Después de renunciar a la Democracia Cristiana, Rodrigo Díaz fue tentado por distintos sectores para ir como gobernador regional, pero él prefirió hacer solo el viaje. Dice que fue complicado reunir firmas en pandemia, pero prefiere eso porque, si sale electo, le permitirá definir a su equipo según competencias y no militancia. También, afirma, podrá dialogar con todo el espectro político.

Por eso, cree que más que confrontar al delegado presidencial u otros actores representantes del nivel central, hay que dialogar con ellos y generar convenios para generar acuerdos. En ellos se incluirá a los alcaldes, ya que el 58% de las inversiones de los municipios provienen del Gobierno Regional.

Díaz plantea que haber sido intendente por cuatro años le da una base para iniciar el trabajo.

Como tiene ese conocimiento, una de las primeras cosas que quiere hacer es un nuevo plan regulador metropolitano, uno que "consagre los usos del territorio y que esté a la altura de lo que dice la Estrategia de Desarrollo 2015-2030 y cumpla los estándares que ha planteado Naciones Unidas como objetivos de desarrollo sostenible, pensando que tenemos que crear trabajo pero no de cualquier manera".

En esa línea, será central la actividad económica, pero con respeto a los estándares de sostenibilidad. "La matriz económica de la Región ha ido decreciendo. Tenemos que cuidar las industrias que tenemos y pedirles que avancemos hacia un tratamiento más amigable con los ecosistemas. Pongo de ejemplo lo que hicimos en materia de energía renovable, para resolver el problema de cerrar Bocamina".

Para mejorar la calidad de vida comprometió la construcción de 10 parques, varios de ellos en humedales, y una cancha de fútbol en cada comuna. Para resolver los problemas de congestión que se generan en la Ruta 160 quiere terminar de construir la ruta costera entre San Pedro de la Paz y Coronel. Para reducir la desigualdad entre los territorios aspira a asegurar un porcentaje de financiamiento estable para las provincias de Biobío y de Arauco, más generoso que el per cápita y generar una nueva zona de rezago que tome comunas de la provincia de Biobío, como Alto Biobío y la base cordillerana o San Rosendo.

Algo esencial para lograr todo será resolver el conflicto indígena. Para ello, anuncia, "pretendo emplazar al Estado, los tres poderes que conviven ahí a que parlamentemos".

Pedro Neira ya ha buscado ocupar un cargo de elección popular. En 2016 se presentó como candidato a alcalde por Coronel, ciudad donde vive. Ahora aspira a la gobernación regional, donde quiere proyectar una visión que ponga a las personas en el centro.

"Nuestro primer eje programático son los derechos fundamentales, como educación, cultura y deportes. Queremos que el 25% del presupuesto regional sea definido para educación y cultura, con un especial hincapié en la infraestructura y modernización de nuestras escuelas y liceos", explica.

En salud pretende apoyar la creación de especialidades y perfeccionamiento de los profesionales de salud, generar trabajo en medicina complementaria y darle mayor protagonismo a la comunidad en las decisiones. "Ahí tenemos que fortalecer todos los consejos de desarrollo de las comunidades. También crear atenciones específicas en consultorios y hospitales en el ámbito de la juventud y el adulto mayor", anuncia.

Esta participación también se extenderá a otros ámbitos, como la planificación territorial, lo que implica construir un nuevo plan regulador metropolitano: "Queremos generar un plan maestro de organización de las ciudades en torno a la idea del barrio y una planificación con la participación de la gente en la toma de decisiones y que esto no esté sólo al arbitrio de las empresas, de los grupos económicos. Queremos ciudades donde nunca más pase lo que pasó en Coronel, en Talcahuano y en todo el territorio con las empresas forestales".

Le gustaría impulsar, anuncia, la creación de una institución pública de fomento, desarrollo y producción regional, donde se vinculen los aspectos productivos de los territorios con los centros de estudio.

En medio ambiente quiere propiciar una mesa técnica de agua y para combatir la contaminación pretende potenciar el uso de energía limpia, la certificación de la leña seca a través de cooperativas y la instalación de estaciones de monitoreo de calidad del aire en todas las comunas y que sean independientes de las empresas.

Por ahora su campaña se ha centrado en dar a conocer en qué consiste el nuevo cargo de gobernador regional, qué podrá hacer, y esto lo ha hecho principalmente a través de redes sociales y en las radios. También ha tenido un par de reuniones en sectores donde hay mala conectividad, pero con respeto a las medidas de protección, afirma.

