Muere el destacado jazzista Cristián Cuturrufo tras contagiarse de covid-19
El músico pasó tres días hospitalizado, luego de presentarse en vivo durante una campaña constituyente.
A mediados de semana se conoció que el trompetista de jazz Cristián Cuturrufo (48), uno de los más destacados exponentes del género en Chile, permanecía internado en la Clínica Las Condes a causa del covid-19. Luego de tres días, durante la tarde de ayer, fue dado a conocer el fallecimiento del autor de 10 discos, quien además mantenía una intensa agenda.
Una falla multisistémica producto del covid-19 terminó a las 16.48 horas con la vida de Cuturrufo, quien en 2019 había lanzado el aplaudido álbum "Socos", inspirado en la costa del norte chico. Ello, porque era originario de Coquimbo. Su hermana Carolina dijo que "(Cristián) la luchó, se fue tranquilo, contento".
El hermano mayor, Rodrigo Cuturrufo, dijo que "tuvo una vida alegre, loca como músico, estamos muy orgullosos. (...) Lo único que les voy a pedir a todos es que lo sigan aplaudiendo". Otro hermano, Marcelo, agregó que "la vida es así, él quiso despegar y quedar como una estrella brillante". Carolina, en tanto, agregó que "fue una persona feliz, hizo una trayectoria y dejó un legado inmenso".
Nacido en 1972, el músico era hijo del acordeonista Wilson Cuturrufo, por lo que el oído lo desarrolló en la infancia y, como buen descendiente de intérpretes, escogió un instrumento distinto al de su padre.
Luego estudió en la Pontificia Universidad Católica (PUC) y en Cuba, donde Cuturrufo aprendió a manejarse con su trompeta entre diversos estilos, como latin jazz, swing y algunos ritmos afro.
En el año 2000 debutó como solista con el álbum "Puro jazz", después de años en bandas donde compartió escenario con músicos como Daniel Lencina Jr, Pancho Molina (Los Tres y Ángel Parra Trío) y el pianista Valentín Trujillo.
Su debut en solitario fue en el Festival Providencia Jazz, uno de los más citados de la Región Metropolitana. Luego trabajó como productor del Festival de Jazz de Las Condes, evento que, hasta antes de la pandemia, reunía a miles de personas y este año fue realizado, también por Cuturrufo, vía YouTube.
Con giras por Nueva Zelanda y el Sudeste Asiático, según el sitio web Música Popular, Cuturrufo participó en noviembre pasado en Cairo Jazz Fest, en Egipto, uno de los pocos eventos internacionales en vivo realizados en pandemia.
La semana pasada, el músico estuvo en encuentros ciudadanos en Vitacura, en el marco de la campaña a la convención constituyente del escritor y fundador de The Clinic, Patricio Fernández, quien publicó en Twitter un video de Cuturrufo tocando en un parque durante una de estas instancias, quizás su última presentación.
"La semana pasada el 'Cutu' lloraba la muerte de (el pianista de jazz estadounidense) Chick Corea, y ahora no puedo parar de llorar por él", escribió Fernández, junto a la grabación.
"Con mucho pesar nos enteramos del fallecimiento del trompetista Cristián Cuturrufo. Músico ilustre de la familia del jazz en Chile y oriundo de la Región de Coquimbo, donde inició sus estudios en la escuela de Música Jorge Peña Hen... Mi sincero abrazo a sus cercanos", manifestó la ministra de las Culturas, Consuelo Valdés.
La Fundación Teatro a Mil, por su parte, lo recordó "un grande de la música y compañero de tantas historias. Emblemático trompetista, siempre estuvo dispuesto a la colaboración. Su música y su sonrisa nos acompañarán siempre".
"Nada es ya lo mismo sin ti. Queda la resonancia de tu música como una verdad dulce, misteriosa y eterna en nuestras almas", agregó en Twitter el músico Manuel García, mientras que Joe Vasconcellos dijo estar "agradecido de la vida por haber podido conocerlo y disfrutar de su inigualable sonido y talento".
