Covid-19: estrategia para controlar la propagación
El nuevo coronavirus (covid-19) es una cepa viral que no se había identificado anteriormente en seres humanos. Es un virus que se ha extendido muy rápido por el mundo, debido a que se propaga fácilmente entre las personas. Se transmite entre quienes tienen contacto cercano con un enfermo o a través de la tos y los estornudos.
Dentro de las recomendaciones prioritarias entregadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para lograr ralentizar la propagación se encuentra la cuarentena, el aislamiento, el distanciamiento social, el cierre de escuelas y la higiene de manos, entre otras.
Si bien es cierto que todas las medidas mencionadas están siendo llevadas a cabo por nuestras autoridades sanitarias, es importante que podamos conocer qué dice la evidencia científica frente a estas acciones. ¿Qué tan efectiva puede ser la cuarentena por si sola o combinada con otras medidas de salud pública para poder controlar la propagación del nuevo coronavirus?
Para dar respuesta a lo planteado anteriormente, utilizaré la revisión de Nussbaumer-Streit B, que fue publicada la primera semana de abril del presente año. El investigador citado, para poder obtener la mayor cantidad de información científica disponible, incluyó estudios sobre virus similares como el Síndrome Respiratorio Agudo Grave (Sars) y el Síndrome respiratorio de Oriente Medio (Mers).
Dentro de los resultados del trabajo, podemos encontrar que fueron incluidos 29 estudios, de los cuales 10 se centraban en el covid-19, 15 en el Sars, 2 en el Sars y otros virus, y 2 en el Mers. Es importante mencionar que la mayoría de los estudios combinaron los datos para crear un modelo de predicción y evaluar cómo podrían ocurrir los eventos a lo largo del tiempo.
Dentro de los resultados principales, encontramos que todos los estudios determinaron que la cuarentena era fundamental para lograr reducir el número de personas infectadas y de muertes. Y que combinación de la cuarentena con otras medidas de prevención y control tuvo un efecto mayor que la cuarentena por sí sola.
Por tanto, en base a la evidencia plasmada anteriormente existe un sustento científico para que continuemos quedándonos en nuestros hogares y a su vez adicionar las medidas de higiene básicas que ya son conocidas por todos y todas.
Como miembro del Departamento de Salud Pública de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC) quiero aprovechar de hacer un llamado a tomar conciencia frente a la situación sanitaria que estamos viviendo no tan solo en nuestro país, sino que a nivel mundial y recordar que es tarea de todos que el nuevo coronavirus no siga propagándose a una velocidad elevada y así poder aplanar la curva de la que tanto se habla.
Por Raúl Aguilera,
epidemiólogo
clínico del
Departamento de
Salud Pública UCSC.