Provincia del Biobío se consolida como el polo agroindustrial de la Región
Hoy, cuando muchos siguen pensando que la Región del Biobío queda casi desvalida tras su división administrativa con Ñuble, lo concreto es que nada está más lejos de la realidad. Y de ellos están absolutamente convencidos los empresarios, muy ligados principalmente a la agricultura y la ganadería de la Provincia de Biobío. Y no solo es en el discurso, sino en un trabajo concreto que pocas veces vemos desde la capital penquista.
Ejemplo de ello, es la Sociedad Agrícola El Álamo y Frutícola El Volcán. Una sociedad que combina su trabajo como productores de cerezas y arándanos, con el de empacadores y prestadores de servicios de packing, entre los que destacan a Best Berry Chile S.A., compañía creada por productores agrícolas con el propósito de participar en el comercio directo de productos frutícolas en el mundo a través de alianzas estratégicas en Europa y Asia y en donde buena parte de la fruta que producen desde la Región Metropolitana hasta Puerto Montt, se embala en estas instalaciones.
Así lo relata Francisco Novales, director ejecutivo de la Sociedad Agrícola El Álamo,quien agrega que todos los socios, cinco en total, son productores de berries.
Él mismo inició con la producción de arándanos en 2004 con unos socios alemanes en un 50%, y el otro 50% con la familia Hune, reconocidos productores también de Biobío, con quienes ya en 2011 se asociaron para comprar el campo donde están hoy, con el packing.
Crecimiento constante
Hoy son los prestadores de servicios de embalaje de arándanos más grandes de Chile. En las instalaciones se han invertido unos US$10 millones y ya a partir de la segunda semana de noviembre el movimiento comienza a tomar más velocidad hasta marzo, cuenta Novales. Y cada año se va haciendo más bullente en cuanto al procesamiento y volúmenes procesados. "La última temporada fue mucho mayor que la anterior, aunque los precios fueron algo más bajos, influidos por el tipo de cambio, los resultados fueron similares a los de la temporada previa". Se lograron ventas en torno a US$1,4 millón.
La relevancia que está ganando la agroindustria y la fruticultura están cambiando silenciosa y gradualmente el rostro productivo de la provincia de Biobío y abriendo más puertas al mercado del trabajo. Es así que solo en esta empresa trabajan sobre mil personas, incluidos un grupo no menor de inmigrantes, y para esta temporada se prevé que lleguen a las 1.400, las que se concentran desde el 25 de diciembre en adelante hasta el 15 de enero, en su mayoría de sectores rurales de la zona. En forma estable la dotación fluctúa entre las 700 y 900 personas que se reparten en manejo del campo.
Eso, explica Francisco Novales, "sin contar los empleos indirectos que se generan, como choferes de camiones y transporte en general, etcétera., porque atendemos desde las regiones de O'Higgins a Los Lagos".
Advierte que el empleo joven puede contribuir bastante en la época estival cuando escasea la mano de obra, pero que tal como está hoy la legislación lo que hace es entorpecer y desincentivar la contratación. "El joven que trabaja y que puede aportar con su ingreso al hogar y para sí mismo, es un joven que se salva de la droga", dice.
eficiencia
El ejecutivo destaca que de producción propia se procesan y exportan unas 200 toneladas de cerezas y 1,2 millón de kilos de arándanos. De esos, el 30% va a Asia, el 30% a Estados Unidos y el resto a Europa. Pero en total, en el packing se procesan 7 millones de kilos de frutas. "El avance tecnológico hoy permite que los procesos sean muchísimo más eficientes". En Chile, enfatiza, "somos los mejores del mundo en el manejo de postcosecha, conservando el fruto óptimo en color y frescura, condiciones que se mantienen hasta la mesa del cliente final".
EN AVIÓN POR EZEIZA
Aquí es donde Novales echa de menos la poca infraestructura pública para una mejor fluidez del comercio internacional. Dice que en diciembre cuando hay pedidos especiales el aeropuerto de Santiago colapsa lo que les ha obligado a tener que despachar la fruta a través de Ezeiza en Buenos Aires.
Chile es un país que ha hecho consumir frutas al mundo y es un sector que tiene aún un alto potencial de crecimiento, además porque la población está envejeciendo y no es fácil para ellos el consumo de frutas duras, lo que otorga a los berries y frutas como las cerezas, una doble ventaja competitiva, concluye el director ejecutivo de la Sociedad Agrícola El Álamo, Francisco Novales.