analiza esta iniciativa se puede ver que se han ejecutado múltiples soluciones, tales como recolectar agua de vertientes y canalizarla bajo tierra, obtener agua de pozos profundos por medio del bombeo solar, instalar un abasto de agua sobre una torre de gran altura, instalar filtros para hacer que el agua sea apta para el consumo humano y mejorar sistemas de APR. En fin, una serie de alternativas que tienen como gran meta mejorar la calidad de vida de las familias.
En la Región de La Araucanía, la comunidad Marileo de Lautaro fue una de las primeras beneficiadas con Desafío Agua para Chile. Leticia Colihuinca, integrante de la comunidad, comenta que la llegada de agua potable a sus hogares fue una alegría tremenda. "No podíamos lavar la loza, la ropa, teníamos que acarrear agua con balde para la casa y también para darle a los animalitos. Este proyecto cambió la vida de 40 familias, es algo súper lindo. Estoy contenta, porque la vida se nos ha hecho más fácil y para el verano ya tuvimos agua para el hogar, para la huerta y para darles a los animalitos", relata.