Subsecretario del Interior: "Sistema de inteligencia tiene debilidades"
El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, reconoció ayer que las operaciones de inteligencia para saber quiénes han provocado desmanes en la vía pública durante la crisis social, específicamente en Plaza Baquedano, en el centro de Santiago, no han sido óptimas porque el sistema "tiene debilidades".
La autoridad fue consultada sobre qué está haciendo La Moneda para identificar a quienes estarían protagonizando los desórdenes en las manifestaciones, a lo que respondió en Estado Nacional de TVN, que "lo lógico es que esa información esté permanentemente analizada y se tomen decisiones preventivas para evitar que esos hechos ocurran, pero no hay que anunciarla. Algo que muestra la experiencia pasada es que nuestro sistema de inteligencia tiene debilidades, y por lo tanto nos gustaría tener más información de la que tenemos hoy".
El subsecretario Galli fue consultado respecto de la estrategia de copamiento preventivo impulsada en el sector de Plaza Baquedano, Santiago, tras la llegada a la intendencia de Felipe Guevara. Ayer el subsecretario dijo al respecto que "las estrategias operativas no se anticipan, y dependen de las circunstancias de los hechos".
El abogado explicó que el Ministerio del Interior ante un evento que requiera seguridad primero debe revisar los "objetivos y después evaluar sus resultados, pero a quien le toca la estrategia operativa son los servicios de ejecución, por lo tanto será Carabineros, la PDI. Pero lo que nos toca es evaluar".
"En una primera instancia, (el 'copamiento') podría haber sido una estrategia similar a la que se venía utilizando, ahora es más selectiva: encontramos a los que tienen las bombas molotov, los detectamos, se les detiene, y ahora tenemos una causa penal que, probablemente, si es que la Fiscalía y la Justicia así actúan, va a terminar en una condena para esa persona", detalló la autoridad.
agua amarilla
Un carro lanzaguas arrojó un líquido amarillento a las personas que ocuparon Plaza Baquedano el viernes. El hecho se difundió en Internet y Carabineros sacó de circulación aquella misma tarde al vehículo policial, para luego anunciar una investigación sobre qué contenía el agua, aunque de forma preliminar se indicó que era un tipo de gas lacrimógeno.
"Efectivamente, uno de los carros lanzaguas arrojó un líquido que tenía una coloración distinta", afirmó Galli, detallando que "la Fiscalía envió un equipo a tomar muestras (...) esas muestras están en examinación".
Sin embargo, detalló la autoridad, "ninguna persona (esa tarde) llegó a centros asistenciales con quemaduras, lo que puede haber habido es mayor irritación, pero obviamente los gases lacrimógenos producen irritación. Con lo que nos quedamos es que no hay una persona que haya sido atendida por quemaduras, y el resultado de la investigación tiene que arrojar qué sucedió en ese caso, que puede haber sido una falla mecánica, una mala operación, vamos a tener que esperar la investigación".