Chadwick: "No tengo ninguna responsabilidad política"
Gritos, empujones, interrupciones y suspensiones momentáneas marcaron la tensa sesión de la Cámara de Diputados en que el ministro del Interior y Seguridad Pública, Andrés Chadwick, entregó antecedentes sobre lo que ha hecho el Gobierno frente a los sucesos de violencia y el estallido social de los últimos días.
El momento más tenso se vivió cuando la diputada del Frente Amplio Pamela Jiles se acercó, junto a otras diputadas del bloque, hasta la mesa de la Cámara para sostener pancartas con las cifras de detenidos y heridos en estas jornadas de estado de emergencia y toque de queda. Diputadas de Chile Vamos se acercaron para detener a Jiles y quitarle su cartel, como intentó hacerlo Érika Olivera. Marcela Sabat (RN) trató de calmar a Jiles y Paulina Núñez (RN) estuvo a los empujones con ella.
El presidente de la Cámara, Iván Flores (DC), llamó a la calma y sancionó a todas las diputadas del Frente Amplio involucradas. "No traslademos el conflicto al Parlamento, por favor", pidió.
EXPOSICIÓN
"Son momentos difíciles y creo que el respeto que nos debemos debe ser desarrollado entre todos. El estado de emergencia se desarrolla dentro del estado de derecho", afirmó el ministro Chadwick en su intervención. "Hemos enfrentado una situación de violencia y acción vandálica como yo no tengo recuerdo de haber vivido en estos últimos años". Añadió que si bien son válidas las diferencias, hay que estar unidos en "rechazar las acciones de violencia y vandalismo que nos hacen daños a todos".
"La democracia se prueba cuando todos estamos unidos contra la violencia y en favor de la paz. Y no cometamos errores históricos porque esta es la exigencia de hoy", expuso el secretario de Estado.
Aclaró que "no tenemos ninguna voluntad o intención de estar declarando estados de emergencia en forma permanente o habitual. Por el contrario, el Presidente es quien tiene y debe tener el mayor interés y compromiso de que el país pueda desarrollarse con completa normalidad y no tener que recurrir nunca a un estado de excepción".
Consultado fuera de la Sala por las muertes y presuntos apremios en el marco de la acción policial y militar, dijo: "No tengo ninguna responsabilidad política".
Reportó 814 lesionados, incluidos 254 son civiles y 560 uniformados; y 4.337 detenidos. Dijo que los antecedentes han sido entregados a la Fiscalía y que las investigaciones y sumarios están en curso. Añadió que se han registrado 904 hechos de violencia graves, incluidos 18 buses quemados y 329 supermercados saqueados y/o incendiados.
En la sesión, el diputado Miguel Crispi, de Revolución Democrática, dijo: "Chile vive un estado de conmoción nacional iniciado por una protesta legitima (…) Ministro, la violencia es desproporcionada. Es ineludible su responsabilidad en el manejo que ha dado a esta situación. Hay gente muriendo en las calles. La democracia no acepta la violación a los derechos humanos".
Ximena Ossandón, de RN, condenó "la violencia, la destrucción y la impunidad". Y añadió: "Estoy por la manifestación legitima. Creo que hoy nadie duda que existen dos Chiles paralelos. Hagámonos cargos de la demanda y del malestar; no es problema solo de este Gobierno".
SOLICITUD A LA ONU
Un grupo de 45 diputados de los partidos de oposición, desde la DC al Comunista, solicitaron a la alta comisionada para los Derechos Humanos de la Organización de la ONU, Michelle Bachelet, que envíe observadores al país.
Los congresistas denunciaron ante el órgano internacional "los graves hechos de violencia y la vulneración de derechos fundamentales" por parte de las Fuerzas Armadas y de Orden.