Jarry y Ducó: el escenario ante competencias suspendidas
Con la postergación de los Juegos Olímpicos de Tokio aplazados al 2021, aún sin fecha oficial confirmada, nace una nueva oportunidad para dos deportistas chilenos. Es el caso del tenista Nicolás Jarry, suspendido provisionalmente por la ITF tras arrojar doping en la Copa Davis 2019, y de la lanzadora Natalia Ducó quien cumple una sanción de 3 años por el uso de una hormona de crecimiento prohibida.
El escenario más alentador es el del tenista, que ya lleva tres meses de suspensión provisoria y más importante aún, un tiempo que sigue corriendo pese a la cancelación del ATP por el coronavirus, debido a que en el Código Mundial Antidopaje no existe nada escrito sobre pausas en el circuito mundial.
Y la segunda buena noticia para el tenista nacional es que el ranking ATP está congelado, por lo que Jarry se mantiene en la posición 89 hasta que vuelva la actividad en el circuito profesional.
En paralelo, junto a su equipo, Jarry trabaja para saber realmente cuál será el castigo que podría recibir y que, en el mejor de los casos, podría llegar hasta los diez meses, lo que implicaría volver a la actividad a mediados de noviembre.
CASO DUCÓ
En tanto, algo más complicada se ve la situación de Natalia Ducó, la lanzadora que termina su castigo de 3 años en abril del 2021, lo que le daría la posibilidad de estar en la cita olímpica de Tokio en el caso que se realicen en julio de ese año. ¿Por qué? Debido a que si entre abril y julio, Ducó realiza las marcas mínimas pedidas por la IAAF, llegaría a los Juegos Olímpicos.
Sin embargo, el panorama se complica para la chilena en el caso que el evento deportivo se realice en marzo, fecha que ha sonado como tentativa según el diario japonés Nikkei, lo que implicaría quedar fuera de los Juegos Olímpicos.
Recordar que a la oriunda de San Felipe se le detectó GHRP-6, una sustancia considerada hormona de crecimiento estrictamente prohibida por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).