Fuertes ráfagas dejan 21 damnificados en Dichato y decena de casas sin techo
"Me despertó el viento, un estruendo, pensé que era un temblor porque la casa empezó a moverse, de ahí escuché las latas caer (...) Miraba hacia el cerro y los arboles se movían como látigos, ahí me di cuenta que era viento, pero era fuertísimo. Esto fue 40 ó 50 segundos".
Así describió Luis Salas, tomecino de toda la vida, las ráfagas de viento que afectaron a Dichato la mañana de ayer y que dejaron unas 10 casas con daños y a 21 personas damnificadas. Aseguró que nunca antes había visto algo así.
De acuerdo a la información aportada por la Oficina Nacional de Emergencia, Onemi, el evento meteorológico -que no fue calificado ni como tromba ni como tornado- consistió en rachas de viento que alcanzaron los 60 kilómetros por hora en el sector La Posta de Dichato. Específicamente, las casas están ubicadas en Bombero Silva y Libertad.
El episodio además destruyó postes y cableado eléctrico, por lo que los 585 clientes de la localidad tomecina quedaron sin suministro eléctrico.
Los equipos de emergencia de la Municipalidad de Tomé actuaron con rapidez para reponer los techos con planchas de zinc y nailon, para capear las lluvias del sistema frontal pronosticado para la Región. Junto a Bomberos, personal de Onemi y CGE trabajaron en la remoción de escombros para reponer los servicios suspendidos con grúas y maquinaria en el lugar.
Según indicó la directora de la Onemi, Carolina Zambrano, este fue el único evento que produjo afectaciones fuera de lo normal en la Región. Desde ayer la Onemi comenzó el Monitoreo por Sistema Frontal, registrándose nevadas en sectores cordilleranos de las comunas de Antuco, Santa Bárbara, Alto Biobío y Mulchén.
No fue tromba
El alcalde de Tomé, Eduardo Aguilera, explicó que recibió distintas versiones del fenómeno ocurrido. La mayoría de los vecinos aseguraron divisar una tromba que se acercaba desde la costa.
Según indicaron algunos vecinos del sector, los vientos más fuertes tuvieron lugar alrededor de las 7.15 de la mañana, momento en el que se habrían producido los daños en los inmuebles.
Desde la Onemi, no obstante, explicaron que el evento meteorológico no correspondió ni a una tromba ni a un tornado, sino que fueron rachas de viento que alcanzaron altas velocidades.
Sobre esto, el alcalde Aguilera dijo que "no tengo por qué dudar de los vecinos que lo vieron, porque estamos acostumbrados a los fuertes vientos y nunca hemos tenido consecuencias como esta".
El intendente Sergio Giacaman visitó la zona afectada y tras constatar los daños, explicó que "la Onemi no ha tipificado con algún nombre este fenómeno, pero sí quienes viven en el lugar pudieron constatar que entre las 6 y 7 de la mañana hubo vientos y lluvias muy intensas, que en esta zona por ser costera se intensifican mucho más".
Uno de los daños que aún no presenta claridad es la caída de un árbol ubicado al interior de una propiedad. Según Carla Salas, quien transitaba por la calle Bombero Silva en vehículo junto a su hija, pasadas las 7 de la mañana, aseguró ver un rayo que cayó en el árbol, partiéndolo y provocando que sus múltiples ramas se desplomaran por la calle Bombero Silva y sobre su auto.
Aunque las autoridades creen que el destello pudo ser producto del corte de luz, Salas aseguró que el suministro se suspendió a eso de las 5 de la mañana.
Ayuda y evaluaciones
Según el informe entregado por la Onemi, el daño fue estructural y no se registraron personas ni equipos de emergencias lesionados por el evento meteorológico. Hasta la tarde de ayer, de las 10 casas afectadas, siete continuaban en evaluación por parte del personal municipal, mientras que las otras tres ya habían sido revisadas. Corresponden a inmuebles de veraneo.
Luego de cubrir la necesidad de las techumbres con recursos municipales, a la espera de que Onemi reponga los costos asociados, el jefe comunal de Tomé explicó que "a través de nuestra oficina de asistencia social vamos a entregar frazadas, colchonetas, ropa de cama seca para que ellos no tengan dificultades para pasar esta noche".
Damnificados
Según el informe de la Onemi, se registraron cinco adultos mayores, seis niños y 11 adultos damnificados en total por los destrozos de los fuertes vientos.