"Un gran abrazo a la familia, los amigos, y a toda la comunidad jazzística y musical de Chile. Lo echaremos de menos", señaló el coro del Teatro Municipal de Santiago, mientras que el restorán Las Lanzas de Ñuñoa, donde Cuturrufo solía tocar, envió "un abrazo al cielo".
TRISTEZA EN CONCEPCIÓN
Apenas habían pasado algunos minutos de conocerse la partida del trompetista con una alianza hacia el estilo bebop, músicos de la escena penquista no pudieron esconder sus sentimientos de pesar, frente al trágico hecho.
Años de amistad y relación artística, Marlon Romero se mostró muy afectado por la partida del músico coquimbano.
"Era muy cercano a mi familia, en general, mis hijos -Carla y Marlon- crecieron cerca de él, pues desde chico Cutito compartió con ellos, por lo que nos queda un recuerdo imborrable", señaló el pianista local, recordando siempre el incondicional apoyo que le dio el trompetista a iniciativas como la academia que Romero abrió en 2006.
"Al principio, los primeros dos años, vino siempre los viernes, donde hacíamos Jam Session en la academia, para mover el jazz el Concepción y crear ambiente", acotó Romero, contabilizando en más de 30 las veces que contó con Cuturrufo en el espacio frente a las 30 personas que se juntaban. "Siempre me dio su apoyo en aquellos inicios de la academia", dijo el pianista.
Sobre el aporte que Cuturrufo hizo a la escena sincopada en nuestro país, el artista local destacó que "principalmente acercó el jazz a la gente", como una expresión artística de carácter más popular.
"Además, él era un showman muy carismático, más allá de músico, por lo que era un tremendo gusto verlo tocar. Irradiaba esa alegría tan propia que le imprimía a la música", sostuvo, indicando que Cuturrufo, de alguna manera, continuó el legado festivo de Daniel Lencina en relación al jazz.
"Como Daniel, Cutu nos enseñó a vibrar con el jazz y ser feliz. Aunque era mayor que él, en cierta medida, crecimos juntos. Fue un partner y me enseñó sobre la alegría por la vida la música, y exteriorizar esa felicidad tocando. Eso es lo que lo hace más grande todavía", enfatizó, quien siempre compartió escenario en el Festival Nacional de Jazz organizado por Marlon Romero en el Teatro UdeC. "Vino siempre, en las 16 versiones que hice", recordó sobre la cita suspendida el año pasado por la pandemia.
Ignacio González, nacido en Santiago y con residencia en Concepción hace unos 25 años, amigo del trompetista, recuerda con emoción que "cuando Winton Marsalis le dijo que si quería ser el mejor del mundo, debía ir a Cuba a estudiar. Y Cutu se fue! Un tremendo".
Para el saxofonista es la partida de "la mayor figura del jazz chileno", sobre todo por la manera que tuvo y logró acercarlo a todo el público. "Aparte de su sonido único, fue un artista de enorme estatura. Sin él no tendríamos el jazz que tenemos hoy en Chile", afirmó González, recordando con nostalgia las tardes en la casa de Daniel Lencina escuchando música con él y Claudia Acuña. Era 1989.
Desde 2010, cuando empezó a venir a la Casona del Cinzano Penquista, las jornadas de Cuturrufo junto a la Dixieland Jazz Band quedarán en el recuerdo de muchos. "Cada vez que venía, tocábamos con él, y aunque no era de la escuela tradicional del jazz, sabía mucho. Y cuando agarraba la tonalidad del tema era un maestro de la improvisación", destacó Ramón Cifuentes, de los miembros históricos del conjunto local.
"Los mejores recuerdos, lo agradable que era y cuando tocamos siempre fueron presentaciones muy lúdicas, que las disfrutábamos mucho", agregó el local, sobre aquellas sesiones que llegaron casi a las 10 en el escenario de calle Castellón. "Tiempos que no volverán", como sentenció Daniel Freire, otro de los jazzista que tocó y compartió con él en Concepción.