Marcha blanca de los nuevos trenes
Esta semana ha comenzado la marcha blanca de los dos primeros trenes nuevos destinados al servicio del Biotrén. Las autoridades han señalado que en las siguientes semanas continuarán llegando estos convoyes, hasta completar los doce que compondrán la flota del ferrocarril urbano y del Corto Laja-Talcahuano. Se espera que en octubre el nuevo material rodante esté en pleno funcionamiento.
Los nuevos trenes fueron construidos en China por la empresa Crrc-Sifang, una de las principales compañías de este rubro a nivel mundial , luego de que fueron adjudicados en 2018 a través de una licitación pública internacional. Estos automotores son eléctricos, con dos y tres coches, con capacidad que varía entre los 400 y 600 pasajeros a bordo y una velocidad máxima de 120 kilómetros por hora. Cuentan con asientos diferenciados para pasajeros de tercera edad, pantallas de información al usuario, así como megafonía y mapa de recorrido digital con horarios, próxima detención y temperatura. Tienen sistema de climatización, wifi, cámaras de seguridad, acceso para sillas de ruedas y baños inclusivos en el caso del servicio Corto Laja.
En el inicio de la marcha blanca, el presidente de EFE, Pedro Pablo Errázuriz señaló que estos trenes renuevan completamente la flota de la Región del Biobío y representan un gran avance en tecnología, pero mucho más importante que eso, es un salto gigantesco en calidad de vida para los usuarios.
Este material rodante comenzó a llegar en febrero al país y fueron enviados entonces al Centro de Mantenimiento San Eugenio, donde se les realizaron las pruebas, junto con el adiestramiento del personal. Estos convoyes representan altas inversiones y una mejora de los servicios de transportes en regiones, al contar con equipos de última tecnología y con certificaciones internacionales. También la llegada de este material rodante es el primer paso para concretar el plan Chile Sobre Rieles, que permitirá recuperar distintos servicios ferroviarios en el país. En este caso, por primera vez las regiones del Biobío y La Araucanía (Victoria-Temuco) contarán con una flota de trenes completamente nuevos, que elevarán el estándar del servicio.
Sin embargo, el cierre de fronteras y las cuarentenas por pandemia hicieron más complejo el traslado de los trenes y también de los profesionales que vinieron desde China para realizar las pruebas de entrega para la puesta en operación.
Pero para que estos trenes puedan operar en las mejores condiciones, fue necesario realizar algunos ajustes a la red ferroviaria. Por eso, se efectuaron trabajos de alzamiento de andenes de pasajeros, que tuvieron por objetivo elevar el piso en 40 centímetros en las estaciones, además de modificar las pendientes de acceso y salida de los usuarios de los nuevos trenes. Asimismo, se construyó un centro de mantenimiento en Hualqui para los nuevos carros. No obstante, la mayor inversión deberá ser la construcción de un nuevo puente ferroviario sobre el río Biobío. En diciembre pasado fue aprobada la Resolución de Calificación Ambiental del viaducto, que permitirá reemplazar el actual, que tiene más de 130 años. Si la construcción del puente comienza en el presente año, con una inversión de 220 millones de dólares, podría quedar operativo a inicios de 2025. Tendrá una extensión de dos kilómetros y se ubicará aguas abajo del actual, contando con dos nuevas vías férreas electrificadas y con un sistema de iluminación de tecnología led sustentable. La iniciativa considera asimismo un nuevo túnel de 326 metros de largo en el cerro Chepe, doble vía hasta la Estación Intermodal de Concepción del Biotrén y vías habilitadas para el transporte de carga y de pasajeros. El paso que se dio con la aprobación de la resolución de calificación ambiental, fue vital para hacer realidad la construcción de una infraestructura ferroviaria mayor, con estándares acordes a los tiempos, lo que permitirá mejorar notablemente la capacidad del transporte ferroviario en la región.
Los nuevos trenes fueron construidos en China por la empresa Crrc-Sifang, una de las principales de este rubro a nivel mundial y fueron adjudicados en 2018 a través de una licitación pública internacional. Estos automotores son eléctricos, con dos y tres coches, con capacidad entre los 400 y 600 pasajeros.