Autoridad portuaria en Chile
En muchos estados, el rol de autoridad portuaria está concentrado en una institución. Así ocurría en nuestro país hasta 1997, cuando la Ley N°19.542 modernizó la normativa sectorial transformando la Empresa Portuaria de Chile (Emporchi) en diez empresas portuarias estatales autónomas que se rigen por las normas de la iniciativa legal que las creó y por las regulaciones aplicables a las sociedades anónimas. Estas empresas son fiscalizadas por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), por la Contraloría General de la República y el Consejo de Auditoría Interna General de Gobierno.
De allí que hoy estas empresas, como Puertos de Talcahuano, no solo tengan el mandato de concesionar a privados la operación de los terminales de su propiedad (como San Vicente y Talcahuano), sino que además en su rol de autoridad portuaria cumplan una serie de tareas de control, proyección, coordinación y promoción de una actividad logística portuaria sostenible en lo ambiental, lo social y lo económico.
¿Cuáles son esas tareas?
Primero, realizar una planificación de largo plazo, mediante el diseño de un plan maestro y un calendario referencial de inversiones para sus recintos portuarios.
Segundo, coordinar a los distintos agentes públicos y privados que operan en el puerto y su logística asociada, tarea que se realiza a través del trabajo del Comité Portuario de Coordinación de Servicios Públicos de Talcahuano.
Tercero, regular y controlar el uso de frentes de atraque, lo cual se realiza en base a un reglamento diseñado por cada empresa portuaria estatal.
Cuarto, aprobar las tarifas en el respectivo terminal de acuerdo a lo establecido en cada Contrato de Concesión y supervisar su cumplimiento.
Quinto, revisar técnicamente los proyectos que se implementen en el terminal, tales como extensiones o reparaciones de un frente de atraque.
Todas estas atribuciones de autoridad portuaria se complementan con las que cumplen normalmente el Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones, el Servicio Nacional Aduanas, Servicio Agrícola y Ganadero, el Servicio de Salud, la Autoridad Marítima y la Policía de Investigaciones.
Con esta mirada descentralizada, multipartita y liderada por cada empresa portuaria estatal, se busca que la actividad logística portuaria desarrollada por los privados sea una aporte al intercambio comercial nacional e internacional, con la mayor eficiencia y competitividad. Aunque también que dicho aporte sea con una mirada integral sobre la comunidad y el hinterland que contienen al terminal, de manera que el concepto ciudad-puerto no solo se posicione, sino que se cumpla de manera sostenible.
Rodrigo Monsalve, gerente general de Puertos de Talcahuano