Por Isabel Plaza Vásquez
Con arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima quedaron dos personas que fueron formalizadas por diversos delitos, luego de ser sorprendidos en un evento religioso no autorizado que se realizaba en un domicilio particular en Los Ángeles.
El pastor evangélico C.E.L.B. y el feligrés B.A.M.C. fueron imputados por el Ministerio Público como autores de los delitos consumados de atentado en contra de un funcionarios de las Fuerzas Armadas, lesiones menos graves en contra del mismo y por poner en peligro la salud pública, es decir, infracción del artículo 318 del Código Penal.
El incidente ocurrió pasadas las 22 horas del miércoles, cuando funcionarios del Servicio de Salud del Biobío, acompañados por efectivos del Ejército del destacamento de montaña de Los Ángeles, llegaron hasta el sector de Villa Los Historiadores, donde se había indicado que se registraba un culto masivo en un inmueble del lugar. Según lo señalado, la reunión se realizaba sin respetar el aforo ni las restricciones impuestas por la autoridad sanitaria.
Cuando arribaron los fiscalizadores y al verse sorprendidos, los asistentes comenzaron a darse a la fuga, lo que intentó ser evitado por el personal militar.
El fiscal de Los Ángeles, Carlos Díaz, precisó que fue en ese momento que los dos imputados "procedieron a agredir a un funcionario militar que acompañaba al personal de salud que estaba realizando esta inspección".
El persecutor sostuvo que además se estableció que el culto religioso se habría realizado al interior del domicilio de uno de los imputados.
"Esta persona tendría algún ascendiente sobre el resto de las personas que concurrieron , si es pastor u otra denominación que pueda tener en este momento, lo desconocemos. Evidentemente existen diligencias pendientes que van a ser decretadas con esa finalidad, pero por el momento no lo hemos establecido fehacientemente", sostuvo Díaz.
En la audiencia de formalización realizado en el Juzgado de Garantía de Los Ángeles, el magistrado Leonardo Llanos acogió las medidas cautelares solicitadas por la fiscalía y también fijó hasta el 30 de junio próximo el plazo de investigación, día en que se realizará audiencia para discutir un eventual sobreseimiento definitivo del delito sanitario y un posible acuerdo preparatorio.
AUTOLESIONES
La situación registrada el miércoles por la noche fue registrada en un video que durante la jornada de ayer fue ampliamente difundido en redes sociales, en el cual es posible apreciar cómo uno de los imputados intenta obstruir el proceso de control e, incluso, se abalanza contra un vehículo simulando un atropello.
Sobre ese punto específico, el fiscal Díaz explicó que si bien las imágenes muestran a una persona que efectuaría acciones que atentan contra sí mismo, "esa no es una situación descrita ni sancionada por nuestra legislación penal, no podemos perseguir a una persona porque intente autolesionarse".
Respecto de as medidas cautelares, el persecutor aseguró que "dicen relación con la gravedad del ilícito investigado, en este caso los tres ilícitos tienen una penalidad bastante baja, por lo tanto solicitamos medidas cautelares proporcionales a esos delitos".
Estos son arraigo nacional mientras dure la investigación y prohibición de acercarse a la víctimas, ambas medidas acogidas por el tribunal.
SUMARIO SANITARIO
Además de la formalización, la Seremi de Salud inició un sumario sanitario en contra del pastor y dueño de la vivienda donde se realizaba la reunión.
La delegada(s) provincial de la Seremi de Salud, Mirna Gutiérrez, rechazó lo sucedido, precisando que incluso los fiscalizadores sanitarios debieron alejarse del lugar, con el fin de que personal de la PDI pudiera detener a los agresores.
"Condenamos este tipo de situaciones en los cuales por hacer cumplir la normativa sanitaria y prevenir más contagios, nuestro personal y en este caso también funcionarios del Ejército que nos acompañaban, resultan agredidos por efectuar su labor fiscalizadora", dijo Gutiérrez.
Recordó, además, que la comuna de Los Ángeles, ya cumple su cuarta semana en cuarentena total, manteniendo 558 casos activos, y casi 10.000 casos acumulados de covid19. A esto se suma que alrededor de 125 personas permanecen internadas en estado crítico, tanto el en el hospital base de la ciudad, como en el resto de la red asistencial de la zona.