Desafíos ante el flujo migratorio
Una encuesta realizada por el Centro Nacional de Estudios Migratorios de la Universidad de Talca, con la colaboración del Instituto Católico Chileno de Migración, ha revelado que un 60,3% de extranjeros consultados que viven en Chile no volverían a su país de origen, pese al impacto que ha tenido la pandemia y las dificultades económicas y sociales que han tenido que enfrentar.
Los autores del estudio dicen que esa actitud mayoritaria es razonable porque se trata de personas ya instaladas en Chile y no tendría mucho sentido volver para comenzar todo de nuevo.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), son 1.492.522 los extranjeros que al 31 de diciembre de 2019 residían en Chile. Al inicio de la pandemia, el 76,5% de los encuestados había señalado que se encontraban con trabajo, pero que su situación cambió posteriormente, ya que el 30,4% fue despedido, el 21,4% permanece con suspensión temporal de contrato y el 18,2% ha tenido una reducción de la jornada laboral.
Hoy, como consecuencia de la crisis sanitaria y económica debido a la pandemia, tres de cada cuatro inmigrantes considera que el nivel de ingresos de su hogar no alcanza para cubrir los gastos básicos de sus grupos familiares. Los inmigrantes están en situación de mayor riesgo de vulnerabilidad, muchas veces sin tener resuelto su condición de residencia o de ciudadanía o se encuentran en trámite para legalizar su permanencia en el país, cuestión que debido a la emergencia sanitaria se ha vuelto más lenta. En otras oportunidades, la falta de documentación les puede significar perder la posibilidad de trabajo.
La encuesta de la Universidad de Talca reveló que el 78% respondió que siente que en Chile es difícil defender sus derechos cuando son vulnerados y sus principales redes de apoyo ante emergencias son los familiares y amigos, generalmente de su misma procedencia. Además, un 69,6% afirmó que no ha recibido ayuda del Gobierno.
Los resultados del estudio se dieron a conocer en momentos en que la sala del Senado comenzó a debatir, desde el miércoles, el proyecto de Ley de Migraciones, que enfrenta algunas dificultades, especialmente por indicaciones presentadas por los parlamentarios y que el Gobierno trata de frenar, como es la que permitiría a los extranjeros solicitar en algún paso fronterizo una visa laboral transitoria para buscar trabajo, y la que establecería un plazo de regularización de 90 días desde que se publique la ley para los migrantes. Por el contrario, en el oficialismo la idea es colocar más requisitos para regularizar el ingreso de inmigrantes.
Según cifras del INE, Tarapacá, Antofagasta y Arica y Parinacota, son las regiones donde la población extranjera tiene un peso mayor sobre el total poblacional regional. En la primera de ellas, los inmigrantes representan el 16,9% de los habitantes, mientras en nuestra Región del Biobío, esos extranjeros significan el 1,6% del total de residentes. Hay estudios internacionales que dicen que cuando las personas llegadas a un país representan más de un 10% de la población, se generan desafíos relevantes, ya que hay que pensar en proporcionar vivienda, empleo, salud, cobertura previsional, educación para los niños, y desarrollar políticas de inclusión, en las que desde hace meses trabajan diversos ministerios.
Otro punto relevante en el que se ha enfocado el Gobierno en los últimos años ha sido la regulación del proceso migratorio, para que quienes ingresan lo hagan con su documentación al día y con las respectivas autorizaciones. Ingresar con su RUT y visa facilita la inserción de quienes llegan al país en busca de nuevas oportunidades. Por eso, es relevante sincerar la migración que viene a trabajar a Chile y no disfrazarla de un "turismo" que no es tal.
Esto es aún más relevante cuando el país deberá enfrentar un acelerado proceso de recuperación de casi dos millones de empleos perdidos en esta crisis derivada de la pandemia.
Un punto relevante en el que se ha enfocado el Gobierno ha sido la regulación del proceso migratorio, para que quienes ingresan lo hagan con su documentación y autorizaciones al día, lo que facilita la inserción de quienes llegan al país en busca de nuevas oportunidades.