La gestora que llegó a la zona para dejar su marca en el ámbito cultural
Su presencia en Concepción resultó clave durante los últimos cuatro años, para abrir el espacio galo a un público más transversal, a través de la música y el cine.
Orianne Schreiber, quien hasta mañana se desempeñará como coordinadora cultural de la Alianza Francesa, tiene claro que los ciclos deben cerrarse. "Cumplí lo que tenía que cumplir acá, y ahora se abre otro. Así es la vida", dice no sin cierta nostalgia, pero no tristeza, quien pasó los últimos cuatro años de su vida en Concepción.
Muchas de esas jornadas, esta gestora cultural titulada en la ciudad de Estrasburgo, también su cuna hace 30 años, las cumplió en Colo Colo 1. La ubicación del espacio cultural que, señala, siente suyo, y del cual se apoderó organizando una serie de actividades artísticas en representación de la entidad gala. Pero también, buscando la manera de facilitar la sala para compañías de teatro, músicos o artistas del Gran Concepción.
Apunta, en palabras que confirman sus deseos, que quiso buscar otro destino para continuar su labor, por ahora en la vereda de las artes. Hechas las gestiones y planteados sus anhelos, hace algunas semanas, le comunicaron -desde París, centro de operaciones de la Alianza- que su nuevo destino sería Ciudad de México.
En el país del tequila contará con un equipo de dos, para hacerse cargo de la misma coordinación realizada en la capital regional. Sin embargo, en un centro proporcionalmente más grande. "Tal como sentí acá, allá también te dejan el espacio y la libertad para hacer y proponer cosas", indica, destacando que para ello en Concepción siempre sintió el apoyo de la dirección -David Seve- para colaborar en los aspectos culturales y artísticos.
"Me voy contenta y con este nuevo desafío. Siento que es algo que necesitaba (…) Luego de cuatro años en el mismo puesto uno tiene ganas de evolucionar. Sin duda, la etapa en Concepción fue un buen aprendizaje para abrir este espacio y una buena forma de tomar un desafío más grande", alude, quien desarrolló su cargo en la zona desde octubre de 2016.
CRECER EN LA ZONA
Antes de asumir la coordinación mexicana, Orianne dice que pasará unos meses con su familia en Estrasburgo, donde se desarrolló como productora cultural en el municipio, antes de Chile.
- Llegaste y te vas de una ciudad que ha tenido movimientos.
-Cuando llegué a Concepción sentí alguna tensión (antes del estallido social de octubre pasado). Además, siempre me parecieron muy legítimas las causas del estallido social. En lo personal tuve un contrato chileno, con AFP, Fonasa, Isapre, me sentía como una chilena de mi edad que trabajaba. Por eso, participé en las marchas, pues no podía quedarme desconectada, también las de las mujeres porque me sentí identificada.
-¿Cómo la sentiste y la percibes ahora desde lo cultural?
-Antes de venirme no tenía una postura política en sentido global. Acá me nacieron ideales y valores, que fueron bien estimulados por Concepción, siendo bien recibida por esta ciudad. Acá pude tratar temas relacionados con la ecología, las mujeres, las migraciones, todo lo que quiero defender como causa. Me siento feliz de haberlo hecho a través de mi trabajo es algo fundamental y que me hizo crecer mucho.
- ¿Cuál es el aporte que dejas?
-A nivel institucional, acercar la Alianza Francesa a un público más transversal. Eventos, La Fiesta de la Música, me quedará como símbolo y la tendré que hacer en México. Es mi guagua. Feliz veo cómo se desarrolló un proyecto tan grande que evolucionó solo. Nunca repetimos la misma versión pues, simplemente, no se puede hacer lo mismo todos los años.