Los últimos informes y proyecciones económicas dan cuenta del repunte que nuestro país está teniendo. Esto también se ha visto reflejado en la Región del Biobío, donde la empleabilidad, en especial de las mujeres, está mostrando cifras positivas.

Sin embargo, mejorar la calidad de vida de las personas no es un trabajo que termine sólo con las buenas cifras, sino que exige un esfuerzo constante en diferentes ámbitos. Es por esto que el Presidente Sebastián Piñera presentó el proyecto de ley Pro Consumidor, que viene a corregir asimetrías y mejorar la relación entre el comercio y los consumidores.

Los hábitos de consumo se han ido modificando drásticamente a nivel mundial tras la irrupción de las nuevas tecnologías, y Chile no es la excepción. Un estudio Adimark del año 2018 señaló que más del 65% de los chilenos buscan productos o servicios por internet al menos una vez por semana.

En este mismo sentido, los viajes en avión durante 2018 batieron un récord con 24,5 millones de pasajeros, lo que representa un crecimiento de casi 10% con respecto al año anterior. Es decir, ya no se trata de un privilegio para un pequeño grupo de la población.

De esta forma, el consumo en nuestro país ha logrado extenderse a nuevos segmentos, por lo que proteger a los consumidores es proteger en su gran mayoría a las familias de clase media.

Para lograr esto, el proyecto de ley Pro Consumidor presenta cinco iniciativas que vienen a mejorar la relación del mercado con los consumidores y actualizarla a las exigencias del siglo XXI.

La primera iniciativa apunta a facilitar el término de contratos de adhesión, los que muchas veces se contratan por internet o teléfono, pero sólo se pueden finalizar de manera presencial en oficinas de la empresa, haciendo más engorroso y largo el trámite.

En segundo lugar se busca crear una Central Electrónica de recetas médicas. Con esto, los pacientes sólo deberán ingresar su RUT en la web de las farmacias para que estas verifiquen la receta en la Central y expendan el medicamento de forma online, pudiendo ser entregado en la dirección del paciente.

La tercera iniciativa pretende asegurar el derecho a retracto en compras electrónicas, algo que actualmente puede ser excluido por los proveedores, imposibilitando el término del contrato en este tipo de compras.

En cuarto lugar está el aplicar mejoras a las compensaciones por sobreventa de pasajes aéreos, para ajustar los estándares a los de la Unión Europea y Estados Unidos en cuanto a las regulaciones y a los montos de las compensaciones.

Finalmente el proyecto plantea que los consumidores puedan elegir si usarán la garantía legal o la del proveedor al comprar un producto, y que esta última nunca podrá ser menor a la legal.

Este proyecto de ley, enmarcado en la Agenda Pro Consumidor, traerá mayor simetría en el trato de los consumidores y el comercio, resguardando los derechos y ampliando los beneficios. De esta forma, estaremos mejorando la calidad de vida de millones de chilenos que cada vez tienen mayor acceso a bienes y servicios.

Seremi de

Gobierno

del Biobío