El humor seco, o la "deadpan comedy", consiste en la dislocación de los factores expresivos en medio de una situación humorística. Digamos que algo falla, intencionalmente, en el proceso que va desde el gesto al remate. No es fácil rastrear su origen pero, si saltamos al pasado, podemos encontrar ese humor seco en algunas películas de Buster Keaton y en las excéntricas rutinas de Andy Kaufman, quien, por ejemplo, se paraba sobre el escenario con el puño alzado al son de la canción de "El Súper Ratón" (una de sus rutinas más célebres) y una vez llegó lejos al leer "El Gran Gatsby" para una audiencia que se retiró indignada.
Fred Armisen, un declarado admirador de Kaufman, comenzó a practicar la "deapan comedy" en el programa "Late Night with Conen O'Brien" y en varios productos televisivos de la irreverente marca "Adult Swim", hasta que pasó a formar parte del elenco de "Saturday Night Live". Luego, en el año 2011, debutó con "Portlandia", serie creada junto a Carrie Brownstein, en la que se mofó del progresismo y la cultura alternativa que reinan en la ciudad de Portland, en Oregon.
Su última apuesta es "Los Espookys", serie de HBO (la primera que la cadena realiza en español para el público gringo) que se construye sobre una obsesión que a Armisen le quedó de un reciente viaje a México: su fascinación por la fuerte escena gótica del DF.
Los personajes protagónicos -un amante del cine de terror clase B, una dentista, una chica rara y un millennial millonario que fue adoptado por un magnate de la industria del chocolate- son especialistas en efectos especiales que usan para engañar a la gente. Todo comienza cuando un cura (interpretado por Luis Gnecco) les pide ayuda para simular una sesión de exorcismo con el fin de aparecer en un sensacionalista programa televisivo. Después de esa experiencia, Los Espookys se especializarán en engaños sobrenaturales.
El humor seco se impone en todo momento. La risa es provocada por el vacío o por el absurdo que Armisen siempre ha defendido. El exotismo, con cierta cuota de manierismo vinculado a lo latino (a ratos recuerda a la película "Nacho Libre", de Jared Hess), complementa bien la estrategia elegida para despertar -o ahogar- risas.
Ahora bien, la presencia de Gnecco no es casual. Con la productora Fábula en medio de la producción, y el apoyo de fondos públicos chilenos, "Los Espookys" fue íntegramente grabada en nuestro país. Actores locales como Koke Santa Ana, Dindi Jane y Cristóbal Tapia Montt tienen sus apariciones y la fotografía corre por cuenta de Benjamín Echazarreta ("Una mujer fantástica"). Esto vuelve aún más singular una producción dislocada que cada semana estrena un nuevo capítulo.