El museo de libro que vivirá donde rompen las olas
En el puerto de San Antonio se atesorarán y exhibirán valiosos tomos dedicados a las odiseas marinas. Paralelamente se abrirá una biblioteca y una librería para todos los vecinos del sector.
Por Amelia Carvallo
Con mascarilla y los resguardos que exige el Covid-19, en el puerto de San Antonio se inauguró hace poco el "Primer Museo del Libro del Mar", iniciativa del abogado Franco Brzovic quien desde enero lidera la empresa Puerto San Antonio.
El museo está instalado en una sala de 35 metros cuadrados del edificio de EPSA en San Antonio, aislado de la biblioteca de uso público y la librería que también es parte del proyecto. El ingreso al edificio -iluminado de manera especial para cuidar las piezas en exhibición-, será limitado y cada documento se mantendrá protegido del sol en nichos de vidrio. Placas explicativas acompañarán cada pieza seleccionada.
Se podrán apreciar manuscritos de Bernardo O'Higgins y de Aníbal Pinto. También, primeras ediciones firmadas por Pablo Neruda con su famosa letra en tinta verde. En el museo también estará el primer libro con los planos originales del puerto de San Antonio -restaurado completamente-, más dos libros sobre la historia de Antonio Núñez de Fonseca y el Descubrimiento de Chile por Fernando de Magallanes, de Max Suckel y Francisco Brzovic.
Se exhibirán, además, libros editados en 1521 sobre los Reyes de Castilla y León y una carta del General Escala dando cuenta de la recepción del Huáscar.
Paulatinamente, se agregarán libros aportados por los miembros de la Sociedad de Bibliófilos de Chile, patrocinador del proyecto.
Solo se exhibirán piezas fijas cuando éstas sean donadas. El resto irá rotando, según la dirección de una curadora que trabajará ad-honorem.
Los horarios de funcionamiento se fijarán más adelante. Niños y jóvenes podrán ver libros contemporáneos, leerlos o pedirlos en préstamo en la biblioteca.
Hasta ahora el museo funciona solo por invitación. A pesar de las restricciones de la pandemia, ya lo han visitado unas 30 personas y este 20 de octubre se inaugurará la sala "Hernando de Magallanes".
"El libro está en el gen del ser humano, llevamos siglos con ellos", comenta Franco Brzovic, miembro de la Sociedad de Bibliófilos Chilenos fundada en 1945 para promover el desarrollo de la cultura del libro en Chile.
-¿Qué lo movió para crear un Museo del Libro frente al mar?
- Siempre soñé, más con el advenimiento de todo lo digital, que a los libros había que conservarlos bien, había que cuidarlos y darlos a conocer con los cuidados que requiere un libro antiguo. Nuestro Museo del Libro del Mar conservará y exhibirá libros antiguos, valiosos, únicos, impresos hace siglos o libros más actuales, conseguidos en sus primeras ediciones. Son tomos que casi siempre están en bibliotecas guardados bajo siete llaves, escondidos, fondeados. Esta será una oportunidad para que la gente pueda apreciar libros de esta naturaleza sin ningún problema.
-¿Cómo surgió exactamente su amor por los libros?
-Mi padre, Francisco Brzociv Radonic, era un hombre muy especial: aparte de su profesión de odontólogo tocaba el piano, pintaba y escribió muchos libros. Uno de ellos fue "Descubrimiento de Chile por Fernando de Magallanes" que plantea que el primero en llegar al territorio donde hoy existe Chile fue Magallanes. Toda la vida lo vi escribir y leer y con el tiempo me empezaron a gustar los libros, esa sensación de olerlos y tocarlos y leerlos, entrar en los mundos que habían ahí. Así nació en mí la afición y el amor por los libros.
-¿Cómo han respondido los vecinos de San Antonio?
-La respuesta ha sido fantástica. Las juntas de vecinos nos dieron un ejemplo de generosidad. Ellos entregaron sus libros al puerto de San Antonio. Yo pedí que ese primer libro, donado por ellos, se exhibiera con una placa: "Primer libro donado por la juntas de vecinos del lugar". A los libros hay que darles la dignidad que merecen. A todos.
En el lugar se podrán apreciar manuscritos de Bernardo O'Higgins y de Aníbal Pinto. También primeras ediciones firmadas por Pablo Neruda con su famosa letra en tinta verde.