Solo Vinilos pretende convertirse en un espacio para gozar con la música
Un proyecto que fue avanzando de manera natural, transitando por una ruta, que hoy tiene a Solo Vinilos convertido en un espacio físico. Uno que cobija alto tan etéreo como la música, como expresión sonora, llevándolo al formato físico. El vinilo es, entonces, el gran protagonista de una historia que encuentra a David Viveros en el centro del relato.
A partir de hoy, la dirección de San Martín 710 contará con una cantidad en rotación que bordea los 2.500 discos. Cifra que Viveros señala hasta con cierta admiración, pensando que en los inicios de la iniciativa hacia el 2012 -como propuesta online- no tenía más de 40 discos en circulación.
"Funcionaba como una pequeña empresa paralela a las ferias del vinilo (primera versión se remonta al 31 de agosto de 2011). Se trataba de vinilos que tenía repetidos que ofrecía muy a lo amigo y bajo perfil, casi como un juego", recuerda este arquitecto de profesión y autodeclarado "apasionado melómano" de 42 años.
Ocho años después lo que partió como una iniciativa realizada desde la pasión por los discos (de vinilo) se fue convirtiendo en una opción de vida, sobre todo, a partir del 2015.
"Lo tomé como algo más en serio cuando volví de España ese año. Me encontré sin trabajo y lo planteé como una forma de complementar renta", reconoce, quien se trasladó a Madrid, para realizar un master en Arquitectura Sustentable, entre 2014 y el año siguiente.
UNA OPCIÓN CONCRETA
David Viveros comenta que esta opción de trabajo, también motivada por la gran cantidad de ejemplares traídos desde tierras españolas, le hizo notar que en Concepción había un interés por los vinilos. "De las amistades primeramente que querían discos que yo tenía", dijo, quien al poco tiempo emprendió esta apuesta de manera formal como empresa constituida. Pero siempre de manera online, a través de redes sociales, con un promedio de 200 a 300 álbumes disponibles.
-Fue un proceso lento, porque cuando armé mi oficina de arquitectura en 2016, tenía discos ahí y y el desarrollo de mi trabajo. Eso fue en aumento.
AHORA EN UN LUGAR
Contando con un espacio en la tetería Quiero Té (desde 2017), Viveros notó el creciente interés de la gente por los vinilos. "La decisión de abrir una tienda -junto a su socio Pablo Martínez- la tomé en diciembre (...) O perdía el local y comenzaba la peregrinación o me quedaba acá y generaba la tienda, finalmente, el sueño de todo melómano es éste.
-En ese sentido, el aporte que queremos dar es fortalecer la información que se entrega desde ese formato. Si pasas a un vinilo estás interesado en la investigación sonora, materización y eso se valora, la calidad del registro, lo cual ya es un aporte cultural.
Respecto al material disponible -ronda en un acceso a 50 mil títulos- el encargado anota que el producto local es relevante para Solo Vinilos, es decir, contar con material editado en este formato por las bandas penquistas y Biobío.
En cuanto a lo nacional, señala, desde Violeta Parra a los Bunkers. "O sea, material que esté editado en vinilo. Actualmente se puede tener acceso a un catálogo de más o menos 200 títulos", indica Viveros consideración que extiende a Latinoamérica, especialmente, Argentina, Brasil, Perú y México.
Y de ahí para arriba, desde los Beatles hasta lo editado en 2020, pasando por el jazz y compositores clásicos. "Hablamos de 2.500 discos que es lo que podemos tener en la tienda, pero podemos acceder a un catálogo de encargos".
-Claro, pues además estamos pensando en Los Ángeles, Chillán, Temuco, Valdivia e incluso Argentina (Neuquén). La idea es crecer hacia otras partes.
En otros ámbitos
Una de las líneas de trabajo será promover eventos relacionados con vinilos. Esto implica ferias, como también musicalizar eventos y acciones con calidad musical.