Estudio revela que niños y jóvenes de habla hispana tienen mayor índice de obesidad en EE.UU.
Reporte arrojó que prevalencia en hispanoparlantes es 24,4%, cerca de 50% más alta de la de quienes sólo hablan inglés.
Los niños y jóvenes de habla hispana en Estados Unidos, como también aquellos de escasos recursos, presentan índices de obesidad mayores que aquellos que hablan inglés, según un estudio presentado el fin de semana.
El reporte dado a conocer en la conferencia anual de la Sociedad de Endocrinología destaca que entre los niños y los adolescentes estadounidenses, la prevalencia de obesidad en quienes hablan español es 24,4%, aproximadamente un 50% más alta de la de quienes sólo hablan inglés.
En EE.UU., casi uno de cada cinco niños tiene obesidad.
El trabajo presentado consiste en un nuevo análisis de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición de estados Unidos, la que examina una muestra representativa a nivel nacional de la población estadounidense cada año.
ACCIONES PARA PREVENIR
Al recordar que la obesidad infantil "está asociada con múltiples enfermedades en la edad adulta", Hang-Long Li, autor de la investigación, pidió acciones para poder prevenir estos resultados adversos a la salud.
"Se deben implementar medidas de salud pública especialmente diseñadas para los niños de familias de habla hispana, para aumentar la concientización sobre la obesidad infantil al igual que acciones correctivas de salud", dijo el investigador de la Universidad de Hong Kong.
El estudio, destacado como uno de los primeros en identificar una relación entre la obesidad infantil y el lenguaje, considera que presumiblemente una de las razones es que la falta del inglés representa una barrera para entender los materiales educativos sobre una sana alimentación.
Li indicó que los programas actuales diseñados para combatir la obesidad infantil deberían promoverse más ampliamente entre las familias de habla hispana "y deben ser sensibles a las diferentes tradiciones culturales".
Adicionalmente, el investigador hongkonés manifestó su reparo en torno a que las etiquetas situadas sobre los contenidos de los comestibles, "que juegan un importante papel en los esfuerzos de prevención de la obesidad", están solamente en el idioma inglés.
Alternativamente, las familias de habla hispana pueden estar al tanto de los materiales de salud disponibles, pero no están tomando medidas para realizar cambios esenciales en su estilo de vida.
Los programas existentes para combatir la obesidad infantil deben promoverse entre los hogares de habla hispana y ser sensibles a las diferentes tradiciones culturales, sostuvo Hang-Long Li.
ESTATUS SOCIOECONÓMICO
La obesidad igualmente está relacionada con el estatus socioeconómico y el nivel de educación, según el reporte presentado en la Asamblea virtual ENDO 2021.
Así, el índice de obesidad fue de 23,8% en niños de familias de bajos ingresos, en comparación con un 11% de menores en dicha condición en hogares con ingresos altos.
De la misma forma, la obesidad "fue de 26,2% en familias con bajo nivel de educación comparado con 9,4% en familias altamente educadas".
Las medidas para detener esta tendencia podrían incluir la promoción de comidas escolares saludables y una mejor accesibilidad y asequibilidad de alimentos frescos nutritivos en las comunidades pobres, planteó Li.
Los investigadores utilizaron estadísticas de 1999 a 2018 sobre niños y adolescentes de dos a 19 años de edad, encontrando que el promedio de obesidad entre estos grupos aumentó de 14,7% en 1999 a 19,2% en 2018. La obesidad severa en el período y las edades estudiadas ascendió de 3,9% a 6,1%, lo que representó un aumento de más del 55%, dijo Li, para quien "se necesitan urgentemente mejores intervenciones de salud pública para detener la tendencia creciente de la obesidad infantil".
Según la OMS, en 2016 había más de 340 millones de niños y adolescentes (5-19 años) con sobrepeso u obesidad.
MAYORES RIESGOS ANTE EL COVID-19
En varios estudios se ha analizado el nexo entre la obesidad y el covid-19, con motivo de la aparición de este nuevo coronavirus. La Sociedad Española de Obesidad y la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición realizaron un sondeo según el cual las personas con exceso de peso tienen un 46% más riesgo de contagiarse de coronavirus, un 113% más riesgo de hospitalización por covid-19 y un 78% más riesgo de ingreso en las UCI respecto de la población con un peso normal.