Eric Aedo ganó su cupo por el pacto Unidad Constituyente en una primaria, donde venció a otros cuatro contrincantes. Ahora su propuesta para liderar la región se basa en cuatro ejes: laboral, salud, seguridad ciudadana, pública y desarrollo productivo y medio ambiente.

Se ha concentrado en difundirlas en redes sociales, a través de videos cortos donde transmite ideas fuerza para darse a conocer. Espera utilizar los foros y los espacios en los medios de comunicación para dar a conocer más detalle de sus propuestas.

"Voy a orientar el presupuesto regional al impulso de proyectos que potencien el desarrollo", dice. Para ello piensa en la concreción de obras como el puente industrial, la costanera de San Pedro a Coronel, iniciar la construcción de la ruta Pie de Monte y del puente Amdel, que unirá a las comunas de Hualqui y Santa Juana.

"En desarrollo productivo y medio ambiente es importante que el plan regulador metropolitano quede a definición del gobernador regional y hacer un proceso aun más participativo. Como está hoy, condena a Penco y Coronel a ser zona de sacrificio industrial. Aquí no hay afán de que el desarrollo económico no siga sucediendo, sino que lo haga con un apego más irrestricto a las normas ambientales", anuncia.

Aedo quiere destinar un 2% del presupuesto regional a proyectos medioambientales, ya sea de municipios u organizaciones de la sociedad civil. "Hoy tenemos bonitas ordenanzas de protección de humedales en el Gran Concepción pero que no tienen financiamiento para mantenerlos", expone.

Tiene pensado también impulsar un polo de energías limpias renovables en la provincia de Arauco. "Están todas las condiciones para la energía eólica", estima. También quiere crear un centro de desarrollo de la madera que pueda, entre otros, aportar a las soluciones habitacionales. "Nos definimos como una región forestal, pero aparte de exportar celulosa y rollizos no generamos más valor", plantea.

Impulsará la construcción de infraestructura en salud y apoyará la construcción de más servicios de alta resolutividad (SAR).

Aunque sabe que la seguridad será materia del delegado presidencial, quiere asignar un porcentaje de los fondos regionales para proyectos vinculados a este ítem.

Hace tres años que Ana Araneda milita en el Partido Ecologista Verde, pero hace varios más que está ligada a la temática medioambiental, pues ha asesorado al diputado Félix González en varias materias. Esa experiencia la ayudó a tener una visión crítica sobre el trabajo que se hace en la Región y por eso pensó que sería una buena carta para liderar el territorio desde la Gobernación Regional.

Como ecologista, sus prioridades están relacionadas con la sustentabilidad: "Nuestro compromiso es la responsabilidad ambiental y hacernos cargo de los conflictos. La opción que nos entrega la agenda 2030 es trabajar los objetivos de desarrollo sostenible. Queremos tener una gobernanza hídrica y con todos los actores, no que sea una decisión política o del empresario que tiene el aprovechamiento de estas aguas. También que exista mayor fiscalización a todos los proyectos que están ingresando al organismo de evaluación ambiental. Queremos comprometernos a que la participación ciudadana sea vinculante, sobre todo cuando hay proyectos que contaminan".

Araneda detalla que son ocho los ejes que componen su programa, entre los que se encuentran bienestar y salud; responsabilidad ambiental; equidad de género; educación de calidad para todos; gobernanza hídrica; que la investigación e innovación esté vinculada con el medio; una mejora en la seguridad y responsabilidad social; y la economía circular y tener ciudades más sostenibles e inteligentes.

En bienestar y salud, uno de esos ejes, quiere generar programas de prevención, porque es más fácil y barato que tratar las enfermedades. Para ello propone la generación de programas de barrio del buen vivir, comida saludable y ejercicio, los que se trabajarán con juntas de vecinos y organizaciones territoriales. También incentivará la concreción de proyectos para ampliar y mejorar la infraestructura en salud.

Para Araneda es relevante generar programas de educación sexual, cívica y ambiental, las que se entreguen desde prekínder hasta estudios superiores. También potenciar la seguridad pública a través de planes contra el narcotráfico y la promoción de espacios verdes.

Por ahora se preocupará de difundir estas ideas a través de redes sociales y en reuniones virtuales.