La posible apertura de restaurantes en Fase 2 abre esperanza al gremio local
Dirigentes piden que la determinación se adopte rápidamente, ya que cada semana es clave en la sobrevivencia de los negocios". Algunos emprendedores acumulan deudas de hasta $25 millones.
Desde que la pandemia se agudizó en la Región del Biobío, el sector gastronómico se vio seriamente afectado en sus ventas debido a la imposibilidad de operar en fases prematuras del plan Paso a Paso. De acuerdo a las directrices de la autoridad sanitaria, los restaurantes recién pueden abrir en etapa de Preparación (3), pero con disposiciones especiales asociadas al funcionamiento en espacios externos o la fijación de un aforo interno que no sobrepase el 25%.
Solo hace unos días, sin embargo, el ministro de Economía, Lucas Palacios, deslizó la idea de que los locales gastronómicos emplazados en Fase 2 puedan sumarse a la apertura, lo que beneficiaría especialmente a recintos del Gran Concepción y de otras urbes de la Región. "Estamos evaluando con el Ministerio de Salud la posibilidad de que los restaurantes funcionen en el Paso 2 en zonas exteriores, dado que la experiencia muestra que no generan ningún foco de contagio al estar al aire libre", comentó el secretario de Estado en entrevista con Emol.
El anuncio de Palacios fue tomado por el titular regional de la cartera, Mauricio Gutiérrez, quien explicó que como ha costado a las comunas lograr nuevos avances, "se hace más importante que el trabajo de Economía y Salud salga a la luz pronto, a fin de tener a nuestros locatarios gastronómicos y áreas anexas trabajando en terrazas en Fase 2 para tener ingresos, recuperar empleos y poder contratar a nuevas personas".
Esta decisión, apuntó el seremi, depende netamente de la Autoridad Sanitaria, pues a la fecha desde la cartera económica ya se han realizado capacitaciones, entregado documentos y elaborado protocolos.
"Falta que la Autoridad Sanitaria dé la confirmación si es factible (…) Esto se trata de que se evalúe rápidamente nuestro protocolo de funcionamiento para Fase 3 y pueda ser aplicado parcialmente en Fase 2", sostuvo Gutiérrez.
Según datos de la Seremi de Economía, de los más de 500 restaurantes o recintos gastronómicos regionales inscritos en el Servicio Nacional de Turismo, solo una pequeña parte posee hoy servicios de reparto. El resto mantiene paralizados sus negocios. Esta situación se refleja también en la disminución de recurso humano relacionada y que arroja una baja de 37% entre los trimestres julio-septiembre de 2020 y 2019.
LUZ DE ESPERANZA
Junto con la disminución de personal señalado por la Seremi, los restaurantes del territorio se han visto impactados en materia financiera, ya que los servicios de despacho a domicilio solo ayudan a obtener cerca del 15% de las ventas que hay en períodos normales.
A ello se suma la acumulación de deudas, las que en algunos emprendimientos alcanzan los $25 millones, según reveló el presidente de la Asociación Gremial Barrio Gastronómico Plaza Perú, Manuel Acuña. Por lo mismo, el dirigente llamó a las autoridades a definir pronto esta determinación "porque una semana de diferencia es súper relevante para la sobrevivencia de algunos negocios, y ahí estamos al límite".
"El anuncio del ministro nos parece espectacular, porque ante la dificultad de avanzar hacia Fase 3 el poder abrir las terrazas con las medidas necesarias y el aforo más acotado sería excelente y algo súper urgente", remarcó Acuña.
Humberto Miguel, presidente de la Asociación de Empresas (Asem) del Biobío, organismo que reúne a cerca de 250 entes gastronómicos de la Región, también celebró esta eventual oportunidad. "Esta es una luz de esperanza tremenda porque es algo que venimos solicitando al ministro y al seremi hace bastante tiempo (…) Que nos den la posibilidad de hacer algo en Fase 2 es abrir una ventanita para que se pueda trabajar y una gran señal para el sector", puntualizó
Si bien reconoció que de igual manera no todos los establecimientos podrían abrir debido a las condiciones de infraestructura que poseen, los emprendedores sí verán facilidades a la hora de programar inversiones futuras, a modo de habilitar espacios.
En paralelo a esta medida, el ministro Palacios aseguró además que está en evaluación la idea de incorporar nuevos comercios en comunas con cuarentena para "favorecer una mayor distribución de la oferta de bienes y servicios". Consultado al respecto, el seremi Gutiérrez precisó que se trata de todos aquellos negocios que ofrecen productos no esenciales.