Mejoramiento de iluminación en calles y barrios
Desde inicios del presente año, la Municipalidad de Concepción está realizando el recambio en las calles de más de 20 mil luminarias tradicionales, por otras de tecnología LED, que permiten mejorar considerablemente la visibilidad nocturna y dar mayor sensación de seguridad a los habitantes.
Se trata de una iniciativa en la que se realiza una inversión por 5.375 millones de pesos, que fueron aportados por la Subsecretaría de Desarrollo Regional, y que permite entregar una iluminación de mejor calidad y con más eficiencia energética al centro de la ciudad y a algunos barrios.
Los trabajos para reemplazar las antiguas lámparas de gas sodio comenzaron el 2 de febrero, con el reemplazo de 54 luminarias en el perímetro del Parque Bicentenario, previo al desarrollo del festival REC, Rock en Concepción, y luego el programa de mejoramiento se ha trasladado a diversos otros sectores de la comuna, el último de ellos en el tradicional barrio Lorenzo Arenas. Se estima que el plan se prolongará hasta septiembre, cuando se cumplirá el plazo del contrato con la empresa Ahimco Ingeniería y Construcción S.A., a cargo de las faenas.
Muchas son las ventajas que ofrece la iluminación LED, en relación a las fuentes convencionales de luces incandescentes o fluorescentes, como un menor consumo de energía, una vida útil más larga, una robustez física mejorada y un tamaño más pequeño. Utiliza en promedio un 40% menos de energía que la fluorescente y un 80% menos que la incandescente para producir la misma cantidad de energía, de manera que es más eficiente, lo que permite disminuir la huella de carbono, un indicador ambiental que refleja los gases de efecto invernadero que se emiten en cada actividad.
Al inicio del programa la municipalidad penquista definió un cronograma para avanzar con la instalación de los nuevos focos, primero en los barrios que tienen mayor necesidad de seguridad, ya que estos focos, al ser más luminosos, permiten a los habitantes de los territorios tener mejor visibilidad durante las noches, lo que representa un gran beneficio, especialmente en invierno. Se definieron cuatro tipos de luminarias que tienen distintas particularidades en la forma y potencia lumínica, de manera que hay equipos diseñados para iluminar grandes arterias y otros de menor tamaño para calles más angostas, pasajes y otros puntos de la ciudad.
Esta iniciativa ha sido muy valorada por los dirigentes vecinales, ya que en muchos barrios hay luminarias de uso precario, que caducaron en cuanto a su funcionalidad porque han perdido parte del poder de iluminación, lo que se presta para el amparo de la delincuencia y del consumo de drogas. Asimismo, en algunos barrios y en sectores del centro de la ciudad hay luminarias de muy baja potencia, que no alcanzan a dar la claridad necesaria, sobre todo si se considera que muchos de esos postes se encuentran ubicados junto a frondosos árboles que generan oscuridad, con los problemas que ello significa, como el riesgo de caída de las personas en aceras desniveladas, de manera que una mejor iluminación ayuda a que la gente ocupe calles, pasajes y plazas, con más confianza y seguridad.
Las autoridades han puesto, en las últimas décadas, especial atención en los efectos de la alta demanda energética y las emisiones e impactos asociados a la generación. Se han aplicado diversas medidas para tratar de reducir el consumo y a la vez ser más eficientes en su uso. Las antiguas ampolletas incandescentes dieron paso a la iluminación con gas sodio o mercurio y el paso siguiente ha sido el cambio de ésta por LED, que permiten una economía en el consumo y son más amistosas con el ambiente. Lo mismo ha ido ocurriendo en los hogares, tanto con la iluminación doméstica como con el uso de electrodomésticos más eficientes. En ese sentido, es destacable el cambio en los sistemas de iluminación pública que se realiza en diversas comunas.
Esta iniciativa ha sido muy valorada por los dirigentes vecinales, ya que en muchos barrios hay luminarias de uso precario, que caducaron en cuanto a su funcionalidad porque han perdido parte del poder de iluminación, lo que se presta para el amparo de la delincuencia y del consumo de drogas.