El creciente impacto del covid-19 en Biobío
La intensificación de la inquietud por el significativo aumento tanto del número de contagios como de las personas fallecidas debido a la infección del covid-19, ha marcado esta semana en la Región del Biobío.
Con ello, también se ha incrementado la necesidad de discutir la precisión con que se ha aplicado localmente la estrategia para hacer frente a la expansión del coronavirus y sus nefastas consecuencias, tanto por la cantidad de víctimas, como por los efectos sociales y económicos de la prolongación de la emergencia sanitaria.
Las noticias, por cierto, no han sido para nada alentadoras.
De hecho, el miércoles las autoridades dieron a conocer en su reporte diario del aumento de 500 nuevos contagios y seis nuevas muertes en la Región del Biobío. Esa cantidad fue nueve veces superior que la del día anterior, cuando se registraron 55 contagios, y se debió a dos factores: 171 contagios correspondientes al reporte diario normal y 329 a diagnósticos que estaban pendientes de ingresar a la plataforma Epivigila o a personas sospechosas de tener el virus y que, de acuerdo a los nuevos criterios adoptados a nivel país, ahora son considerados como confirmados.
Ese mismo día, el intendente Sergio Giacaman admitió la preocupación por el aumento en el número de víctimas, que pasó de 19 a 25. "Esta es la consecuencia más grave de la pandemia que estamos viviendo. Rápidamente hemos visto en las últimas semanas cómo han aumentado los fallecidos en nuestra Región y eso es una noticia muy dura", planteó e instó a la ciudadanía a cumplir las medidas que la autoridad recomienda, como es el distanciamiento social, el frecuente lavado de manos y el toque de queda.
A su vez, el presidente regional del Colegio Médico, Germán Acuña, expuso que este aumento de las cifras es preocupante, ya que revela una situación compleja si no se toman las decisiones correctas: "Estamos lejos del peak y ya estamos poniendo en jaque el sistema sanitario regional", planteó, abriendo el debate especialmente respecto a la actual disponibilidad de camas críticas, que tanto en las unidades de cuidados intensivos y unidades de tratamientos intermedios llegaba ese día al 28%.
El viernes, en tanto, otro dato recogido en el reporte diario aumentó todavía más la preocupación por el efecto de la pandemia en la zona: un total de 20 de las 31 personas víctimas del coronavirus han fallecido en lo que va de este mes. Una clara tendencia que se ha observado especialmente a partir del 12 de junio y que dista mucho de lo que se observaba hasta esa fecha.
En efecto, una simple comparación permite reflejar este hecho y cómo ha evolucionado el avance de la enfermedad en las últimas semanas. Según el reporte del 11 de junio, Biobío presentaba 12 muertes por covid-19 y era la Región con la menor cifra de víctimas de O'Higgins a La Araucanía. De hecho, desde Santiago al sur sólo Los Ríos (8) y Aysén (0), presentaban una menor cifra de fallecidos.
Pero en el lapso de una semana, esa situación cambió drásticamente. De acuerdo al informe del 19 de junio, los fallecidos en Biobío pasaron a 31, con lo cual se superó largamente el número de víctimas en las regiones de El Maule (27), Ñuble (25), Los Lagos (14) y Magallanes (15), además de Los Ríos (10) y Aysén, que se mantiene sin muertes por covid-19.
Estas cifras, que evidentemente se reflejan también en la cantidad de pacientes hospitalizados en unidades de cuidados intensivos -63, según las cifras del viernes último- dan cuenta de cómo ha recrudecido la situación, con el consiguiente impacto en los equipos de salud y la natural preocupación de toda la ciudadanía.
En efecto, la cifra de fallecimientos de junio es cinco veces superior al promedio de 3,6 muertes mensuales que se habían registrado entre marzo y mayo.
El seremi de Salud, Héctor Muñoz, explicó que estos fallecidos son los que ha validado en el Ministerio de Salud y que corresponde a las inscripciones en el Registro Civil del Biobío y que tienen un PCR -examen que confirma el virus- positivo.
Este panorama global obliga a insistir en los llamados a la responsabilidad, tanto para la ciudadanía -que debe comprender por qué es tan importante seguir las recomendaciones más básicas y mantenerse en casa a menos que salir sea estrictamente necesario- así como también a nuestras autoridades regionales, para que efectivamente exhiban el liderazgo necesario para exigir que se apliquen las medidas que sean efectivas para frenar la expansión del virus.
En ese contexto, resulta valorable la convocatoria realizada por el Gobierno Regional a los parlamentarios de Biobío, para establecer reuniones quincenales donde se compartan las preocupaciones, pero también se acuerden acciones concretas que vayan en apoyo de la ciudadanía, tanto para reforzar las medidas sanitarias, como para comenzar a trabajar de manera seria y consistente en el reforzamiento de las medidas que contribuyan a la necesaria reactivación económica.
El complejo panorama global obliga a insistir en los llamados a la responsabilidad, tanto para el autocuidado de la ciudadanía como a las autoridades regionales, para que efectivamente exhiban el liderazgo necesario y exijan que se apliquen medidas que resulten efectivas para frenar la expansión del virus.