Importancia de las residencias sanitarias
Una de las certezas que existen sobre la pandemia del covid-19, es que el aislamiento es fundamental para contener la propagación del virus. Por ello, se ha reiterado el mensaje sobre la importancia que tienen las residencias sanitarias que existen a lo largo del país para mitigar el avance de la enfermedad, que hasta ayer había contagiado a 246.963 personas, de las cuales 37.064 se mantienen como casos activos, y que ha dejado 4.502 fallecidos. Esos establecimientos habilitados especialmente permiten a las personas acceder a un lugar de alojamiento que tiene todas las condiciones necesarias para hacer una cuarentena efectiva.
El Ministerio de Salud cuenta con 138 residencias sanitarias en Chile, que tienen 9.014 cupos disponibles, las cuales se están habilitando a medida que las circunstancias lo requieren. Diversos hogares, centros de eventos y especialmente hoteles que no estaban ocupados debido a la pandemia, se transformaron en residencias gratuitas, donde las personas pueden contar con seguridad, alimentación y apoyo en salud por parte de equipos de profesionales, con el fin de hacer un aislamiento efectivo, y si el paciente presenta alguna complicación, es trasladado al hospital más cercano.
La subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, ha señalado que están dirigidas a las personas que han sido diagnosticadas con la enfermedad y que no pueden realizar una cuarentena efectiva en su domicilio, porque no tienen condiciones adecuadas, porque su casa es muy reducida, porque hay personas con una patología crónica o terminal y no pueden exponerse a mayores riesgos, o bien porque los contagiados no son residentes de la ciudad donde fueron diagnosticadas y no tienen dónde permanecer mientras dure su período de cuarentena. A esas residencias son destinadas pacientes mayores de 18 años, diagnosticados con covid-19 y que sin embargo no requieren hospitalización sino el confinamiento. Cuentan con habitaciones espaciosas y algunas de ellas con más de una cama, por lo que incluso se alojan grupos familiares. Se les asegura cuatro comidas diarias, y todos los utensilios son desechables, pero por prevención, las personas no pueden salir de sus habitaciones.
En la Región del Biobío funciona una decena de estos centros habilitados. El último de los que se integró al programa fue el Hotel Umawe, en Valle Escondido, con lo cual existe en la zona una disponibilidad de 421 camas, con una ocupación de alrededor del 40%. El secretario regional ministerial de Salud, Héctor Muñoz, ha señalado que cuando una persona es diagnosticada pero no requiere hospitalización, sino cuarentena y no tiene los medios como confinarse en su hogar, se le traslada aislada en un vehículo y al interior de la residencia también permanecerá aislada en su habitación. Además del hospedaje recibirá alimentación y atención médica para monitorear con frecuencia sus signos vitales.
Hasta la semana pasada, estos establecimientos de la red eran administrados por la Subsecretaría de Redes Asistenciales, a cargo del subsecretario Arturo Zúñiga, pero a partir de ayer pasaron a depender de la Subsecretaría de Salud Pública, que conduce Paula Daza, tal como lo dispuso el ministro Enrique Paris. Asimismo, el manejo de dichos domicilios contará con el apoyo en coordinación del exsubsecretario del Interior Rodrigo Ubilla, quien a principios de mayo retornó a La Moneda como integrante del equipo de asesores de la Presidencia.
Más allá de estos cambios administrativos, es indudable que estos centros tienen una gran importancia con la atención de pacientes infectados pero con síntomas leves, ya que tener un lugar adecuado y con todas las comodidades donde hacer efectivo el aislamiento contribuye a proteger a sus propias familias, cuando viven en condiciones de hacinamiento en sus casas, pero a la vez ayudan a evitar la propagación del virus, que es lo que toda la sociedad necesita.
En la Región del Biobío funciona una decena de estos centros habilitados. El último de los que se integró al programa fue el Hotel Umawe, en Valle Escondido, con lo cual existe en la zona una disponibilidad de 421 camas, con una ocupación de alrededor del 40%.