En esta época del año se hace presente el paisaje natural que existe al interior de la ciudad. Están los paisajes que percibimos cuando caminamos por las calles y avenidas, parques y plazas: jardineras, franjas de pasto, árboles aislados, etc…, un paisaje natural que podríamos considerar "artificial" y que comprenden unas pocas especies florales que apenas sostienen vida salvaje, son el paisaje natural "cuidado".
Y están otros menos vistosos, que nadie repara, y, en muchos casos, hasta son molestos para la gente, ya que no se basan en una disposición estética, ni de forma ni de color. Son los paisajes olvidados de la ciudad. Vegetación que emerge de las grietas de las casas y construcciones; de las riberas de lagunas, ríos y esteros.
Son los paisajes de la vegetación urbana naturalizada (Priego, 2004). Muchos de ellos proporcionan una nueva manera de entender la vegetación al interior de la ciudad, proporcionando una riqueza de hábitats salvajes sin ningún costo ni cuidado y superando las grandes problemáticas de la ciudad: contaminación atmosférica, suelos infértiles, falta de riego, etc.
Concepción cuenta con una gran variedad de este tipo de paisaje. Y uno de los más destacados, es aquel que ha emergido en las riberas del gran río Biobío. En la ribera norte, entre las piedras del pretil, se ha formado un pequeño bosque con árboles y arbustos, que impide ver el río. Y en la ribera sur, que producto de la sequía, al control de las aguas por parte de la hidroeléctrica y a la sedimentación natural del río, se ha formado un gran terraplén de tierras bajas con árboles, arbustos, pastizales e incluso pequeñas lagunas. Un extenso terreno natural en pleno corazón del área metropolitana, "…podría pensarse que el paisaje, como la naturaleza, existe "desde siempre". Y sería cierto, si no fuera porque, a diferencia de aquella, el paisaje solo existe en función de la mirada humana. El paisaje únicamente existe cuando alguien lo percibe y en el contexto de una cultura que le da sentido". (Folch y Bru, 2017)
Estos espacios son necesarios para la ciudad. La simple visión de naturaleza en la ciudad produce estados fisiológicos más distendidos, disminuyendo considerablemente los niveles de estrés, aumentando la satisfacción del trabajo y el bienestar personal, (Kaplan, 1993), aminorando la fatiga mental (Kaplan & Kaplan, 1989, Ulrich, 1976,1984) y, en definitiva, cambiando los estados de ánimo del ciudadano (Hull, 1992).
"Si el diseño urbano se concibe como el arte y la ciencia dedicados a realzar la calidad del medioambiente físico de la ciudad, a proporcionar lugares civilizados y enriquecedores para la gente que los habita, no hay duda de que las bases actuales del diseño urbano deben ser reexaminadas, siendo necesario redescubrir, a través de las ciencias naturales, la esencia de los lugares familiares en los que vivimos". (Hough, 1995) Y este gran terraplén formado naturalmente en la ribera sur del río es la oportunidad de proporcionar a la ciudad un gran parque urbano a escala metropolitana. Es reconocer la naturaleza al interior de la ciudad.
al interior de la ciudad